044.

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— ¡Jimin, levántate!— Jinyoung salió gritando del baño.— ¡Se nos hará tarde!

La puerta de la habitación de Jimin se abrió provocando ese ruido molesto de oxidación. De ésta salió Bangji corriendo y la cara recién levantada e hinchada de Jimin se asomó. Dando un fuerte bostezo y rascándose el abdomen, salió de ahí.

— Acabo de tener un déjà vu.

— No importa, ve a bañarte.

Hoy eran las re-inscripciones de nuevo año y tenían que llegar temprano antes que las filas en las oficinas de la facultad fueran más que largas. Jimin tardó lo de siempre y se fueron a la universidad sin desayunar, como era de esperarse, aunque aún no estuvieran abiertas las oficinas, ya se habían formado las filas. Jinyoung dejó a Jimin en una de ellas y ella salió a las carreras a una cafetería que estaba cruzando la calle, fue a comprar algo de desayuno para ambos.

— Aquí tienes.— Le pasó un café y se sentó a su lado en las escaleras.— Traje rosquillas.

— ¿Hay glaseadas?

— Ajám.

Aún faltaba media hora para que las ventanillas abrieran y casi todo el alumnado ya se había hecho presente y las filas eran más y más largas. Muchas especialidades, muchos alumnos, mucho papeleo. Algunos estaban tratando de convencer a los de hasta enfrente para que les dieran espacio, entre ellos Taehyung.

— Entonces, ¿sí?— Miró a Jini con una sonrisa inocente.

— Si sólo vienes tú, está bien.

— ¡Sí, sólo yo!

— Entonces, ve entrando pero con discreción.

Taehyung asintió e hizo todo lo contrario, además, las risas de Jimin al ver el intento fallido de Tae fueron muy escandalosas. Los últimos minutos ella estuvo usando el celular y intentando callar a los dos chicos que la acompañaban, que al parecer se habían hecho muy cercanos.

Las secretarias llegaron y las filas cobraron vida. Como eran de los primeros, llegaron e hicieron todos los tramites necesarios, les dieron las formulas que tenían que llenar y juntos las llenaron en una de las mesas que estaban ahí. Cuando terminaron, entregaron el papeleo y se aseguraron que ya no hubiera más pendientes.

Estaban yendo a la salida, pero Jini se percató de alguien.

— Alerta perra, repito, alerta perra.

— ¿Uh?

— Mierda, ya nos vio.

— ¿Quién?

— La perra mala, Jimin.— Dijo irritada.— Ahora, aprieta tu agarre.— Jimin, quien la abrazaba por los hombros, la pegó más a su cuerpo.— Pase lo que pase, ignórala, mírame a mí, ¿de acuerdo?

— Okay.

Jinyoung era muy buena en las corazonadas y como lo pensaba, Hyemin se acercó a ellos, tirando de su cabello para atrás en un movimiento fachoso, y con pasos seguros, ella fue a donde Jimin y Jini.

— Vaya, vaya, va...— Sin embargo, prefirió no seguir al ser totalmente ignorada. Jimin y Jinyoung la habían pasado de largo, como si de un poste se tratara.

— Su descaro me enferma.

Jimin rió por las rabietas de Jini y la despeinó, ella lo empujó lejos y se metió a la residencia. Ya en casa, puso música en las bocinas y junto con Jimin se pusieron a limpiar el departamento. La verdad era que no estaba tan sucio, ya que antes de irse lo habían dejado limpio y Bangji se había quedado con la tía Jiwoo esos cuatro días. Jini aprovechó para juntar la ropa que se tenía que lavar y Jimin limpió la camita de Bangji, una vez libre de polvo, la dejó en su lugar y le rellenó sus platos de alimentación. Jini aspiró todo, hasta el sofá y la cara de Jimin.

— ¡Jini apaga eso!— Gritó molesto.— ¡Eres un jodido peligro con esa cosa!

Jinyoung rió desquiciada y siguió acercando la aspiradora al rosto de Jimin.

— ¡Sufre, Park Jimin, sufre!

— ¡Para ya o si no, mmh, si no...

— ¿Si no qué?

— Te voy a dar un beso.

La maquina dejó de sonar, incluso Jini la había apartado lejos de Jimin.

— Ah verdad, no que n...— Sus labios fueron succionados y Jini se carcajeó como loca al ver su cara.— ¡Eso fue todo!

Cuando logró liberarse del aparato, lanzó la manguera lejos y empujó a Jini al sofá, cayendo sobre ella pero no completamente para no aplastarla. Lo siento, querida Jini. Y después de regalarle un sonrisa pícara, unió sus labios a los de ella, formando un beso que Jinyoung gustosa le correspondió.

— Pasan de las dos, deberíamos pedir algo de comer, Jimin.

— ¿Deberíamos, no?

— Sí. Ahora bájate de mí que mis tetas no respiran.

Ella se encargó de hablar a Papa Johns y pedir un All In One, siendo ya las tres de la tarde pasadas, ellos estaban en el sofá, Jini ya portando uno de sus típicos camisones y él en sólo sus pantalones de dormir. Escogían una película, decidieron ver Self/Less y cuando ésta empezó, ellos empezaron a comer.

— Dios, amo a ese hombre.— Jini comía su pizza mientras veía con ojos de amor a Ryan Reynolds.

— ¿Y a mí?

— Sí, sí, Jimin. Sigue comiendo.

Jimin rió como niño pequeño y se acercó más a ella. Después de comer el postre, vieron la película en silencio, acurrucados bajo una manta que siempre estaba ahí en el sofá. De poco en poco se fueron acostando y ahora ella estaba sobre él, sintiendo el subir y bajar del pecho de Jimin, él le acariciaba el cabello y miraba concentrado la película la cual se estaba poniendo muy interesante. Jini soltaba rabietas cuando algo no le gustaba y Jimin se burlaba de ella.

Entonces una escena emotiva de un beso llegó.

Jinyoung podía sentir la mirada de Jimin clavada en su cabeza, después de un rato, ella le correspondió era mirada y se quedaron viéndose el uno al otro por un largo rato, hasta que ella se arrastró sobre él hasta estar a su nivel y lo besó. Era la segunda vez que ella lo besaba.

— No sé si esto es correcto o no.

— ¿No te gusta?

— Sí y mucho, pero, no sé...

— Entonces no tienes por qué preocuparte, Jini.

Ella suspiró y asintió, Jimin le dio un corto beso y sin decir más, terminaron de ver la película y Jini lloró con el final.

••••
quería hacer este corto capítulo puente para ya empezar con otra y última etapa de That's Enough...

pero boehhhh, ¡he subido un fic de Hoseok! de hecho, tiene un gemelo 🌝 por si gustan leerlo, jé

¡prepárense para lo que viene btw!

That's Enough ➳ Jimin {Save ME Book #1}Where stories live. Discover now