El despertar de los mundos (Acabado)

29. Lucifugi

By Camila

Daiani y yo nos miramos incrédulas, ¿Qué ha querido decir con otros demonios? Miro a Arioch buscando una respuesta, pero me desvía la mirada. ¿Qué coño esta pasando aquí?

- ¿Y bien, hay algo que queráis decir dupla infernal?- Mi amiga está molesta, lo puedo notar en su tono de voz. Lilith y Arioch se miran y resoplan, parece que van a confesar cuando de repente... 

-Nos falta Lisa. - Chilla Jackie, todos la miramos, pensativos.

- Eso... es posible, Lisa ha faltado por todo el día, ¿No es así?

- Jackie tiene razón, si os paráis a pensar, Lisa lleva unos días aislada y rara. - Comenta Didi.

No perdemos más tiempo y nos dirigimos a la habitación que comparte con Jackie. La puerta está abierta, pero no hay rastro de Lisa por ninguna parte. Intentamos llamarla al teléfono, pero salta el buzón.

- Esto es muy raro, Lisa nunca apaga el teléfono. - Dice Jackie preocupada 

- Se habrá quedado sin batería e iría a por un cargador... - dice mi mejor amiga para calmarla.

Seguimos buscando por el hotel y nos dividimos en grupos para ver si la vemos también por los alrededores. Daiani y yo llevamos un buen rato caminando, sin resultados, ambas volvemos al hotel exhaustas y derrotadas.

- ¿A donde habrá ido? - Pregunto, preocupada.

- No lo sé, pero esto no me huele bien, esto no es propio de Lisa y mi sexto sentido me dice que algo pasa.

Pronto llegan los demás, también sin noticias y con las manos vacías. No nos queda más remedio que informar a los profesores de la falta de esta, pronto la guardia de la zona empieza a buscarla, pasan las horas y siguen sin rastro de ella. Jackie se echa a llorar de angustia y Daiani y yo la abrazamos para consolarla.

-¿Y si le ha pasado algo malo?- Solloza.

- Estoy segura que todo esto, tiene que tener alguna explicación, la gente no desaparece así como así - Objeta mi amiga tratando de calmarla.

Parece que los guardias han dado finalización a la búsqueda por hoy y deciden que mañana, cuando amanezca retomarán la búsqueda. 

- ¡No podemos dejarla ahí fuera, puede que estos días se haya comportado de lo más extraño, pero todos sabemos que ahí fuera hay demonios, sacados del mismísimo infierno y sabemos de lo que son capaces, está empezando a oscurecer, si le ocurre algo no me lo perdonaré en la vida.

Miro a Daiani y ella me devuelve la mirada, no hace falta decir nada más, estamos juntas en esto. Busco la forma de ir más rápido cuando Lilith y Arioch aparecen con dos motos de nieve, seguidos de Matheo y Chloe.

- Que conste que esto es obra de los diablillos, nosotros jamás robaríamos. - Explica Chloe angustiada.

Didi se monta con Lilith y Arioch me hace un gesto para que me monte detrás de él. Nunca he montado en algo así y siendo él quien conduce temo un poco por mi vida. Jackie decide quedarse por si Lisa decide volver. Arrancamos a gran velocidad hasta adentrarnos en el bosque, puedo ver por encima de nuestras cabezas como va oscureciendo.

- Pase lo que pase no os separéis. - chilla mi demonio.

- Tranquilo ojos verdes, nadie os va a quitar el puesto de revolcarse esta noche. - Se burla Didi.

Este le hace el corte de maga y esta le devuelve el gesto con una sonrisa. Estamos ya tan adentrados en el bosque, que apenas se ve el hotel a lo lejos. El aire me da con fuerza en la cara y escondo mi cara entre la espalda de Arioch.

-¿Tienes frío?- Pregunta con dulzura.

- No, tranquilo, estoy bien. - Y lo abrazo con más fuerza, el acaricia mis manos con ternura, pero de repente frena bruscamente, haciendo que me choque con su fuerte espalda.

- ¿Habéis oído eso? - Pregunta alarmado.

Todos nos quedamos en silencio, mirando a todas las direcciones, cuando de repente un demonio se para frente a nosotros. Es el doble de grande de los que hemos visto hasta ahora, su piel está completamente podrida y a diferencia de los otros tiene un tercer ojo.

- Al menos es solo uno... - digo con voz temblorosa.

- Créeme que no es uno cualquiera, se trata de un lucifugi, también conocido como demonio de la oscuridad, saca a la luz los siete pecados capitales y los refleja como un trauma personal, pase lo que pase, no dejéis que su tercer ojo haga contacto con vosotras, los demonios que nos hemos enfrentado hasta ahora eran un chiste comparado con este. - Explica Lilith.

Veo cómo Arioch salta de la moto y se posiciona listo para el ataque al lado de Lilith, espalda con espalda, no nos da tiempo a reaccionar porque este se abalanza sobre ellos, pero nuestra demonia es más rápida y con una elegancia sepulcral, le clava una espada, haciendo que este pierda su mano. Sin embargo no sale sangre, ni ningún otro tipo de líquido.

- ¿Por qué no sangra? - Chillo entre el ruido. 

- Lilith se ha olvidado contaros que esta clase de demonios solo mueren si clavas tu arma en su ojo, da igual cuántas veces lo apuñales, no se muere... - añade Chloe mientras se abalanza con fuerza contra este a la vez que Matheo.

Daiani y yo cogemos nuestras armas y nos disponemos a atacar. Atacamos una y otra vez, hasta quedarnos sin aliento, pero hagamos lo que hagamos, ninguno llegamos a clavar el arma en su ojo. Estamos todos jadeando y exhaustos, el lucifugi ruge con una fuerza feroz y parece que aumenta su tamaño.

- ¿Qué vamos hacer? Necesitamos llegar a su ojo. - Resoplo.

- Si al menos pudiéramos hacer contacto visual... - se queja Daiani.

- La única forma de que esté quieto es que posea la mente de alguien, pero es demasiado arriesgado, dado que la otra persona puede no volver en si... - razona Matheo.

El demonio se abalanza contra Chloe haciendo que esta se golpee bruscamente, contra el árbol y pierda el conocimiento.

- ¡Chloe!- Matheo grita con fuerza mientras corre hacia ella mientras que el resto aleja al caído de ellos, - Chloe por favor, despierta, - chilla, ella abre los ojos confundida y este la abraza con fuerza. - no vuelvas darme ese susto. - Le regaña.

Pronto se unen al grupo, veo como todos están llenos de rasguños y heridas, si seguimos así no aguantaremos mucho más. Lanzo mi arma a un lado y me aproximo al demonio sin hacer contacto visual.

- ¿Qué estás haciendo Cami? - Me grita mi amiga al verme hacer algo tan temerario.

- Tú solo confía en mí, - le suplico a mi amiga, puedo sentir sus rugidos recorrer todas mis entrañas, me tambaleo por la intensidad de este, estoy casi a su altura, cuando esté se abalanza a por mi... - Didi, ¡Ahora, lánzame tu daga! - grito con fuerza.

Esta no lo piensa dos veces, la atrapo al vuelo haciendo que este se vea reflejado así mismo. Pronto empieza a retorcerse y gruñir de dolor.

- ¡Ahora Lilith! - Chillo.

Esta se abalanza sobre el y le clava la daga justo en su punto débil. El bicho empieza sacar un líquido negro de este que termina salpicándonos y con este muerto en el suelo Daiani corre a abrazarme y Arioch me levanta del suelo para besarme.

- Eso ha sido una locura, pero bien hecho... - dice Matheo mientras me guiña un ojo.

Retomamos la búsqueda, cuando minutos después escuchamos un sonido. Por favor, otro demonio no, suplico mentalmente. Nos adentramos un poco más, movidos por el ruido y de pronto la vemos. Lisa está en medio de un círculo con una estrella de doce puntas, rodeada de velas, tiene los ojos totalmente en negro y sostiene el libro con ambas manos. De repente un aire frío apaga las luces, haciendo que quedemos a oscuras.