Lunenburg©

Capítulo 10: Amenaza

Haley Bullock:

Cerré la puerta de mi casillero. Era mi primer día de clases después de la muerte de Diane. Como esperaba, tenía un montón de tareas acumuladas e iba a contrarreloj para no reprobar ninguna materia. Me quedé recostada sobre los casilleros, pensativa con lo mucho que sucedió en tan poco tiempo.

—Tu cara pudo ser inspiración en las décadas medievales.

—¿Lo dices por los retratos de tristeza y muerte que transmitieron las mujeres para ciertos artistas de esa época?

—Sí.

Al menos Jinny hacía reseñas de mi situación con cosas que me gustaban. Caminó conmigo hacia el segundo piso, aún nos quedaba media hora para que terminara el descanso.

—Aun sigo sin conciliar el sueño —comenté.

—Yo tampoco he podido hacerlo, creo que ahora menos al saber que la policía está buscando al asesino hasta debajo de las piedras —me informó—. Me da nervios saber quién fue, así no lo conozca.

—Sí. Es incertidumbre. Aunque ya muero por saber quién ha sido.

—¿Es probable que la policía hable contigo? —cuestionó un tanto nerviosa.

—Supongo que hablarán con muchas personas.

—Sí. Pero creo que contigo sería más interesante, ¡Como en las películas de misterio! —abrió sus manos como si le diera la bienvenida a una función y sonreí por su ocurrencia—. Y también porque fuiste una de las últimas personas con las que Travis habló.

Teníamos que buscar unos libros de física ya que sería nuestra siguiente clase. La biblioteca estaba un poco solitaria.

—Pues... Sí, supongo. De hecho no lo había pensado —musité con un gesto interrogativo frente a la portada de un libro de física—. No tendré mucho que decir, en realidad.

"Tienes mucho que decir Haley, como siempre fingiendo que no ves nada".

—Era una buena persona, realmente me caía bien —agarró tres libros al mismo tiempo—. No éramos cercanos pero tenía entendido que Diane y él solían hablar muy seguido.

Se suponía que leía con dedicación las páginas del libro de física, pero cuando Jinny mencionó tal aserción, mis ojos quedaron sobre las letras de forma inerte.

—¿Cómo dices?

—Jinny... y Travis. Que se la llevaban muy bien.

—Eso no lo sabía —no entendí porque me generaba tanta confusión.

—¿No? Pues... a veces andaban por ahí, charlando —tomó otro libro, ya tenía cinco sobre sus brazos—. Bueno, no siempre, creo que los vi dos veces.

Analicé con detenimiento sus palabras. Tal vez no le habría dado importancia, pero Diane nunca mencionó que trataba con él. Nunca los vi juntos y además ella también era cerrada, cualquier persona que trataba se notaba demasiado.

—Que raro.

—Lo único raro es que los dos ya no están con nosotros —Jinny montó los libros sobre una de las mesas y se sentó—. Ven, si las respuestas de las teorías físicas del profesor no están en ninguno de estos libros, me rindo.

—Es porque es casi imposible unir las teorías de la relatividad general con las teorías sobre la materia y...

—Las otras fuerzas fundamentales: electromagnetismo y las fuerzas nucleares fuerte y débil —terminó por mí mientras deslizaba sus dedos sobre las páginas.