Idea dada por mylittlerumbling
; takemichi
Por fin había llegado el fin de semana, los días de clases cada vez se hacían más y más pesados y solo deseabas pasar un rato con takemichi. Solo se podían ver los días que no tenían clases, por lo que solo eran dos o tres días a la semana, si, no se veian tanto.
Hoy habían acordado con verse luego de dos semanas sin hacerlo. Irian a un parque cerca de la casa del rubio a hacer un mini picnic ya que a él le encantaba comer de la comisa que le hacías.
Para hoy le habias hecho unos muffins de vainilla y un pequeño brownie de chocolate.
Ya estabas completamente lista, llevabas algo para la ocasión, unos jeans cortos de color negro y una camiseta color gris, algo bastante cómodo. Mientras esperabas a takemichi guardaste todo en una cesta, una manta para sentarse y la comida en recipientes diferentes.
El timbre sonó, abriste la puerta y viste al rubio algo nervioso y sonrojado, estaba planeando como hacerte pasar un día único ya que te lo merecías.
-Hola cariño- le sonreiste y lo abrazaste por el cuello, él te correspondió abrazándote por la cintura. Ahora si que el chico estaba rojo, abrazarte, besarte o simplemente estar cerca de ti lo ponía totalmente nervioso porque eras tan bella ante sus ojos que no podía mirsrte fijamente.
-hola amor, te extrañe- se alejo de tu toque aunque no queria. -¿Nos vamos?- te tomó de la mano mientras comenzaban a alejarse de tu casa a un ritmo tranquilo.
El transcurso fue muy agradable, takemichi emanaba un aura tan dulce que el simple hecho de estar a su lado estabas feliz y no era solo su aura, él era tan dulce con todos que no merecía que nada malo le pasará.
Iban tomados de la mano mientras te contaba todo lo que había hecho en las semanas que no se vieron, cuando empezaste a hablar de lo tuyo él se mantenía en silencio, escuchaba cada palabra que decías con suma atención y además le encantaba lo linda que te veías emocionada.
Habían llegado su destino, el parque no era tan grande. Por un lado estaban los juegos de niños y por otro estaba un lugar para reunirse, era un terreno donde abundaba el pasto.
Acomodaron sus cosas, sacaste la manta de la canasta y la colocaste donde se sentarian. Tomaron asiento para luego comenzar a disfrutar de la compañía del otro.
-Como te contaba, hoy chifuyu adoptó a otro gato pero no podía tenerlo ya que tenía lleno el hogar, así que lo adopté yo- dió un mordisco a su sándwich.
-Quiero conocerlo. Siempre quise tener un gatito cerca mio- era verdad, tus padres nunca te dejaron tener mascotas. Nada que tenga que ver con ellos y cuando los veías en la calles te alejaban de estos.
La tarde continuó igual de bien. El clima acompañaba su juntada, entre conversaciones se brindaban algunos besos para demostrar su cariño ante el otro. Bueno, tu dabas la mayoria de besos ya que takemichi le daba un poco de cosa dar la iniciativa, eso no te molestaba porque eso lo hacía más tierno y hermoso de lo que ya era.
Después de tanto tiempo sentada te recostaste en el regazo del rubio, apoyando tu cabeza en el mismo. El chico aprovechó, de vez en cuando acariciaba tu mejilla y daba pequeños besos cerca de tus labios. Dejándote sorprendida para bien.
-¿Te digo algo? No sé como preparas las comidas, pero son tan deliciosas- te sonrió y dio otro mordisco a tu comida -Creo que lo haces para engordarme y después comerme- esto te causo risa, el chico era de hacer este tipo de chiste pero esto era demasiado.
-¿Tu crees? Yo ya te he comido y sabes muy bien- hablaste coquetamente y esto puso nervioso al chico. Se sonrojo completamente mientras trataba de ocultar su rostro.
