Entre la Tinta

Capítulo 25

Capítulo 25 | "Verde"

**LEAN LA NOTITA DEL FINAL**

Kylie Hills

Me remuevo entre sueños cuando la luz que entra por la ventana impacta directamente contra mi rostro. Frunzo el ceño, yo siempre cierro las cortinas porque me molesta el sol en las mañanas.

Un agarre fuerte en mi cuerpo me pega más a un cuerpo duro y tonificado tras de mí, eso sí me hace despertarme. Abro mis ojos rápidamente y miro hacia abajo donde una mano se extiende por todo mi vientre, es tan grande que su palma extendida acapara todo mi abdomen y reconozco los tatuajes que se extienden por los dedos y dorso de su mano, subiendo por su muñeca y brazos.

Axel.

Siento el rubor comenzar a colocarse en mis mejillas cuando siento su tacto en mi vientre desnudo, su mano ha hecho que la camiseta que llevo como pijama se haya levantado por lo que mis bragas negras quedan al descubierto, siento a Axel presionando tras de mí, específicamente en mi trasero, a una zona muy específica de su anatomía.

Ok, no hay que entrar en pánico, su respiración en la parte trasera de mi cuello me indica que sigue dormido, sólo tengo que sacar su mano de ahí y poder bajar su camiseta por mi cuerpo, así evito que le dé un descarado vistazo a mi trasero.

Aunque no es tan sencillo como parece, porque nada más intentar apartar su mano hace que la aferre con más fuerza a mi cuerpo y entierre su rostro en mi cabello.

Sus manos me aprietan con tanta fuerza por sobre las costillas que me hace reír y eso hace que finalmente se despierte.

Pero no me aparta, por el contrario, me pega más a su cuerpo.

— Buenos días, tesoro.

Tres palabras, sólo ha dicho tres palabras y ya con eso consigue que una sonrisa estúpida invada mi rostro y mi corazón se acelere como si estuviera corriendo un maratón.

Veo como mueve la mano que aún tiene sobre mi vientre, como si estuviera tanteando en qué situación nos encontramos y parece percatarse finalmente que está tocando un poco de piel desnuda, se incorpora sobre uno de sus codos y me dedica un descarado repaso, mi piel quema por donde quiera que pasan sus ojos, sus pupilas se dilatan y no puedo evitar sentir como mi corazón se salta un latido y mi respiración se me atasca en los pulmones cuando sus ojos descienden como lava ardiente por mi cuerpo.

— Vale, podría acostumbrarme a esta vista todas las mañanas.

No me da tiempo para replicar, sus labios impactan con los míos cuando en un ágil movimiento se coloca sobre mi cuerpo, con una mano sobre mi cabeza que sostiene todo su peso y la otra aún sigue dentro de mi camiseta, su camiseta, dejando pequeñas caricias sobre mi cintura.

Un jadeo escapa de mi boca cuando sus dientes tiran de mi labio inferior y vuelve a besarme con aún más fuerza, mis manos se posan sobre su espalda desnuda mientras tiro más de su cuerpo al mío, no quiero que haya ni un mínimo espacio entre nosotros.

Mis manos codiciosas se pierden en la sensación de cómo sus músculos se tensan con forme arrastro mis manos por su espalda, hombros, brazos y abdomen. Está delicioso, Axel es un bocadillo, es un dulce adictivo, es una tentación hecha hombre.

No puedo evitar el gemido que sale de mis labios cuando presiona sus caderas contra las mías, una zona específica de su cuerpo que parece más que despierta se presiona contra mi centro, sonríe contra mis labios mientras su mano desciende de mi cintura y mi muslo y le da un fuerte apretón con sus fuertes manos tatuadas.