Es Igual A Mi...- Sirius Black

#14- La Seducción Se Siente En El Aire

Sirius se sentía enojada, no enojado si no furioso. La última semana había decidido cambiar de táctica; seducirla. Pero Anna no había cedido. Todos los días era una táctica distinta.

Lunes.

Anna estaba sentada desayunando sola ya que sus amigos todavía no habían despertado .

《 Malditos dormilones》 pensó la muchacha

Por la puerta del comedor entraba un apuesto y radiante Sirius Black, rápidamente se sentó en frente de su "amiga".

-Hola, canuto- saludo tranquilamente Anna-.

-Hola, cariño- saludó, divertido-.

-¿Cariño?- preguntó curiosa, los labios del muchacho se formaron en una sonrisa aún más grande de la que ya tenía-.

-Aunque no lo aceptes, eres mía- contestó seguro, guiñandole el ojo a Leeon-.

Ella lo miro con una ceja levantada esperando respuestas coherentes, sin embargo el se limitó a comenzar a comer.

Martes.

Los Merodeadores se encontraban saliendo del campo de quiddich, iban haciendo todo tipo de bromas.

- Me tengo que ir a cambiar de ropa- los veo arriba- se despidió Cornamenta-.

-Nosotros los esperamos arriba- dijo Lunático señalando a él y a Colagusano, estos desaparecieron en la entrada del castillo-.

-Canuto, voy a vestirme, te veo luego- saludó dirigiéndose a él vestidor-.

-¡Espera!- pidió Canuto corriendo junto con su escoba a Leeon-.

-¿Qué? - preguntó irritada-.

-Tienes barro ahí- dijo mientras acariciaba la mejilla de la muchacha "sacándole el barro"-.

-Emm gracias, creo- murmuró, confundida dirigiéndose de nuevo a su destino principal-.

Miércoles.

Sirius se encaminaba hacia la torre de astronomía donde sabía, gracias al mapa del merodeador, que estaban su amada. Dobló la última esquina y subió las escaleras, no sin antes guardar el mapa. Al llegar se encontró a Anna viendo el paisaje, lentamente se acercó a ella poniéndose a su lado, con el rabillo del ojo miró el rostro de ella... tenía los ojos y la nariz roja; había estado llorando. Canuto suspiró.

-No estás sola- murmuró sacando del trance a la joven, esta volvió la vista hacia el, su cara estaba blanca como papel y sus ojos junto a sus labios y nariz estaban totalmente rojas. Forzó una sonrisa aunque no fue muy creíble.

Sirius lentamente se acercó a ella y tomo sus frías manos.

-No estas sola- volvió a decir- nos tienes a James, Remus, Peter y a la pelirroja, también a mi. Todos te queremos y queremos que estés bien- terminó dándole un suave beso en la mano derecha-.

Canuto se retiró de ahí dejando anonadada a Leeon.

Jueves.