Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
"¿Entonces tu casa o la mía?"
"Chris, son casi las tres de la mañana".
Miraste a tu amigo; Chris se estaba desabrochando el chaleco y lo colgaba en su casillero. Te quitaste los guantes de tiro y los tiraste. Había sido una llamada nocturna del capitán Wesker: un tirador activo. Se solicitó STARS en el lugar junto con la negociación de rehenes. Después de casi cinco horas, Chris, siempre el tirador, logró hacer un tiro claro y despachar al tirador. Wesker había sido lo suficientemente generoso como para permitir que todos escribieran sus informes mañana.
Chris se encogió de hombros. "No estoy cansado. ¿Y tu?" La adrenalina era obvia en el rostro de Chris. Pupilas anchas, piel teñida de rosa. Supusiste que dispararle a un hombre te haría eso.
En verdad, estabas en un barco similar. Tu propia mira había sido apuntada hacia el tipo, pero tu dedo en el gatillo era más lento, más incierto. Pero no detuvo esa avalancha cuando el arma se disparó, y usted pensó que era suyo.
"Bien bien. ¿Pero dime que al menos limpiaste tu sala desde el fin de semana pasado?" suplicaste, con los labios apretados en una mueca.
"Oh, definitivamente no". Gemiste, con la cabeza cayendo hacia atrás y Chris simplemente te rodeó con su brazo; te meció hacia adelante y hacia atrás, un gesto familiar que ustedes dos compartían a menudo. "Oye, podrías ayudarme si quisieras. Ya has ido lo suficiente como para empezar a cobrarte el alquiler."
