Shots- scaloneta

gonzalo montiel +18

Sevilla, España

Estaba atenta mirando la televisión para ver por donde andaba el micro que llevaba a los recientes campeones de Europa.

Para nadie era una novedad que hace mas de tres meses estabamos en algo con Gonzalo, varias veces publicaron fotos nuestras almorzando o cenando, era algo que a ninguno le quitaba el sueño, pero en cosas asi yo no queria invadir su espacio, aunque ayer en cuanto se consagraron, en el tiempo de descanso me llamo y hablamos casi una hora por videollamada mientras el festejaba y tomaba con sus amigos.

Gonza me habia dicho que tenian una ceremonia y que después venia para aca, no veia la hora de verlo, lo habia extrañado mucho.

Me puse repasar los resúmenes que habia preparado a la mañana, en dos días tenia un parcial super importante y necesitaba aprobarlo si o si para poder mantenerme con estabilidad emocional.

Ni siquiera me di cuenta cuando pasaron casi tres horas, el timbre de casa me hicieron despabilar.

Mire por el visor y vi a un Gonzalo sonriente, una medalla en su cuello y su caracteristica camiseta blanca de letras rojas.

—Hola campeón— dije cuando abrí la puerta, Gonzalo ensancho más su sonrisa y se tiro a mis brazos — felicidades Cache—

—Gracias mi vida, gracias por bancarme, te quiero—

—Yo tambien te quiero— le respondí, junto sus labios con los míos y cerre la puerta como pude porque Gonzalo inmediatamente se impulso para alzarme.

Enrede mis piernas en su cintura mientras seguiamos besandonos, la lengua de Gonzalo recorria mi boca sin dejarme respirar, al parecer a el tambien le estaba costando porque nos separamos y solo pudimos reirnos.

Se sento en el sillón conmigo en sus piernas y me miro.

—Es que te extrañe mucho Eva—

—Y yo? ni te imaginas— respondí, fui yo quien despues de decir eso ataco su boca sin ningún tipo de vergüenza.

Las manos de Gonzalo fueron directamente a mi culo, masajeando con fuerza mientras me refregaba sobre su entrepierna generando fricción y una notable erección.

Gonzalo me saco la musculosa dejandome semidesnuda frente a sus ojos que no dejaban de verme las tetas.

—Me muero de ganas de hacer algo— dijo agitado.

Se saco la medalla del cuello y me la puso, cerre levemente los ojos al sentir el oro frio sobre mis pechos.

Baje mis manos al borde de su camiseta y se la saque, empece a dejar besos en su cuello, deje tres besos en sus tres estrellas y fui bajando hasta su abdomen.

Me arrodille frente a el y palmee sus piernas para que se acomode mejor, se recosto sobre el sillon y levanto un poco su pelvis para dejarme bajar su joggin azul.

Acaricie su grueso miembro por encima de la tela, estaba tan duro que se le marcaban las venas aun con el boxer todavia.

Me mordi el labio y me acomode con los talones bien pegados a mi cola asi el podia tener la vista de mis pechos adornados por el circulo dorado que se habia ganado con tanto esfuerzo que estaba a punto de recompensar.

Baje lentamente su boxer, viendo como se mordia el labio y sus ojos se entrecerraron, tenia una cara hermosa de placer que podria ver todo el tiempo.

Tome su pene por la base y empece a masajearlo con toda la mano, mientras hacia lo que más le gustaba, dejaba besos en el interior de sus muslos.

Cuando menos se lo esperó me la meti en la boca, ahuecando mis cachetes y dandole una chupada desde la base hasta la punta como un chupetin, hice un ruido y me la saque.

—Tiene gusto a campeón— dije mirandolo, mi mano subia y bajaba, Gonzalo inspiro fuerte y me tomo del pelo con una de sus manos para pararme.

Se levanto y con ambas manos bajo mi short pijama dejandome completamente desnuda, lo único que tenia era su medalla.

Hizo que me recueste en el sillón y se tiro sobre mi besando mi cuello hasta bajar a mis tetas.

—Mis tres trofeos— dijo, primero lamio, succiono y mordio mi teta izquierda, despues hizo lo mismo con la derecha hasta que las junto a ambas y se hundio sacudiendo su cabeza entre las dos.

Fue bajando sus besos hasta mi abdomen, con sus manos me apretaba los muslos y me dejaba besos con mordiscos por todos lados.

Paso uno de sus dedos por mis pliegues, solto una risa nasal y se mordio el labio.

Sin previo aviso introdujo sus dedos medio y anular en mi entrada, robandome un gemido y una ola de suspiros y jadeos, más mi mano apretando y rasguñando su hombro.

Sus dos dedos me tocaban el punto g perfectamente, me hacia estremecer por completo, mis caderas se movian frenéticamente sobre su mano que no dejaba de moverse agitando mi interior y logrando que mi orgasmo empiece a desatarse.

—Mm..Gon..ahh dio..ss— gemi al sentir como mi interior se apretaba dejando todos mis fluidos en la mano de Gonzalo y en el almohadon del sillón.

Recupere mi respiración y lo mire, le hice un gesto para que se siente y me levante, me posicione sobre sus piernas y con mi mano dirigi su largo hacia mi entrada, con mis manos en sus hombros fui bajando hasta que entro por completo.

Empece a saltar sobre el sin pudor, sabia que lo calentaba demasiado ver como las tetas me rebotaban, y más con esa medalla, a Gonzalo le brillaban los ojos a la vez que gemia.

—Como te coge el campeón, viste mami?— me mordi el labio asintiendo con rapidez al notar como empezaba a tensionar sus musculos y como su pija palpitaba en mi interior.

—Ah..Gonza..ah— gemi cuando me tomo por la cintura y empezo a embestirme el con tanta fuerza que sentia que me iba a perforar.

—Así..así te gusta? hija de puta—

—S..si, así, así — no podia más en pocos segundos volvi a acabar sobre su pelvis y pude sentir su liquido explotar dentro mio, no podia mantener los ojos abiertos, estaba demasiado excitada.

—S..sos increible— le dije

—Queres ser mi novia?— preguntó agitado cuando salio dentro de mi.

—Si, quiero ser— respondí, recoste mi cabeza en su pecho y nos tape con la manta que estaba apoyada en el respaldo, después nos bañariamos, ahora estabamos demasiado exhaustos.

es que yo vi esa foto y solo me imagine esos dos dedos dentro de mi
si coge como mete penales, mamita