Capítulo 32

6.1K 360 8
                                    

Capítulo 32 | "Señales"

**LEAN LA NOTA DEL FINAL**

Kylie Hills

Todo había estado ridículamente calmado estos días luego de la feria, esa debió ser mi primera señal de que todo iría mal luego.

He decidido matricular a Noah en una pequeña guardería a unas cuantas calles del salón de tatuajes para que conviva con otros niños, su terapeuta de lenguaje dice que eso podría ayudarlo. Además, lo cierto es que siempre pasa conmigo, mi tío, o los chicos de la tienda, nunca pasa el tiempo con otros niños, creo que podría hacerle bien, serán sólo unas cuantas horas.

El primer día que lo dejé, él lloro, yo lloré, parecíamos una escena triste y cutre mientras las demás mamás y papás de los otros niños nos miraban raro, pero es mi niño. Claro que Axel se burló de mi todo el camino de vuelta mientras yo trataba de frenar mis lágrimas. Ese mismo día cuando recogí a Noah nada más salir de la universidad, su rostro venía envuelto en una mueca feliz, sus ojos iluminados mientras me contaba a su manera que hizo muchos amigos y que se divirtió increíblemente.

El segundo día, mientras me quedo en el auto y es Axel quien lo deja en la puerta de la guardería, mi hijo medio se despide de él mientras corre ilusionado a reunirse con sus amigos, también niños, que rondan entre los dos y cinco años.

Me río cuando Axel viene de vuelta al auto y les dedica miradas desdeñosas a las mamás de otros niños que llevan tiempo dedicándole miradas de desaprobación a todos sus tatuajes, aunque cuando su ceño se frunce hacia ellas todas apartan la mirada.

Axel sube al auto refunfuñando mientras conduce hacia mi universidad. Ha hecho esto hace días, pasa por mí a casa de tío Grayson en su nuevo auto (se compró una camioneta lujosa), me deja en la universidad y luego conduce hasta el salón de tatuajes. La única diferencia, es que estos días también han incluido venir a dejar a Noah a su guardería, y a instalado una silla de niños en los asientos traseros que a Noah le encanta, porque es con dibujos de autos.

Pero hoy se siente diferente.

Hoy es el sexto día en el que dejo a Noah en su guardería, pero por alguna razón, no logro soltar mi agarre de su cuerpecito pese a que se retuerce entre mis brazos quejándose sobre que quiere ir hacia sus amigos.

— ¿Todo en orden, tesoro? — me cuestiona Axel nada más ingreso al auto.

— No lo sé, hoy me siento algo extraña — frunzo el ceño — Me siento... no lo sé, no sé cómo me siento hoy.

Axel conduce en silencio mientras mantiene una de sus manos sobre mi muslo.

— ¿Necesitas que haga algo por ti? — me cuestiona sonriendo.

— Axel, haces demasiado por mí.

— No es verdad.

Encarno una ceja mientras miro a la camioneta a nuestro alrededor y me burlo cuando sus mejillas adquieren un mínimo tono rosa.

— Ya te dije que no compré la camioneta por eso.

— Seguro.

— Ky.

— Sólo digo que, siempre que te comenté que no podría llevar a Noah en tu coche porque los deportivos no son seguros para niños fruncías el ceño, así como ahora, y a los pocos días apareciste con esta impresionante camioneta, que debió costarte una fortuna.

Eso lo hace sonreír, enseñando las perfectas perlas blancas que conforman su sonrisa.

— Hace mucho quería una camioneta, es más fácil para ir a la playa, puedo poner la tabla de surf arriba, y puedo ir con mis amigos con más comodidad.

Entre la TintaWhere stories live. Discover now