La Villana Es Realmente Mala

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- "Mi padre quiso que expresara su pesar al no poder despedirse, Señortia Meredith. Pero tenía asuntos importantes de los cuales hablar con la el Duque Bausteros"

- "Esta bien"

Eret se queda callado unos momentos y yo solo veo el paisaje boscoso de la ventanilla del carruaje.

- "Me alegra saber que ha pasado tiempo con mi madre. Usted siempre fue un poco tímida"- Eret me da una sonrisa cálida- "Cuando se mude al palacio encontrará refugio en ella igual con mi hermana, ella lamentablemente, se encuentra en la academia y no pudo verla hoy, pero son grandes amigas, dígame..."

Por más que lo piense, a menos que fuera obligada, no hay ninguna razón por la cual me comprometería con él.

Tanto su personalidad y su físico no es nada por lo cual me sienta atraída.

Si tuviera que elegir, dos rostros vienen a mi mente.

Izan

Noah

No tengo más tiempo para pensarlo en el instante en que el carruaje se sacude gravemente para luego parar sin ninguna moderación.

- "¡Majestad, una disculpa!"- el cochero abre la puerta del carruaje y se inclina hacia Eret en una reverencia, el hombre luce aterrado

- "¿Que ha sucedido?"- pregunta Eret

- "¡Nos atacan!"

El hombre no tiene oportunidad de seguir hablando antes de que un rugido se escuche del exterior.

- "Quédate aquí, es peligroso"

Eret sale del carruaje y yo miro por la ventana lo que está sucediendo.

Es la primera vez que veo algo así, son varias criaturas parecidas a un tigre con dos cabezas que en el instante en que su boca se abre para atacar se puede visualizar un una lengua partida en dos.

Los caballeros de Eret están luchando contra ellos junto con él, pero son demasiados y parece que se les está dificultando seguir.

Siento un leve cosquilleo en mi hombro pero no sucede nada.

Yixing ni nadie me explico como usar a mi guardián o me proporcionaron un arma.

¡ESO SI ES NECESARIO EN ESTA SITUACIÓN!

Una de las criaturas atrapada a uno de los caballeros y lo parte en dos con facilidad.

Asqueroso.

- "¡Majestad!"

Es impresionante la manera en que Eret mueve su espada, aun siendo menor que los otros tiene un mejor control además que hay un brillo que sale de la palma de su mano que le permite cortar a las bestias más cercanas.

Pero solo uno como él no basta.

Y lo compruebo cuando una de esas cosas aplasta el cráneo de una mujer y por extraño que parezca hace contacto visual conmigo antes de abalanzarse en contra del carruaje.

El golpe en mi cabeza contra el extremo del carruaje me deja aturdida por varios segundos antes de que este comience a moverse bruscamente provocando varios moretones.

Miro a mi alrededor pero no hay nada con lo que pueda pelear.

Maldita sea, no debí dejar a Evan en el ducado.

- "Mierda"

Maldigo cuando otra criatura se coloca en el techo y comienza a rasgarlo con frenesí mientras la primera sigue embistiendo en contra del carruaje.

Este día ha sido largo.

Ahora se que lo descrito en ese diario concuerda con la historia de la Emperatriz, el Duque Palmetra y Yixing, pero hay algo que no está siendo del todo claro.