Capítulo 4

6.9K 424 15
                                    

Capítulo 4 | "Dodgers vs Giants"

Kylie Hills

Observé fijamente como Axel conversaba con su cliente el cual se encontraba bastante satisfecho con el trabajo de este para finalmente ingresar al datáfono el monto del tatuaje, el chico paga con su tarjeta y se retira de la tienda.

Estamos solos.

Los ojos característicos de Axel se posan sobre mientras ladea la cabeza hacia un lado ligeramente antes de hablarme.

— No sabía que estabas aquí, no te escuché llegar.

— No hice ruido al entrar — comento — Compré tacos, están en la cocina, por si quieres.

— ¿Me compraste tacos?

— Sí...quiero decir, no... bueno sí, pero — bufo frustrada y veo una diminuta sonrisa — Sí, compré tacos, para todos.

— ¿Hasta para ti?

— Sí, también para mí.

— ¿Y qué tal están?

— No sé, aún no los he comido.

— ¿Por qué no?

Que conversación tan extraña.

— No me gusta comer sola.

Axel asintió ligeramente y desapareció por el pasillo izquierdo asumo que rumbo a la cocina por lo que decidí concentrarme de nuevo en mi dibujo.

Aunque sus pasos de vuelta me alertaron sobre su presencia de nuevo, además del plato con un taco que fue depositado justo frente a mí.

Axel por otro lado, masticaba uno de los tacos que había comprado mientras asentía para sí mismo, justo cuando terminó de masticar fue cuando posó su mirada en mí.

— Están buenos.

Comimos en un cómodo silencio mientras me dediqué a continuar mi pequeño dibujo y Axel se concentraba en mis trazos, me sorprendió lo cómoda que me sentía con este silencio entre nosotros dado que normalmente no me encontraba cómoda con ningún tipo de silencio y menos con una persona que aún no conocía casi de nada.

Pero rápidamente iba comprendiendo que las cosas con Axel eran de esa manera, no sonreía constantemente y cuando lo hacía era apenas la sombra de una sonrisa, no lo había visto sonreír ampliamente aún, no creía que lo hiciera de todos modos, tampoco lo había escuchado reír, tan sólo pequeños resoplidos burlones. Tampoco hablaba mucho, normalmente no lo hacía.

Pero sus ojos, con esas ambas tonalidades tan características eran el vivo ejemplo de la famosa frase de que los ojos son las puertas del alma, porque sus ojos eran demasiado expresivos. Podrías detectar si algo le molestaba o le divertía con sólo darle una pequeña mirada a sus ojos, era simplemente increíble, aún más con ese bicolor característico suyo.

— ¿Sabes dónde están los demás? — cuestiona.

— Tío Gray está con Hunter y Noah, no tardaran en venir, tu hermano dejó una nota sobre volver con helados.

La sombra de una sonrisa se dibuja en su rostro y asiente ligeramente, creo que hablará de nuevo cuando la puerta se abre de golpe revelando a su hermano.

— He vuelto, ya pueden dejar de extrañarme.

Cody entra a la sala y entrelaza su mano con la de su hermano antes de chocar sus torsos en un extraño saludo de hombres y luego gira hacia mí, me toma desprevenida cuando deja un beso en mi mejilla.

Entre la TintaWhere stories live. Discover now