Más allá del Mar Oscuro (Disponible en físico)

⚔Capítulo 29⚔

La princesa se marchó, dejándolos a solas y con un ambiente tenso.

¿Por qué Nira tuvo que mencionar ese tema?, pensó Lyandreu enojada.

Hurson se aclaró la garganta, incómodo. Lyandreu intentó pensar en algo para no hablar sobre el tema, pero él se adelantó.

—Entonces... ¿qué fue eso?

Ella se quedó en silencio por un momento.

—Era una conversación privada —dijo en voz baja pero con tono molesto.

Él sonrió.

Tenía que detener esto.

—Quita esa sonrisa, no es lo que piensas.

Hurson se apartó del árbol y caminó con calma hacia ella.

—Sé lo que escuché, Lya. —Se detuvo a pocos centímetros de ella. Él era al menos una cabeza más alto que ella—. Además, no lo negaste.

Lyandreu intentó sostenerle la mirada, mas no pudo. Tuvo que darse la vuelta y alejarse.

—No quiero hablar de esto.

—Nunca hablamos de esto.

Ella estaba casi segura de que si se volteaba a mirarlo, encontraría una mirada triste.

—¿Por qué, Lyandreu? ¿Por qué no quieres hablar conmigo?

"¿Por qué?" Esa era la pregunta que ella siempre había evitado. Nunca se detuvo a pensar en ello.

Se abrazó a sí misma.

—No lo sé.

—Yo sí.

Lyandreu lo miró confundida. Hurson le dio la respuesta.

—Tienes miedo. Aunque aún no logro descifrar a qué.

—No le tengo miedo a nada.

Lyandreu se sorprendió por lo falsas que salieron esas palabras de su boca.

Hurson sonrió con tristeza.

—¿Tienes miedo de que te lastime?

Ella no dijo nada. Él se acercó un paso.

—Sabes que nunca lo haría. Lyandreu —sus ojos se cristalizaron—, yo te...

—No lo digas —lo interrumpió ella—. Por favor, no lo digas.

Él frunció un poco el ceño, intentando no verse roto.

—Le tienes miedo al amor.

Sus palabras fueron una verdad que ella no deseaba escuchar ni admitir. Porque, sí, tenía miedo de amar y ser amada. Por culpa del amor sentía un vacío en el pecho. Alguna vez había amado a alguien demasiado. Cuando esa persona ya no estuvo en su vida, su mundo se derrumbó. No quería volver a pasar por ese dolor. Por eso eligió que no volvería a amar. Ahora sabía que eso no era algo que se pudiera escoger.

—Hurson, en serio no quiero hablar de esto.

—Pero yo sí. Necesito respuestas, no puedo continuar así.

—¿Qué clase de respuesta quieres? No tengo nada que decirte —dijo ella levantando la voz.

—Solo quiero saber si sientes algo por mí. —Él también levantó un poco la voz.

—No tengo una respuesta para eso.

—Eso es absurdo. ¿Por qué te cuesta tanto admitirlo?

—¡Porque no quiero amarte! Soy una asesina y lo que siento por ti no debería existir. El amor no debería existir para mí.