Capítulo 35.

522 32 2
                                    


LARA.

—No hagas ruido que nos escucharán—musito.

—Bueno de alguna forma tengo que salir Lara—Brad insiste de nuevo.

—Pero con cuidado. La próxima vez que vengas, por favor avísame.

—Pensé que estarias despierta—se excusa de forma inocente levantando sus manos a los lados de su cabeza.

—Si, claro, despierta un sábado a las cuatro de la mañana ¿Sabes lo que pensé? — Una sonrisa divertida se forma en él negando con la cabeza—. Pensé que alguien estaría entrando a la casa a robar.

—Pero aquí la ladrona eres tú— se avecina a mi mientras habla—, robaste mis pensamientos esta noche.

Trato de aguantar la risa, enserio que lo hago. Él también lo intenta, pero terminamos riéndonos.

—Por Dios, para la próxima sigue practicando tus elogios, por favor.

—Para la próxima— degusta las palabras ignorando por completo mi critica—. Ok, anotado: avisar a Grace para próximos encuentros—Hace énfasis en, «próximos encuentros»—, no hacer tanto ruido y, traer la guitarra, aunque eso cuenta como ruido.

—Igual trae tu cuaderno, me gustan tus canciones— murmuro con una sonrisa.

Sus dedos raspan cuando levanta su mano y acaricia mi nuca y termina de acercarse a mi.

Estando frente a la ventana— porque él se iba—, reparte varios besos en mi comisuras, iniciando el verdadero beso.

No dejo de pensar en los últimos días que hemos hablado, en los besos que compartimos a escondidas a terceros; y me gusta, me gusta que sea nosotros dos y nadie más.

—Te tienes que ir—susurro en medio del beso.

—Que triste—masculla, en consecuente vuelve a besarme rozando sus dedos rasposos en mis mejillas.

Escucho las pesadas y fuertes pisadas de mi padre saliendo de su habitación.

Rompo necesariamente el beso, fijo mi mirada en su expresión, sus ojos bien abiertos y la manera que deja de respirar puedo leer completamente que esta atemorizado.

—Ok, ayúdame a salir—titubea dirigiéndose a la ventana.

Encuentro un poco divertida la situación, sin embargo, no me gustaría para nada que mi padre viera esta escena: los dos, muy cerca del uno al otro, a las cuatro de la mañana. Aunque que me vea ayudándolo a salir tampoco seria muy lindo de ver.

Escucho a mi padre en la cocina moviendo utensilios. Hago a un lado las cortinas y abro la ventana hacia arriba, poco a poco para no hacer ruido, aprovecho que mi padre está haciendo ruido para abrir por completo la ventana, pero al hacerlo con tanta fuerza y rapidez, termina chocando con el marco produciendo un estruendo en toda mi habitación, y dejan de sonar cosas en la cocina.

Bradley y yo compartimos miradas aterradas.

—¡Sal ya! rápido— susurro-gritando.

Bradley saca su pierna primero, luego se inclina para salir e intenta sacar su otra pierna para salir por completo, pero termina por enredarse con las cortinas.

Se escuchan las pisadas de mi padre cada vez más cerca. Termino por empujar su pierna cayendo él al suelo. Cierro las cortinas de inmediato al tiempo que mi padre abre la puerta introduciéndose a la habitación.

Giro hacia mi padre como si nada.

—¿Qué haces? — Cuestiona soñoliento.

—Nada— curvo mi boca hacia abajo encogiéndome de hombros.

Because, all I need is you. (All I Need Libro 1).  |EN EDICIÓN|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora