Es Igual A Mi...- Sirius Black

#35- La vida de un sangre pura.

Anna se sentó junto a sus amigos, donde estaba también su pelirroja favorita, Lily. Vio raro a su amiga, pues no acostumbraba a estar con Los Merodeadores.

-Hola, chicos- saludo- ¿qué hacen?

-Ann, solo hablamos de lo que haremos cuando salgamos de aquí...- dijo Remus, sonriendo.

-Leeon, ¿qué harás tú?- preguntó Sirius curioso, viendo a la azabache.

-No lo había pensado...- susurró- No sé, tal vez buscar una casa y mudarme.

-¿Qué pasó con la mansión Jordan?- frunció el ceño James.

-Mis padres murieron, tengo miedo de ir y que los mortífagos estén ahí esperándome.

-Antes que nada me gustaría saber algo, Ann- murmuró Lily, la nombrada asintió- ¿Eres sangre pura?

La azabache asintió, todos la miraron un poco confundidos.

-Pero en Inglaterra no figura ninguna familia Jordan de sangre limpia.- susurró James, un poco consternado.

-¿Realmente nunca se dieron cuenta que no soy inglesa?- rió.

-¡Yo sí!- bufó Sirius- Digamos que las americanas tienen cierto sentido del humor...

-Luego discutiremos eso, Black. Bueno, en Estados Unidos hay pocas familias de sangre pura. Los Jordan son uno de ellos. Mi familia es grande, pero, hace unos años, comenzó una gran pelea por la herencia y los lazos se rompieron. Aunque, cabe destacar, soy la última Jordan y la más joven. Creo que la única que queda allá es mi tía Eline. Así se reduce una familia que se niega a casarse con sangres sucias- explicó la azabache- Aparte, ustedes saben que estoy aquí hasta los 12 y luego me fui a vivir en Francia. Digamos que no tengo un lugar fijo.

-¿Allá también se niegan a casarse con muggles?- preguntó curioso Sirius.

-Sí, también lo tengo prohibido yo...

-Ann, ¿tus padres están muertos?- murmuró James, dándose cuenta de eso.

-Sí, Jimmy. Murieron hace unos meses. Mis padres... ellos eran fanáticos de la sangre, pero me dieron todo para que me pudiera defender. Me dieron entrenamiento...

-Típico- masculló el chico de ojos grises.

-Pero no era el entrenamiento normal. Sino que, en vez de enseñarme a soportar el dolor, me enseñaron a luchar contra el. A mi me parece que mis padres, en Estados Unidos, eran otras personas. Una vez aquí, todo decayó, se volvieron más fríos, casi no me hablaban. Todo fue muy raro.- se encogió de hombros- Creo que fue porque quedé en Gryffindor. Lo que nunca me quitaron fue la libertad de aprender a defenderme, que es lo más importante para mí, junto a mi libertad.

—Te entiendo— sonrió Sirius, mientras los demás los miraban raro, ellos no entendían eso de las familias de sangre pura y sus prejuicios.

—¿Realmente es tan malo ser criado así?— preguntó Lily, muy curiosa.

—Para mi sí, yo desde chico estaba en desacuerdo con eso, lo que me convirtió en una oveja negra. Mis padres creían que me iba a recomponer cuando entrara a Hogwarts. Obviamente no fue así, porque quedé en Gryffindor y conocí a James que me dejó peor de lo que estaba— el nombrado rió, mientras Remus asentía—.

—Para mí no fue tanto. Mis padres eran compresivos, entendían que yo tenía un carácter particular. Aparte, tuve lazos de amistad muy fuerte con hijos de sangre pura. Eso me salvaba un poco. No me gustaban las charlas sobre nuestra supremacía. Y, como ya les dije, la relación con mis padres se deterioró cuando entré a Hogwarts.— se encogió de hombros— Pero ahora los tengo a ustedes, que es mejor.

Los chicos sonrieron, viendo a su amiga con cariño.

—¿Y tú, Sirius, qué piensas hacer cuándo salgas de Hogwarts?— preguntó Remus.

—Pues, comenzar a entrenarme para ser auror. Es mi sueño. Obviamente tendré que buscarme una casa para vivir. Tal vez la vida tenga algo deparado para mí.— rió.— Tal vez una chica. Tal vez una aventura. Quién sabe.

—Eso suena bien, Black— sonrió Lily.

—¿Y tú, Jimmy?— preguntó Anna.

—También seré auror. Pero ya tengo una chica— la pelirroja rodó los ojos— Espero que alguna aventura haya.

—Rem, me voy a vivir contigo. James ya me cambió— dramatizó Anna.

—Hecho, pero los dos solos, los perros no son bienvenidos— Sirius abrió la boca ofendido.

—Siempre planeamos vivir juntos— James le explicó a Lily— Justo como ahora.

—Pero James se va contigo, Lils. Así que me voy con Lunático.

—¿Por qué yo quedo afuera?— el azabache de ojos grises hizo un puchero.

—Porque será incómodo estar con ambos mientras actúen como una semipareja, así que prefiero quedarme con Leeon, ella no es un perro pulgoso. Ve con Peter tú.

—Eso es injusto, Lupin.— bufó— Anna preferiría vivir conmigo que con un lobito.

—¡Claro que no!— el rubio hizo una mueca.

—Ustedes dos vivan junto, yo me iré con Pet.— sonrió Anna, hablando antes que sus amigos comenzaran a pelear— Hablando de el, ¿dónde está?

—Tenía una cita con una chica— explicó Remus— Creo que consiguió algo más rápido que los grandiosos James Potter y Sirius Black.

—Yo no estaría tan seguro— murmuró Sirius, sonriendo, mientras abrazaba a Anna.

—Quita tu mano, Black. Porque Peter también tendrá una extremidad más que tú.— el azabache rió entre dientes, dándole un beso en la mejilla a la chica.

—Me amas.

—Mmm, déjame pensarlo— hizo como si meditara la respuesta— No.

—Eso dices ahora...

Los demás sólo rieron, viendo muy divertidos la escena.

.-.-.-.-.

Aviso.

¡Hola, gente que ahora se encuentra leyendo esto! Bueno, como verán, estoy actualizando seguido (lo sé, es muuuuy raro). La cosa es que ahora estoy escribiendo sin parar en el fic. Y agradezco todos sus leídos. Perooooo, me encantaría que los votos llegaran a cierto número para que yo suba el siguiente capítulo. El número que les quiero pedir es 25. Esto sería así, si el capítulo llega a 25 votos en un día, no importa, subiré el siguiente instantáneamente. Pero también, si tarda mucho tiempo, esperaré para actualizar. Espero que me entiendan.

Si les gusta la historia y quieren que la siga como ahora, por favor voten y comenten, que eso es lo que me da inspiración y motivos para seguir escribiendo. Igualmente, muchas gracias por los leídos, no me imaginaba tantos. Los adoro y muchas gracias por todo 💓

PD1: Estoy pensando en dedicar capítulos... sí quieren uno, solo pidanlo.