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Mark se encontraba emocionado, su lobito en su pecho vibraba de la emoción que tenía, hasta sus piernas temblaban.

Había estado esperando demasiadas semanas para ese momento, hoy era el día que iba a acompañar a sus hyungs a una ecografia.

Desde su última crisis existencial todo mejoró abismalmente, era increíble como parecía ser que al fin toda su vida ya encontró la forma de alinearse y permitirle al fin tener paz, paz de verdad.

Al parecer la ofrenda que hizo Shotaro se cumplió, realmente consiguió que se llenará de luz de la luna y que finalmente caminara, pasará con su silla, por el camino de la madre loba.

Luego de que la reunión entre Donghyuck y Taeil haya salido exitosa, Taeyong lo tenía más en cuenta en las actividades de Ncit, pidiéndole ayuda en cosas más serias y hasta preguntándole su opinión para tomar algunas decisiones.

A Mark le estaba gustando demasiado aquello, se sentía correcto, como si eso fuera lo que debía de hacer, dedicarse por completo a Ncit.

Por otro lado, obviamente el hijo de los Cho había nacido, se lo contó EunHye y también lo leyó en algunas noticias, el pequeño se llamaba Woohyun. Su tía le preguntó si quería al menos verlo por foto pero se negó, todavía no estaba preparado para eso.

¿Qué si se sentía mejor con toda esa situación? Claro, ya no era tan doloroso, pero seguía causándole demasiada incomodidad y la verdad es que no quería volver a meterse demasiado en ello.

Estuvo algunos días algo apagado luego de esa noticia, pero nadie lo dejo caer, ni su nueva familia ni tampoco Donghyuck, quien era la única otra persona que sabía sobre esa situación.

Ah... Donghyuck.

Inevitablemente se hicieron más cercanos, mucho más cercanos, era agradable haber conseguido algo así, se sentía feliz de poder ser merecedor de una amistad como la que tenía con Donghyuck.

Además ahora sus grupos se encontraban unidos, luego de que los Zhong, Ruby y Hyejin volvieran a clase, Donghyuck no permitió que se alejará de ellos, así que ahí estaban.

Lucas no tuvo problema alguno de integrarse con ellos, de hecho los chicos ya lo adoraban, era imposible que él le cayera mal a alguien. A su vez se hizo gran amigo de Hyejin, los dos andaban de lado a lado juntos, provocando que los otros 3 perritos protectores de la omega se les pusieran celosos, era divertido.

Oh se sentía tan bien tener un grupo de amigos verdaderos.

Y ahora volviendo a la situación actual, se encontraba junto a Taeyong esperando a Doyoung, así iban a hacer la maldita ecografia al fin.

Una rafaga de felicidad lo recorrió de pies a cabeza, ¡Que emoción!

Era normal sentirse de esa manera, Lucas le contó que si en un grupo de omegas hay uno en cinta lo más probable es que todos anden bien emocionados y pendientes por él, debido a sus instintos, ya que a sus lobitos les encantaba la idea de traer cachorritos al mundo. Así que por eso junto a Ten y a Lucas lo perseguían a Doyoung a todos lados, ninguno se quería perder ningún momento del embarazo.

Era uno de los pocos momentos en que se sentía feliz con ser un omega, realmente le gustaba ese sentimiento.

¡Se estaba muriendo de la emoción por conocer al pequeño cachorro!

-Así que al fin le van a contar a sus padres y a EunHye hoy -comentó para romper el silencio, Taeyong se veía un poco tenso.

Sus hyungs habían ocultado el embarazo hasta que fuera seguro, las únicas personas que lo sabían eran ellos, YoungHee, los Zhong y Donghyuck, eran una multitud pero no la suficiente.

the Moon (문) to the truth | MarkhyuckOù les histoires vivent. Découvrez maintenant