Desde Altamar

Oriente

Durante el trayecto hemos hablado de cosas triviales como el tráfico en esta ciudad, el clima, el trabajo, etc.

Les a pasado que ¿encuentran personas con las que es muy fácil comunicarse? ¿Personas que siempre saben escuchar pero también hablar?

Bueno pues Christian es una de ellas, tal vez sea porque nos conocemos de hace tiempo, o porque los dos estamos dañados de alguna forma pero con el siempre a sido facil hablar, cuando él lo intenta y yo lo permito.

Llegamos al establecimiento y nos dirigimos hacia la entrada,  Night Drinks es un lugar precioso con luces calidas y diseño vitange, son de los pocos lugares en esta ciudad donde puedes, cenar y platicar, o tal vez bailar y cantar, también si te lo propones puedes olvidar las penas después de algunos tragos.

Al entrar hay varias parejas en la pista bailando música latina, el género es conocido como Salsa y es tradicional en un puerto como este.

Nos dirigimos hacia las mesas y siento la mano de christian en mi espalda baja, no es que no lo halla echo antes, hemos salido muchas veces y somos digamos que  amigos, pero con todo lo acontecido el día de hoy me empiezo a sentir nerviosa, tal vez mi conciencia sabe que antes de llegar aquí prácticamente planie todo esto, con unas esquizofrenicas latinas.

— Y bueno, ahora sí cuéntame todo Ing.Kailani ¿Dónde te habías metido?

Levanto las cejas con sarcasmo ante lo que acaba de decir

—¿Yo? Tu ¿dónde te habías metido? Tenia ya rato que no te veía
—Nos vimos en la mañana
—aaa ¿Eras tú?
El me sonrie porque de alguna forma nuestra relación siempre es así, un poco divertida rayando al sarcasmo.

Nos traen las cartas para ordenar y la verdad es que yo no suelo ver mucho, porque si veo demaciado todo lo que hay no voy a decidir pronto.

—Deberias pedir este—dice Christian señalando una bebida en la carta

—Ja,ja,ja,ja que gracioso andas hoy Lagos

Esa bebida digamos que tiene una larga historia, se las contaría pero la tengo media borrosa, tal vez más adelante que recuerde más detalles al respecto.

—Y ¿Porque no ha llegado Kalell?
—Se quedó con unos amigos en la costa
—Pasas mucho tiempo sola aqui
—Me gusta estar sola
—No te creo—lo dice como si estuviera muy seguro

No se que decir porque aunque somos amigos no voy a explicarle con detalles lo que en verdad siento.

—Tu también pasas mucho tiempo solo ¿A caso no te gusta?
—Mas o menos
—Bueno es que solo, que digamos solo, pues  tampoco, siempre hay alguna chica que te haga compañía

—Si a veces—me dice con una sonrisa arrogante

Maldito, no niega que se aprovecha de la debilidad de muchas chicas...

—¿Y tú novia la rosita fresita? Ya no la he visto desde hace mucho

Christian solo sonríe y se distrae viendo a su alrededor.

¿Que significa eso? ¿Me está dando el avión acaso? No quiere contestar o ¿es que sigue en una relación con ella? Se de muy buena fuente que no, que ya terminaron hace meses, pero es que la verdad con este hombre nunca se sabe.

—Es complicado—Me dice de pronto
—¿Que?
—¿Y tu novio?
—¿Cual novio?
—El de las camisas planchaditas

Me empiezo a reír por la forma en que lo ha dicho y es que se perfectamente a quien se refiere con ese término.

—No es mi novio
—Te llevaba a casa
—¿Y eso que? Tu también lo hacías y no significa que fueramos novios— me arrepiento de esto último pero ya lo dije
—Es diferente
—bueno eso sí, él siempre anda con la ropa planchada—Digo al borde de la risa
La risa de christian llena todo el espacio que hay entre nosotros, tiene muchísimo tiempo que no escuchaba su risa escandalosa, no se si porque tiene mucho que no nos frecuentamos o porque casi no ríe de esa forma.