La villana cautiva al Gran Duque

❄️Capítulo 81❄️

Rayglen silenciosamente alejó un poco a Shuell. Poco después, Sevi fue capturado por los sacerdotes y obligado a levantarse.

—No, ¿no estamos hablando? ¡Preguntó sobre si elegí una fecha!

Los Caballeros Sagrados miraron a Rayglen para ver si Sevi decía la verdad. Cuando asintió, lo soltaron con una expresión de incredulidad.

Sevi se aclaró la garganta.

—Ese caballero que dice haber sido atacado por un monstruo, lo busqué y descubrí que tiene un hermano menor...

—Lo sé.

Sevi chasqueó la lengua ante la respuesta de Rayglen.

—¿Sabes sobre esto? Escuché que confió a su hermano menor al Templo.

—¿Podemos verlo? —preguntó Shuell tan pronto como Sevi terminó de hablar.

Sevi levantó el dedo índice y lo agitó de izquierda a derecha. Parecía orgulloso y relajado.

—No, se escapó hace unos días —respondió con confianza Sevi.

Entonces, ¿por qué diablos mencionó al hermano menor? ¿Para presumir de haberlo visto en el Templo?

Sevi soltó una risita y continuó hablando.

—También lo estamos buscando, pero es muy difícil encontrarlo. Al parecer está deambulando por aquí y allá —añadió Sevi y señaló a Rayglen con su molino de viento—. Oh, ese caballero pertenecía a un grupo de mercenarios, ¿el Gran Duque lo sabe?

Rayglen asintió ligeramente con la cabeza.

Sevi sacó un trozo de papel de su bolsillo y se lo entregó a Rayglen.

Ojos, nariz, boca y orejas sutilmente torcidas... Un "retrato" con muchas líneas irregulares.

—El registro del Templo no se filtra, así que lo dibujé yo mismo. Tiene más o menos este aspecto —dijo Sevi con orgullo.

Shuell se tomó un momento para recuperar el aliento mientras miraba la imagen que parecía un mono borracho. Pronto se calmó y vitoreó con voz aguda.

—... ¡Wow, wow...! ¡Realmente no sé cómo Sevi es tan bueno dibujando! ¡Esto debería ser considerado una reliquia!

Sevi enderezó los hombros con orgullo ante el torpe cumplido.

Shuell tomó el papel y se tragó la risa. El dibujo era como el retrato de una combinación entre un mono borracho y un monstruo.

«Dos ojos, una nariz, una boca... Simplemente acertó con la composición.»

Una de las manos tenía 6 dedos. Incluso Rayglen parecía incapaz de decir algo más sobre el dibujo infantil.

—Ya que hice tanto, debes liberarme antes de la excavación de la Tercera Tablilla, ¿entendido? —dijo Sevi a Shuell, como si le estuviera recordando su promesa.

—¡Sí, no te preocupes!

Pudo responder con confianza porque la Tercera Tablilla no sería excavada.

«No mentí. Dice que debo liberarlo antes de que se excavé la tercera tablilla, pero nunca puso una fecha límite, ¿verdad?»

Sevi, que no sabía que Shuell sonreía por dentro, se frotó la nuca y miró a su alrededor como si estuviera frustrado.

—Siento una especie de energía maligna.

Shuell no pudo evitar reírse de esas palabras.