Bienvenido a Leffitsing ¦KatsuDeku¦

Capítulo 34

Aclaración: En unos cuantos capítulos los ojos de Izuku permanecerán azules hasta que salga del mundo oscilante y su cuerpo regrese a la normalidad.

Conjuro de primer nivel para revertir el conjuro prohibido de sellado: Las cadenas físicas se destruyen pero la unión se fortalece de forma permanente y constante. La sangre reemplaza las cadenas y tus colmillos penetran hasta en lo más profundo de mis huesos. Ahora somos uno en sangre y espíritu.
{Vincula physica destruuntur, sed unio in perpetuum et constanter roboratur. Sanguis vincla reponit, et dentes ad ima mea ossa penetrant. Nunc unum sumus in sanguine et spiritu.}

___________________________________

Sus azulados abren y rápidamente comienzan a llenarse de lágrimas, ni siquiera se da cuenta cuando sus pies se mueven solos, corriendo sin freno.

— ¡¡TOKOYAMI-KUN!! —exclama arrojándose sobre él y abrazarlo con fuerza. — ¡¡Tokoyami-kun, te extrañé mucho!! —chilla envuelto en lágrimas aliviado de por fin poder verlo, mientras refriega su rostro en el pecho del chico.

El pelinegro sorprendido corresponde el abrazo mientras acaricia sus cabellos aceitunados. — ¡Izuku, has demorado más de lo planeado! —exclama preocupado. — ¿Sucedió algo? ¿Estás bien? —inquiere con sus brazos firmes envolverle.

El licántropo mira incrédulo la reacción del pecoso fijamente, quedando en su lugar. Con su rostro asqueado y su cola repentinamente esponjada avanza hasta Aizawa, quien se mantiene recibiendo las pelusas azules, ahora siendo una extraña masa viviente de pelusa.

Y Bakugou le da un empujón a con su hombro aún rascando su nariz, impregnandose de las pelusas de Aizawa. — ¿Qué mierda es esto? ¿De qué tipo de novela dramática salió esta mierda sin sentido? —lanza con malhumor.

Aizawa se mantiene ahí, con su rostro aburrido. — ¿Me ves cara de psicólogo? Yo que sé, no me importa. Solo déjame disfrutar este momento... —susurra cerrando sus ojos a la vez que extiende sus brazos, permitiendo llenarse de pelusas completamente.

Bakugou gruñe malhumorado y patea una piedra, con sus manos en sus bolsillos. —Patéticos espectros de mierda, qué asco me dan. —lanza con enojo.

Ya habían llegado al objetivo principal, ahora, sería el momento de la verdad.

Las preparaciones del primer ritual para revertir el conjuro prohibido comenzarían muy pronto.

────┈┈┈┄┄╌╌╌╌┄┄┈┈┈────

Primer nivel sangriento 

Los enormes hongos del campo oscilante irradian energía pura con constantes vibraciones, incluso se aprecian algunos de colores fosforescentes azulados. El olor a tierra húmeda invade el ambiente, siendo de por sí un clima muy húmedo y de cielos oscuros con tintes mágicos cubrir, como pequeñas perlas celestinas que invaden los cielos que se identifican de forma típica como pelusas mágicas.

Es así como Aizawa se mantiene con sus brazos bien abiertos siendo una especie de masa de pelusa viviente, mientras que las rubias orejas de Bakugou se mueven constantes por las vibraciones del ambiente estornudando de forma imparable.

Aún si está ahí, en las orillas batallando con las pelusas que intentan meterse a por su nariz, lanzando manotazos y gritando de forma irritable, a nadie pareció molestarle.

Cada quien parecía sumido en su propio mundo, incluyendo a Izuku Midoriya quien parecía no querer despegarse de su mejor amigo, Tokoyami. Y es que realmente le había extrañado, ya que Izuku había acabado siendo un fiel seguidor de la sombra ermitaña con un pasado trágico.