14. Kill Bill

6 1 0
                                    

By Daiani

¿Qué? ¿Cómo? ¿Matar qué? Yo solo mato enemigos en el Rogue Company, ¿Qué está pasando aquí? ¿Voy a convertirme en asesina? Sabía que esto pasaría en algún momento pero no creí que tan pronto. 

- ¿Matar qué? - Cuestiona Camila estupefacta. 

Si yo estoy flipando, ella está a cuadros y en blanco y negro, ¿Cómo se supone que se matan esas cosas? ¿Significa esto que también sabremos matarlos a ellos mismos? ¿Puedo pinchar a Arioch con un cuchillo y que haga plof en el suelo? Eso estaría bien...

- Okay, ¿Entonces el plan cuál es? ¿No lleváis a un descampado y os apuñalamos hasta desangraros? 

- Por mucho que eso parezca emocionarte, no, no nos vais a poder apuñalar a nosotros. - Ya no me gusta este plan.

Finalmente los chicos nos arrastran con ellos a una zona apartada, no es un descampado ni un campo de beisbol con lluvia como en Crepúsculo pero desde luego en su sitio donde nadie nos verá ni mucho menos oirá, perfecto para deshacerme del ojiverde que pone nerviosa a mi amiga, si esta así me lo pide claro...

- Bien, somos plenamente conscientes de lo rato que esto es pero realmente tenéis que aprender a defenderos en caso de que alguien que no seamos nosotros os ataque u os ponga en peligro. - Informa Chloe, esta chica siempre es dulce y linda, qué mona, la besaría solo por ello.

Veo como los dos demonios empiezan a sacar armas de una especie de saco como si fueran Jesucristo con los panes y los peces, parece que vayan a abrir una armería en el sitio, creo que acabo de ver un látigo, ¿Eso es un arma o se ha colado con los objetos peligrosos y es algo que en realidad usa para otras cosas? Mm, por favor que practique conmigo si quiere.

- ¿Habéis usado armas alguna vez? - Asiento brevemente, yo he sido entrenada para usar cuchillos por mi hermano mayor desde niña, fue su labor de protección para conmigo, me enseñó a defenderme y desapareció en el abismo; por su parte Camila fue entrenada por su padre en la habilidad de la defensa personal, pero nunca ha usado armas.

- Sólo armas blancas. - Especifico.

Lilith me mira interesada mientras saca un set de cuchillos y dagas, me los tiende y yo los tomo en mis manos, son increíblemente hermosos, las hojas están engravadas con dibujos negros de runas satánicas y los mangos son de madera y cuero ennegrecido, acaricio el filo con sumo cuidado totalmente ensimismada con el brillo de esta.

- Son preciosas, - susurro - gracias.

- Fueron creadas en el mismísimo infierno, nena, ahora son tuyas. - Finaliza, levanto la mirada agradecida pero me sorprende encontrarme los ojos de Chloe tras de Lilith, luce molesta, tal vez celosa me atrevería a decir, no entiendo por qué.

Veo por el rabillo del ojo como el ojos verdes le hace entrega a Camila de un arma también y ahí comienza el entrenamiento, nos falta una música de fondo tipo Eye of the Tiger con Stallone subiendo y bajando escaleras pero de todos modos es duro, no pensé que acabaría sudando con todos ellos en modo comuna, y si alguna vez imaginé algo así, desde luego no era en un campo peleando sino peleando en otro lado... me estoy saliendo de tema. Después de más de cuatro horas de calentamiento, peleas y formaciones de distintos tipos de seres de averno, nos dejan parar a tomar un descanso, me tumbo al lado de un árbol usando su tronco para reposar mi cargada espalda y estiro las piernas provocando que mi cuerpo se estale, si es que... una además de sexy, crujiente. Chloe se acerca a mí y se sienta a mi lado tímidamente, la miro de reojo, ¿Tal vez debería decirle algo?

- Hola... - susurra en voz baja.

- Hey, - saludo de vuelta - ¿Tú también estás cansada?

- Un poco, esto también es duro para nosotros, no estamos tan entrenados como Lilith y Arioch, ellos tienen más experiencia.

- Si me permites, ¿Cuántos años tenéis cada uno, respectivamente?

- Bueno, debo primero aclarar que la edad de demonios y vampiros va muy diferente a la de humanos, nosotros aún somos considerados jóvenes en el mundo ángel, mientras que diría que Lilith es la más mayor, - asiento prestando toda mi atención, - yo tengo 250 y Matheo 160, luego está Arioch que tiene 370 y Lilith que... tal vez no quiera decir su edad. - se corta al ver como la mencionada clava su mirada en nosotras fríamente.

Con esos ojos yo también pararía de hablar, supongo que con ella se cumple la ley de nunca le preguntes a mujer por su edad, wow, tengo escalofríos de solo pensar en ese momento otra vez.

- ¿Soy tu primera misión? - Ahí nena, siendo directas en la vida es como nos hemos tirado a más de 25 personas.

Veo como se sonroja y asiente nerviosa, ¡Qué mona es, por favor! Casi me dan sentimiento de culpa los pensamientos que tengo hacia ella.

- No te angusties, en mi vasta y amplia opinión sobre misiones de humanos y ángeles, lo estás haciendo muy bien. - Le guiño un ojo y me gano otro sonrojo por su parte que alimenta mi sonrisa y, para qué engañarnos, mi ego.

Lilith se nos acerca y se sienta con nosotras, Chloe parece estar algo molesta porque haya cortado nuestro momento a solas, a mi no me importa que cada una esté a un lado mío, por favor si y gracias, acepto este sándwich con gusto.

- ¿Es molestia si me uno a este ameno momento? - Murmura la diablesa con una sonrisa perversa.

Ambas negamos, unas con más calma que otras, de hecho si las miradas matasen me temo que estaríamos enterrando a Lilith en este mismo instante por como la observa la angelical Chloe, quién diría que alguien como ella puede tener maldad en su mirada o incluso rencor, ¿No es eso un pecado? Tener manía a alguien no suena como algo que haga un seguidor de Dios, pero de nuevo, nunca he prestado demasiada atención en religión como para poder defender este hecho.




El despertar de los mundos (Acabado)Onde histórias criam vida. Descubra agora