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Oprimida.

Sofocada.

- "¿Quiere salir a tomar un poco de aire, princesa?"

Observo al hombre a mi lado y doy un leve asentimiento antes de que me extienda su mano y me guíe fuera de la habitación.

Yixing.

Es un hombre tranquilo pero curioso.

Inocente.

También nos sigue aquella niña que ha estado a mi servicio cuando Nela tiene que atender otras cosas, Alexa, es extremadamente entusiasta y problemática, pero por alguna razón se ve contenta de servir.

Por el momento, me he acostumbrado a estos pasillos aunque siguen siendo extraños para mi.

Yixing me ha contado lo suficiente sobre quien soy, sin embargo...

¿Por qué tengo esta mala sensación en mi cuerpo al pronunciar 'Meredith'?

Desconocido.

Cada vez que me encuentro con mi supuesto padre o mis hermanos....

Simplemente....

No hay nada allí.

- "¿Hay entrenamientos cada mañana?"- pregunto mientras veo a un grupo de hombres y mujeres con sus espadas en un campo abierto

- "Por supuesto"- responde Yixing- "El Ducado Bausteros es conocido por generar a grandes caballeros cada año"

Considerando todo el tiempo que he estado aquí, la Doctora Suliman ha sido bastante buena a su modo también. Ella junto con Frederick han intentando que mis recuerdos vuelvan, no obstante, no parece haber avances.

De hecho mi cabeza se vuelve confusa y a veces hay instantes en los que me he quedado en blanco y no recuerdo algunas horas.

Ahora bien, el alboroto de unos niños en una de los lugares apartados del campo llama mi atención.

Dos gemelos se encuentran atacando a un soldado que luce bastante molesto y esquiva los ataques de los niños con dificultad.

'¡Pete! ¡Samuel' la criada a mi lado susurra mirando con vergüenza la escena.

¿Así que ellos son los hermanos que menciono?

- "Atacalos"

El hombre a mis espaldas me hace una reverencia antes de seguir mi orden alzando su espada contra los niños que parecen entusiasmados cuando se percatan al nuevo combatiente olvidándose rápidamente del primero.

Evan.

Es alguien de muy pocas palabras, sin embargo, es leal.

Un perro el cual sigue las órdenes de su dueño.

El tiempo pasa un poco y los niños están atacando ferozmente a Evan que los esquiva con una mirada aburrida. Hay potencial en ellos pero aún deben entrenar más, en cuento a Evan...

¿Hasta dónde pueden llegar esa habilidad...?

- "¿La princesa desea practicar?"

Yixing sugiere amablemente mientras Alexa nos alcanza unas de las espadas de entrenamiento.

La sensación del peso de la espada en mi mano es conocida.

Comoda.

Mi cuerpo se mueve fluidamente en diferentes movimientos y por primera vez siento que la opresión en mi pecho se aleja. Yixing es bueno con su espada pero parece que no es su instrumento usual y cuando más pasa el tiempo veo que se encuentra exhausto.

La Villana Es Realmente MalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora