Entre la Tinta

Capítulo 2

Capítulo 2 | "Hermanos Cox"

Kylie Hills

Termino de cerrar la última maleta que he alistado con mis cosas. Dos días después de mi llamada con Tío Grayson él mismo envió a unos chicos a que vinieran por mis cosas, unas cuántas cajas con mis cosas, ropa y demás. Se llevaron algunas de las cosas que aún conservaba de papá porque sé que cuando me vaya de aquí mamá bien podría deshacerse de ellas. Así que ahora sólo llevo una pequeña maleta con algunas cosas esenciales y un par de cambios de ropa para Noah, incluyendo mi bolso y una pequeña pañalera.

Mi vuelo sale en unas horas y el taxi no tarda en llegar.

Bajo las escaleras con la maleta y encuentro a Noah viendo televisión mientras mamá se encuentra en la cocina, me ve bajar con la maleta y encarna una de sus perfectas cejas rubias.

— ¿Estás segura que vivir con tu tío sea la mejor idea, Kylie?

— Lo es, mamá.

— Claro, tu tío siempre te perdona todos tus errores, mira nada más como trata al niño.

— ¡Deja de hablar de Noah de ese modo! — exploto finalmente — ¡Es mi hijo!

— ¡Fue tu error tener un hijo tan joven, arruinaste todos los planes que tenía para ti!

— ¿Eso fui para ti, mamá? ¿Un error?

Su silencio es mi respuesta, y quisiera que no doliera tanto.

— Nunca fui una muñeca a la que tuvieras que planearle la vida mamá, yo también tenía derecho a vivir mi propia vida — río irónica — Me he equivocado, todos cometemos errores, pero señalar los míos no hará que desaparezcan los tuyos.

Camino hacia la puerta de la cocina luego de que una bocina se escuche fuera, el taxi ya llegó.

Tomo la pequeña maleta junto con la pañalera, salgo hacia la acera y veo que es una chica quien conduce y muy amablemente me ayuda a subir mi maleta al auto junto con la pañalera. Regreso de nuevo a la casa y tomo a Noah entre mis brazos, pero antes me giro hacia mamá que me mira desafiante.

— Noah jamás será un error, no me arrepiento de esa decisión — la miro desafiante, sus ojos verdes tan iguales a los míos — Craig fue el mayor cretino que pude conocer y siempre me dolerá que no creas en mí luego de todo lo que él me hizo, que me hayas creído la culpable de todo lo que pasó, sin embargo, si regresara en el tiempo y tuviera que elegir pasar por ello de nuevo para tener a Noah conmigo lo haría sin dudarlo.

Es totalmente cierto, no sabría qué sería de mi vida ahora sin Noah.

— Te quiero, mamá.

Bajo las escaleras sin esperar respuesta y subo a la parte trasera del auto donde coloco a Noah en la silla para bebés que solicité esta mañana en la compañía de taxis. Tendré que pagar un poco más por ello, pero es la seguridad de mi bebé, el taxi arranca rumbo al aeropuerto de Nashville.

֎

El viaje en avión fue bastante tranquilo, Noah sólo se asustó un poco en el despegue, pero después se encontraba fascinado con la vista de las nubes, no hubo mucha turbulencia por lo que mi pequeño valiente no se asustó para nada y la otra mitad del vuelo la pasó dormido.

Camino por el aeropuerto de San Francisco con Noah en mis brazos junto a la pañalera en otro y una de mis manos tira de la maleta mientras la otra sostiene a Noah.

Soy una súper mamá.

— ¡Tesoro!

Giro el rostro hacia la voz del tío Grayson y apenas lo veo siento como mi vista se empaña por las lágrimas, la última vez que lo vi fue hace un mes maso menos, pero no ha cambiado ni un poco.