Capítulo 43. Lazos sanguíneos

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La puerta del elevador se abrió y Harry se apresuró a salir. Corrió todo el corredor y paso por todas esas puertas tras las cuales había muchísimos magos y brujas seriamente heridos. Podía escuchar el sonido de su sangre bombeando en sus oídos. Supo que algo horrible había pasado en cuanto su cicatriz había comenzado a dolerle. Apenas unos minutos había aminorado el dolor y había tratado de calmarse. El que le doliera la cicatriz nunca era buena señal.

Las sospechas de Harry se confirmaron cuando le llegó un mensaje de Damien. El corazón de Harry se detuvo al leer el mensaje.

"Papá está seriamente herido, ven a San Mungo en cuanto puedas"

Harry miraba frenéticamente a todos lados buscando a Damien o tal vez a su mamá. No podía encontrar a nadie. Giró una esquina y captó con la mirada a su hermano menor sentado con el rostro oculto entre sus manos. Estaba solo. Harry se apresuró a acercarse a él. Damien levantó la cabeza al escuchar pasos rápidos acercarse a él. Harry sabía que el chico no lo reconocería si seguía con el glamour puesto. No hubiese podido entrar al hospital sin un hechizo glamour.

Harry sacó su varita y rápidamente quitó el glamour para que Damien lo reconociera. Caminó por el corredor cuando vio a Damien ponerse de pie y correr hacia él. Los hermanos se abrazaron rápidamente. Harry podía ver lo preocupado que estaba Damien y las lágrimas que recorrían las mejillas del chico. Damy seguía sollozando sobre su hombro. Harry lo apartó suavemente luchando contra las emociones que comenzaban a crecer dentro de él. Si Damien esataba llorando, eso significaba que James...

—Damy, ¿qué pasó? — preguntó Harry con un nudo en la garganta.

—¡No... no lo sé! Los Sanadores están con papá... mamá, el tío Siri y el tío Moony también están ahí dentro. Entraron hace apenas unos segundos. ¡No lo sé, Harry! ¡Papá perdió mucha sangre! ¡No.. no lucia... no parecía vivo! —Damien volvió a soltar el llanto.

Harry se quedó de pie escuchando a Damien. Podía sentir su corazón golpear su pecho como un martillo.

—Damy, ¿sabes qué le pasó? ¿Cómo salió herido? — preguntó Harry.

Damien le dijo todo lo que había pasado desde que llegó a la Madriguera. Harry escuchó todo sin decir palabra, sentía un nudo en el estómago al escuchar del ataque de los Mortífagos.

—El tío Siri dijo que estaba luchando con... con... él. ¡Él le hizo esto a papá! Estuvo a punto de asesinarlo, pero el profesor Dumbledore llegó justo a tiempo. La maldición asesina estaba por golpear a papá pero el profesor Dumbledore lo salvó. El tío Siri dijo que apartó a papá del camino justo a tiempo. ¡Si no lo hubiera hecho papá estaría muerto! — dijo Damien sin dejar de llorar.

Harry sabía quien era "él" de quien Damien estaba ablando. Era Voldemort. ¡James había sido atacado y casi asesinado por Voldemort! Harry sintió un extraño sentimiento burbujear dentro de él. Odiaba a Dumbledore. Lo odiaba por haber tratado de usarlo, justo como Voldemort había hecho. Harry no veía diferencia alguna entre ambos magos. Ambos querían poder, ambos eran capaces de utilizar y sacrificar todo lo que fuera necesario para conseguirlo. Pero ahora, ese mago había salvado la vida del padre de Harry.

—¿Por qué estás solo? ¿En dónde están tus amigos? — preguntó Harry, molesto por que habían dejado solo a su hermano en un momento tan delicado como ese.

—Están un piso arriba. Bill, el hermano de Ron, también está muy herido. Está en cirugía justo ahora— respondió tristemente Damien.

—¡Bill! ¿No es el qué...— comenzó a decir Harry, pero no pudo continuar.

—Sí, el es él que se casó hoy. Le prometió a Fleur, su esposa, que regresaría. Y sí regreso, pero su rostro... quedó terriblemente desfigurado, Harry. De verdad está muy herido. Aún intentan sacar todo el vidrio fuera de su cuerpo.

Harry Potter y la Oscuridad Dentroحيث تعيش القصص. اكتشف الآن