Capítulo 47.

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LARA.

―¿Daniel? ¿Ustedes...?―señalo a ambos.

Daniel se levanta del mueble y ayuda a Emma.

―Si...―Daniel titubea―. Es que estamos enamorados.

―¡Daniel!―Emma golpea su hombro―. No digas eso.

―¿Y qué quieres que le diga? ¿La verdad? Ok.

Emma lleva sus dedos al puente de su nariz y suspira.

»Somos amigos con derechos.

―¿Amigos?―Es lo primero que se me ocurre.

―Lara, perdóname...

―¿Por qué debería perdonarte Emma?―dejo las galletas en una mesa cercana y me acerco a ella―. No hay de qué preocuparse.

Ella respira profundo.

―Tienes razón, no sé que dije, estoy nerviosa. mejor me siento―su inquietud me hace un poco de gracia.

Cuando giro hacia Daniel de forma automática sus labios forman una sonrisa tensa.

―Larissa...

Alzo una de mis cejas.

―Dani California...

Su postura se relaja completamente junto con una sonrisa.

―Voy a preparar un té.

Lo veo irse a la cocina, y ¡sorpresa! Sabe dónde están las tazas, el té y las ollas.

Veo a Emma quien me tiende una sonrisa apenada.

―¿Podemos hablar de esto después?

―Por supuesto―tomo asiento a su lado. Hago una breve pausa―. ¿Cómo ocurrió?―Susurro.

Emma toma una profunda respiración y me sonríe incomoda.

―Nos encontramos en un restaurante, cenamos y...―sus mejillas se tornan rojas con una sonrisa de boca cerrada―. Y pasó.

Pasó―repito la palabra―. ¿Qué pasó exactamente?

―Nos acostamos―su murmuro es más bajo de lo normal.

Alzo mis cejas y de manera involuntaria mi boca se abre.

En mi vida me habría pasado por la cabeza que Daniel y Emma se enrollaran. Puedo pensarlo de parte de Charles, puesto que Emma tenía un amor platónico por él.

Daniel le extiende la taza y se deja caer en la silla frente a nosotras. Nuestro silencio solo desiste por los sorbos de Emma.

―Entonces...―inicio―. Son amigos.

―Íntimos―agrega Daniel.

Emma se atraganta con el líquido.

―¡Daniel!―tose.

―¿Qué?―La mira inocente.

Ella suspira y sus labios vuelven a hacer contacto con la taza.

Suprimo una sonrisa tratando de no evidenciar que me divierte. Daniel comienza a hablarme casualmente sobre las últimas cosas que ha hecho. Y luego de hablar sobre su vida y parte de la mía, se levanta.

―Bueno, me retiro―camina hacia Emma―. Me envias un mensaje sobre si vas a ir... ¡oh! Lara, deberías ir, por supuesto, si no tienes problemas.

―¿Ir a donde?

―Es un evento que tendremos. Le enviaré la invitación a Emma y así ella te lo pasará.

«Tendremos...»

Because, all I need is you. (All I Need Libro 1).  |EN EDICIÓN|Where stories live. Discover now