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(Disfruten)

Yoongi empezó el día comportándose de la manera más extraña. Jimin lo observaba moviéndose en la cocina de allá para acá, cocinando huevos y arroz. Por más que Jimin haya insistido en que quería ayudar, Yoongi se lo prohibió. En cambio, le dijo que se sentara a la mesa a esperar.

Era extraño para Jimin. Solo la mañana anterior había tenido que levantarse temprano a cocinar y realizar la mayoría de las actividades que haría un sirviente y ahora, después de todo el evento de la tarde pasada, a Yoongi se le había zafado un poco un tornillo, diciendo que él era completamente capaz de cocinar unos huevos. Para ser honesto, Jimin debía reconocer que el alfa podía hacerlo, pero que quedaran sabrosos era una historia completamente distinta.

El abuelo Min entró en la estancia con su periódico en la mano, dispuesto a su ritual matutino de tomar té leyendo las noticias de la semana. No obstante, cuando vio a Yoongi, se quedó parado en el umbral de la puerta con una ceja arqueada.

—No me digan que hoy es el día en que las vacas finalmente están volando. 

Jimin trató de esconder una risa con una tos, mientras que Yoongi le dedicó una mirada ladina y llena de desinterés al anciano.

—Buenos días, tío. Yo también amanecí bien, gracias por preguntar—respondió en cambio y siguió cocinando. El abuelo miró a Jimin con cara de pregunta y el beta solo fue capaz de encogerse de hombros.

Diez minutos después, estaban los tres sentados a la mesa. El arroz estaba un poco pasado y los huevos recocidos, pero había algo de orgullo en el alfa mientras comía su desayuno en silencio. El abuelo no sabía si ponerse a leer o esperar a algo más.

—Uhm—comenzó a decir cuando ya no soportó el silencio. Se le notaba inseguro de cómo proceder—, gracias por el desayuno. Está... —hizo una pausa donde miró los huevos resecos que le había dado Yoongi—... comestible.

—No hay de qué—respondió el alfa menor y luego miró a Jimin con ojos expectantes—. ¿Y a ti? ¿Te gustó la comida?

—Está muy buena. Gracias—contestó y el alfa pareció contento con eso, bebiendo té con una pequeña sonrisa orgullosa. Jimin debía admitir que era bastante tierno, a pesar de estar al borde de una risa—. La verdad es que no sabía que podías cocinar.

Yoongi se encogió de hombros.

—Estoy lleno de sorpresas.

Fue el abuelo esta vez el que no logró contener la carcajada, dándole golpecitos a Yoongi en la espalda.

—Sé lo que estás haciendo, mocoso, sé lo que estás haciendo—comentó en cambio.

Las mejillas de Yoongi se colorearon un poco. Jimin frunció el ceño sin entender lo que estaba pasando, pero ninguno de los dos alfas pareció necesitar explicar el asunto.

Yoongi cambió el tema de inmediato.

—Entonces, ¿cuándo vamos a viajar a Seúl?

El día anterior, el abuelo Min había conversado con Jimin. Ambos hablaron acerca de lo que había sucedido con el alfa más joven. El beta le contó sobre las disculpas y el abuelo, un poco reticente, le había dicho que había que darle un poco de tiempo al mocoso para que dejara de comportarse como un idiota, que no era fácil cambiar, pero que estaba orgulloso de que fuera capaz de defenderse en circunstancias adversas. También habían conversado sobre el viaje a Seúl. El abuelo quería persuadir a Jimin para que se quedara en Busán, cuidando el huerto, pero el beta arguyó que, si había incluso una pequeña posibilidad de encontrar a Taehyung en Seúl, él iría a buscarlo. Así que finalmente accedió a llevarlo, con la condición de que no irían por más de una semana y de que jamás se alejaría de él en la casa de los Min. Por lo tanto, ahora solo quedaba conversar los detalles antes de partir.

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⏰ Last updated: Oct 16, 2022 ⏰

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The scent of your skin || Omegaverse || Taejin-YoonminWhere stories live. Discover now