Capítulo 6

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Esto estaba resultando ir más rápido de lo pensado.

Henry llamo ayer, invitándome a cenar en su casa. Dijo tener la intención de conocerme un poco más y yo accedí. Es lo mejor que podía pasar, me estaba acercando mucho más a la familia.

Pero en mi interior no era solo ese mi impulso para aceptar, también estaba Charlotte.

No la veía desde la gala, en realidad era poco lo que podía saber de ella pues parecía tener una rutina muy normal, en nada parecida al resto de los miembros de su familia. Lo anterior, en palabras del investigador que la sigue en todo momento a donde quiera que va.

En una hora debía estar arribando a la casa de los Parker. Conocería la mansión de la que me había enseñado fotos, cuando mande a investigarlos. Entraría al territorio de mis enemigos, había luchado como nunca contra m mismo para continuar concentrado y estudiarlos de cerca.

No me puse corbata, era algo casual. Mi americana azul y la camisa blanca debajo, me iban bien para el vaquero que llevaba puesto. Henry menciono que sería una cena casual, nada elegante, que estaríamos en la intimidad de su casa y capte el mensaje.

Cuando tomé todo lo que necesitaba como mi reloj, pañuelo, mi telefono y billetera me sentí listo, solo faltaba un poco de loción y quedaba perfecto.

Conduciría mi auto en esta ocasión.

Sali de mi habitación, bajé las escaleras y salí al recibidor donde estaba mi elevador. Todo el último piso es de mi propiedad, lo compre hace tres años pensando en mi privacidad y seguridad, aquí el acceso es limitado porque el elevador se pone en marcha con mi huella o con una tarjeta que solo Patrick tiene, en caso de emergencia.

No tarde mucho en llegar a mi estacionamiento, porque si, el pent-house lo traía incluido. Me gustan las compras inteligentes, así que podía tener todos mis autos están estacionados aquí, cuatro en total.

Había tomado las llaves de mi Aston, no quería la camioneta, ni el todoterreno, tampoco el Ferrari que recién había comprado.

Encendí el motor que rugió en cuanto puse en marcha el auto. Me aleje muy rápido del estacionamiento, la música en volumen bajo seria mi compañía mientras conducía.

Seguí las indicaciones que me daba la voz del sistema de navegación, para llegar a la dirección que me había hecho saber Henry por un mensaje que dejo con Carmine.

El lugar queda a las afueras de la ciudad, en una zona exclusiva donde muchos banqueros, magnates y artistas tienen propiedades enormes avaluadas en millones de dólares.

Cuando la voz del GPS me indico que había llegado a mi destino, ubique mi auto frente a un portón gigante de color negro, el cual se abrió haciéndose a un lado dándome el paso.

Mis ojos vagaron por lo que podía ver del terreno que sabía bien, es grande. A los lados hay arboles de pino, sigo el camino hasta dar con el frente de la casa que esta bordeada de flores color rosa que contrasta con el blanco de las paredes y el verde del césped bien cortado que estaba iluminado por un juego de luces que no daba espacio a la oscuridad.

Apague el auto, cuando me estacione a un costado sin obstaculizar la entrada y baje del mismo.

Nada más abrir mi puerta y bajar, me tense.

Este lugar era de ella, lo gritaba por todos lados. Su aroma estaba en el aire.

Jardín y magnolias.

Cuando me acerque a la puerta, no necesite tocar el timbre porque esta fue abierta y una chica que parece ser la mucama me recibió. Su uniforme elegante de falda negre y camisa blanca, así me lo hizo entender.

𝗘𝗻 𝗹𝗮𝘀 𝗺𝗮𝗻𝗼𝘀 𝗲𝗾𝘂𝗶𝘃𝗼𝗰𝗮𝗱𝗮𝘀 ❤🔥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora