#43- Todo decidido.

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Último capítulo en Hogwarts.

Anna se sentó donde estaban los chicos, lanzando su túnica para un costado, mientras respiraba con calor.

—Odio el calor— farfulló, mientras recogía su cabello.

—Lo sabemos— rió James— ¿Pueden creer que es nuestra última semana en Hogwarts?

—Y luego, hacia un futuro mejor— sonrió Lily, que estaba junto al chico—.

—¿Se dan cuenta que jamás volveremos? ¿Que ésta semana es la última vez que usamos el uniforme?— suspiró Sirius, recordando todo lo bueno que había pasado ahí.

—Aquí viví mis mejores momentos— sonrió nostálgicamente Remus— Algún día me gustaría volver...

—Creo que a todos nos gustaría— sonrió también James—.

—Oh, malditos bastardos— bufó Anna— algún día volveremos para hacer que Minnie pierda la cabeza.

Los chicos rieron, mientras Lily solo sonreía.

—Aquí termina todo— murmuró James, bajando la cabeza— Nos vamos, haremos nuestra vida y... tal vez nuestros hijos vendrán y harán que Minnie se vuelva loca otra vez.

—Que yo no tendré críos, joder— se quejó Anna, cruzándose de brazos—.

—Eso dices ahora— murmuró Lily, sonriendo.

—Te apuesto unas vacaciones en Ibiza a que nunca tendré un hijo— sonrió, totalmente segura de lo que decía—.

—Yo no apuesto, Anna.— negó la pelirroja—.

—¡Pero yo sí!— sonrió James, estrechando la mano de su amiga— Si hasta los 30 no tienes hijos, ganas.

—Trato hecho— rió la azabache—.

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Últimos cuatro días.

Sirius, apoyó su mentón sobre el hombro de la chica, mientras ella sonreía levemente. Ambos estaban sentandos en la torre de Astronomía, el abrazándola por atrás y ella apoyándose en su pecho.

—Sirius, debo hablar contigo— murmuró la chica de ojos verdes brillantes—.

—Si quieres terminar conmigo no quiero que hablemos.— la chica rió, negando— Entonces, dime.

—Es algo que tiene que ver con Regulus...— suspiró— El, bueno... Es un mortífago.

—Ya lo sabía, era de esperar— sonaba un poco decepcionado, pero trató que no se notara—.

Anna exhaló aire, tomando un poco de valor para decir lo que quería.

—Escucha, no te enojes con Reg, ¿bien?— el chico asintió, poco convencido— Voldemort le dio la misión de que bueno... me llevara a sus filas. Si no lo cumple, lo matarán.

—Es su problema, Anna. El se metió en eso, que salga solo.— se encogió de hombros— No te podrás en peligro por el.

—¡Sirius!— bufó, separándose del chico— ¿Cómo puedes decir eso? ¡Es tu hermano!

—Pero eligió su camino, yo no puedo hacer nada.

—Sirius... es tu hermano— bajó la cabeza, un poco triste— Yo daría lo que fuera por tener al mío.

—Creí que dijiste que no tenías hermanos— frunció el ceño Sirius, confundido.

—No tengo. Lo tuve, no lo conozco. Murió cuando tenía dos años— ladeó su cabeza— Tenemos que ayudar a Regulus. Si tú no quiere, yo lo haré.

—Oh... lamento lo de tu hermano, nena.— le dio una pequeña sonrisa— Si tú quieres que ayudemos a Regulus, está bien. ¿Qué tienes pensado?

—¿Te gustaría ser odiado por Voldemort?— el chico sonrió abiertamente— Entonces le diremos que tú eres el culpable de que yo sea buena. Qué fuiste tú el que se encargó de enamorarme y por eso el no pudo hacer nada.

—No suena muy convincente— rió— Pero acepto. Quiero hablar otra cosa contigo, Jordan.

—Dime— apoyó su cabeza en una de las paredes, esperando que el chico hablara.

—James me contó que el y Lily irán a vivir juntos, quieren intentarlo realmente.— la azabache sonrió, orgullosa de su amigo— Y bueno, Remus vivirá en una casa que le dejó su padre. Peter con sus padres. Y yo, eh, quería saber si quieres que busquemos una casa juntos.

—¿Me estás ofreciendo que viva contigo?— rió, mientras el se sonrojaba levemente—.

—Eh, sería algo normal, ya estamos acostumbrados a estar juntos prácticamente todo el día. Solo que ahora estaremos solos todo el tiempo, o en su mayoría. Aparte, nos ahorraría varios viajes a la casa de otro.

—Está bien, Sirius.— ambos sonrieron— Pero yo decidiré dónde viviremos. 

—Trato hecho. De paso, tendremos noches muy interesantes— ella soltó una carcajada, asintiendo.

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Últimos tres días.

La azabache entró a la oficina, viendo otra vez al anciano sentado, esperándola.

—Hola, Anna. ¿A qué se debe tu visita? Quiero suponer que no es por un castigo...—ladeó su cabeza, sonriendo.

—Oh, no, mañana seguro me tendrá por eso. Ya sabe, tenemos que hacer una broma de despedida.— sonrió— Realmente vengo para darle una noticia, tiene seis nuevos miembros para la Orden. Eso me incluye. A mí, a los merodeadores y a Lily.

—Me imaginaría algo así, señorita Jordan— asintió—.

—Entonces espero que no tenga problema  en nuestros arreglos. Ah y que tampoco le moleste que de ahora en más, tomaremos el riesgo que sea necesario.

—Entonces estaré preparado, Anna.

Ambos sonrieron, como muestra de confianza.

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Último día.

La copa de casas y la copa de Quidditch era de Gryffindor. Los leones no podían estar más felices. Especialmente los de último años. Iban a irse con lo mejor. Los merodeadores se sonreían, cada uno en su mano tenía una bomba de humo especial. Esperaban la señal de James para lanzarla. Lily estaba a su par, sin sospechar nada de lo que sus amigos iban a hacer.

James Potter puso un brazo arriba de los hombros de su novia pelirroja. Esa era la señal. Los demás sonrieron, para lanzar por abajo las bombas. Siguieron actuando normalmente, pero, luego de unos minutos, las cinco bombas explotaron, llenando de humo el gran comedor. Varios gritos se escucharon, incluyendo de algunos profesores.

—¡Potter, Black, Jordan, Lupin, Pettigrew!— gritó la profesora McGonagall, mientras el humo se esparcía, dejando ver todas las caras pintadas de los alumnos.

Los merodeadores comenzaron a reír estrepitosamente. Los Slytherin tenían la palabra "perdedores" en su frente, pintados como mujer. Todos estaban pintados. Pero las serpientes de una manera especial, logrando que todos se carcajearan.

—Minerva, deja que los chicos se diviertan. Después de hoy, jamás volverá a tener alumnos tan revoltosos— sonrió tranquilamente Albus Dumbledore—.

Minerva McGonagall asintió. Tenía razón, jamás tendría alumnos tan revoltosos y un dolor de cabeza tan grande. O eso esperaba. Aunque los extrañaría, eso debía admitir.

Es Igual A Mi...- Sirius Blackحيث تعيش القصص. اكتشف الآن