Capítulo 23

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Capítulo 23| "Love, Rosie"

Kylie Hills

Han pasado tres días, tres días desde que volvimos a California. Las cosas han continuado con una absoluta calma, tanta que comienza a asustarme.

Las cosas con Axel han seguido su curso bastante bien, sigue siendo raro podernos besar ahora cada vez que se me antoja, pero es un raro agradable. Aún no lo he besado frente a Noah, quiero estar segura de ello antes de poder presentarlo con mi hijo ya como algo más que un amigo, aún mi hijo está muy pequeño y no quiero alterarlo con estas cosas.

Tampoco me he atrevido a llamar a Hope, me ha dado su número telefónico para que hablemos cuando yo así lo quiera y me ha dicho que no sería impedimento para ella venir aquí a California con su novio, Erick. Sin embargo, aún no me siento lista para ello.

Lo he hablado con el Tío Grayson y con Hunter, ambos creen que es una buena idea al menos escuchar lo que Hope tiene para decir, pero aún no estoy lista para ello.

Ingreso a la tienda de tatuajes sosteniendo mi cuaderno de dibujo bajo uno de mis brazos y con el otro maniobro con el almuerzo de Axel mientras Noah camina frente a mí. Dejo mi cuaderno de dibujo sobre el mostrador de la recepción y el almuerzo de Axel y finalmente camino hacia su estudio. Encuentro a Aria en el estudio de Hunter mientras ambos ríen de algo.

Axl, mami.

— Así es, Noah, vamos a ver a Axel.

Mi niño camina frente a mi tambaleándose lo que me hace sonreír mientras llegamos al salón de Axel, el cual se encuentra serio mientras tatúa el muslo de una chica.

Axl.

La sonrisa que se extiende en el rostro del pelinegro nada más escuchar la voz de mi hijo me hace sonreír.

— Chico bestia.

Volteo los ojos cuando utiliza el mismo apodo que ha usado Hunter con mi hijo, ya nunca conseguiré que llamen a mi niño diferente. Cuando sus ojos bicolores conectan con los míos sonríe un poco más amplio.

Tesoro.

— Te he traído el almuerzo, chico duro.

Sonríe ante el apodo, ha comenzado una broma interna entre nosotros desde que él comentó que la fotografía que nos tomamos hace unos días en el parque nacional se apreciaba como yo era una chica buena y en cambio él era el estereotipo de un chico duro. Así que ha quedado el apodo para él. Aprovecho que Noah está distraído con la chica sobre la silla de tatuajes que le sonríe y pego mis labios contra los suyos en un beso rápido.

— Terminaré aquí en unos veinte minutos, ¿me esperas para almorzar? — cuestiona volviendo a su trabajo mientras tomo a Noah entre mis brazos.

Asiento ligeramente mientras camino de vuelta a la cocina, y minutos más tarde tal y como lo prometió almorzamos juntos en un cálido silencio mientras miramos a Noah jugar con sus carritos y no es hasta luego de unos minutos en los que vuelve a hablarme.

— Tengamos una cita, esta noche.

— ¿Me estás preguntando o sólo me estás poniendo al tanto de tus planes? — sonrío.

— Poniéndote al tanto de mis planes, obviamente.

Eso me hace reír mientras toma una de mis manos sobre la mesa.

— Tendré que preguntarle a Hunter si puede cuidar a Noah pero...

— Puedes llevar a Noah.

Algo tan simple como que tome en cuenta a Noah en nuestros planes hace que una sonrisa boba se plante en mi rostro.

Entre la TintaWhere stories live. Discover now