، 🦋 : Ducha.

727 127 2
                                    

Descansaban en una mesa de la plaza comercial, Jungkook tomaba un frappé, mientras que Jimin comía un helado sencillo de vainilla. Uno frente al otro, compartiendo sonrisas mutuas. Bromas que Jungkook decía para levantarle el ánimo a Jimin.

—¿Sabes en qué puede ayudar esto de que Jongsuk y Jarin estén en la universidad?

—¿En?

—No tendremos que poner más excusas para vernos. Puede ser cuando queramos.

Jimin sonrió rodando los ojos. Golpeó la mesa con suaves toques de su dedo índice. Hablaba con la verdad, era algo que les facilitaba lo que sea que tuvieran. No le gustaba la idea de que sus hijos se enteraran aún de que en su pasado hubo algo con ellos, mucho menos que sus vacaciones cambiaron su tipo de relación como consuegros, si así podían llamarse.

—Eso no me quita la preocupación —torció sus labios—. Es que es mi única hija, Jungkook —formó un puchero—. Me sorprende no verte igual que yo, respecto a Jongsuk. ¿No te preocupa?

Jungkook se cruzó de brazos en su asiento. Riendo al echar la cabeza hacia atrás, terminó pasando su dedo índice por debajo de su nariz, rascándola un poco.

—Lo único que me tiene preocupado es que ese niño cuide de más a Jarin. Ya le dije que debe cuidarse siempre, más tratándose de ella. No quiero tener un nieto contigo.

Jimin arrugó su nariz, sus ojos se achicaron hasta demostrar el horror en su facciones. Todo por la idea que dijo y que antes pensó.

—Claro que no queremos eso. En primer lugar porque son jóvenes para una responsabilidad tan grande, y conociéndolos... no sería fácil. En segundo, porque sería muy extraño todo esto con un niño que compartiría genes nuestros —Jimin empezó a negar—. No, no. Acabas de arruinar mi helado.

—Tranquilo, al menos sabemos que los dos si son responsables cuando se trata de eso. Yo hablé con Jongsuk muy seriamente.

—Y yo con Jarin.

—Te estuviste riendo. Dudo que haya sido una plática seria.

Jimin se hizo el ofendido.

—Me causó gracia la situación, pero después, cuando se fueron, hablamos de cuidarse y otras cosas.

—¿Cómo?

—Le conté algunas experiencias que pasamos igual.

Jungkook negó con los ojos bien abiertos, recordando una tras otra de esas veces que tuvo que salir a escondidas de la habitación de su novio.

—¿No dijiste que no querías hablarles de nosotros?

—No le dije como tal que fuiste tú.

Jungkook asintió con sus labios de lado. Tomó un sorbo de su café, mientras luchaba por no escupirlo ante el recuerdo que apareció en su mente.

—Por favor, dime que no le contaste de la vez que tu mamá casi me encuentra en la ducha de tu casa, contigo.

Jimin soltó una fuerte risotada que lo hizo cerrar los ojos. Era una de las mejores anécdotas que tenían, y aún así, prefirió guardársela para él mismo.

"Jimin aprovechaba cada momento a solas en su casa para invitar a su novio de preparatoria y pasar el día juntos, muy juntos al punto de aprenderse cada parte de sus cuerpos.

Los padres de Jimin salieron a una junta de negocios, por lo que tendría gran parte de la tarde y noche solo, no dudó en invitar a Jungkook. Después de pequeños toqueteos que cada vez pasaban a más, terminaron en la ducha, dándose un baño juntos, la cual era interrumpida por besos y risas entre cada roce que tenían.

Las cuales, cesaron al escuchar la puerta principal abrirse y cerrar, al igual que el sonido de una voz femenina y otra masculina. Jungkook abrió los ojos de par en par, mientras que Jimin mordía sus labios de nervios.

Jimin... —Jungkook habló entre dientes.

Jimin asintió y llevó sus dedos a los labios contrarios, pidiéndole guardar silencio. Comprendía, era la segunda vez que los encontraban en una situación comprometedora.

—No digas nada. Cállate y termínate de bañar.

Jungkook frunció su ceño. Jimin salió de la ducha, tomando su celular que dejó encima del lavamanos, poniendo música para disimular la voz de Jungkook, que lo llegara a delatar al estar dentro con él. Volvió a entrar a la ducha, Jungkook tan sólo negaba al ver al rizado seguir con sus dedos en sus labios pidiéndole silencio.

Unos golpes en la puerta se escucharon, Jimin carraspeó su garganta.

¿Sí?

—Ya llegamos, cariño —anunció su madre con voz alta—. Trajimos algo de cenar, te esperamos en la mesa.

Jungkook alzó ambas cejas, Jimin llevó su mano a su frente. ¿Cómo sacaría a Jungkook del baño?

—Sí, mamá. Gracias.

—No hay de que, cariño.

No hubo más ruido. Jungkook enarcó sus cejas y se cruzó de brazos, esperando una solución de su novio.

Estás mal si crees que voy a salir como si nada y que ellos me vean. No sé qué clase de novio pensarían que soy.

—Lo sé, lo sé —chilló.

—Tienes que aprender a medir tus tiempos, amor —se burló.

Jimin asintió, aún nervioso.

Tengo una idea. Vas a cenar con nosotros.

—¿¡Qué!?

Jimin le dio un golpecito en el brazo, llamando su atención por el tono de voz que usó.

—¡Cállate!

¿Es que cómo se te ocurre eso? Te recuerdo que aquí no hay ventanas por las que pueda salir.

Jimin negó y cerró la llave del agua. Tomó una toalla, dándosela al castaño, y otra que se quedó él para secarse.

Voy a distraer a mis papás cuando salga del baño, y tú te irás a mi habitación. Les diré que estás conmigo y subiré a dejar mi ropa, después bajaremos los dos y no habrá nada sospechoso.

—¿Y el cabello mojado?

—Usarás la secadora.

—¿Y el ruido?

Siempre la uso al salir de la ducha, así que me lo secaré y a ti igual. Listo.

—No sé porque me haces pasar tantas cosas así, rulitos —Jungkook se quejó casi en un chillido, poniéndose su ropa."

Jimin negó tras el recuerdo, apretó sus labios sonriendo después. Jungkook lo miraba atento, aunque sabía, se perdió en el recuerdo. Jungkook también los tenía muy presentes.

—Le conté de la vez que saliste por la ventana.

Jungkook asintió y chasqueó su lengua. Señalándolo con su dedo índice. Por supuesto que recordaba ese primer día que tuvo que salir por ahí. El terror que sintió la primera vez, sin saber que se convertiría en su rutinaria salida.

—El día que casi te quedabas sin novio.

Jimin soltó una risa, golpeó sus muslos.

—Sólo pisaste mal un escalón, nada grave.

—Nada grave —lo imitó copiando su voz—. Ya quisiera verte hacer lo mismo que hice y digas que no era para tanto.

—Tan dramático como siempre —rodó los ojos con diversión.

—Tan relajado como siempre —Jungkook se defendió, sacando sonrisas de ambas partes.

not you again, please › kookminWhere stories live. Discover now