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~Mara~

Me levanté del taburete casi de un salto, un poco avergonzada. Law me miró un poco extrañado, pero no dijo nada.

—Voy a... limpiar el polvo de los libros, si te parece bien —dije y sin esperar una respuesta, cogí el taburete, lo puse frente a la estantería y me subí con un trapo.

Law no dijo nada, simplemente volvió a lo que estaba, cosa que me alivió. Me muero de vergüenza.

Empecé a despojar las estanterías de madera de los libros, mirándolos uno a uno, dejándolos sobre una mesa cercana. Cuando estuvieron todos los de una fila fuera, limpié la madera rápidamente y bajé del taburete para sentarme en él y limpiar los libros.

Me permití abrirlos por una página aleatoria, pasando las páginas rápidamente. Después pasaba el trapo por la portada del libro y lo dejaba a un lado.

Continué haciendo esto un rato, hasta que encontré uno que me llamó especialmente la atención.

—Anatomía... —susurré, acariciando la portada con cuidado.

Recordé momentáneamente las clases de dibujo que hacía varios años atrás y sonreí por la nostalgia. Esos años fueron divertidos, pero también bastante duros. Eran muy exigentes.

—Mara-ya —me llamó el azabache y le miré, sorprendida—. Llevas un rato mirando ese libro, ¿le pasa algo?

—¿Qué? No, no... no es eso, perdona —aparté la mirada de sus bonitos ojos y dejé el libro, continuando con mi labor.

—¿Entonces? —insistió él.

¿Estoy soñando? ¿Law quiere tener una conversación conmigo...? No puedo rechazar esta oportunidad.

—Bueno... —tomé el libro nuevamente, ensañándole la portada— cuando era más joven, estudié en una escuela de artes y nos enseñaron anatomía humana y animal. Me venían recuerdos de entonces.

—Vaya, no sabía que se necesitara saber de anatomía para dibujar —dijo él, parecía sorprendido. Me reí un poco.

—Sí, necesitas muchos conocimientos si quieres dibujar bien.

—¿Entonces sabrías identificar los órganos de las personas? —preguntó con un tono ligero de emoción.

—Eh... no, no llego tan lejos —me reí—, pero sí que me sé los músculos y los huesos.

—Aún así es sorprendente —respondió.

Esto es muy raro. Law normalmente no se muestra tan interesado por la gente que no es de su tripulación y aún así...
Supongo que solo intenta ser amable.

Mi sonrisa se esfumó. Asentí ligeramente y volví al trabajo, apartando la mirada.

—Ahora mi trabajo es mucho más frío que cuando estudiaba —continué hablando, esta vez sin mirarle—. Mi jefe es mucho más exigente que mis profesores, lo quiere todo perfecto y trabajo más horas de las que debería porque soy una persona perfeccionista.

Suspiré un poco.

—Digamos que haberme traído aquí es lo más interesante que me ha pasado este último año y lo más calmado también —sonreí un poco—. Me someto a mucho estrés normalmente.

Noté su mirada sobre mi perfil y me giré para mirarle.

—Te entiendo —respondió—. Bueno, no exactamente. Yo no trabajo como tal, supongo que lo sabes —asentí—. Pero ser perseguido día sí y día también, ser el capitán de un submarino y médico pues es cansino a veces.

A través de los mundos (Trafalgar Law)Where stories live. Discover now