4. Nuevos amigos y ¡santa virgen de la papaya!

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Después de que Ethan prácticamente me arrastrara a la superficie, sus amigos se acercaron intrigados por una cosa. ¿Pero qué era esa cosa?.

Ah, sí. Yo.

-Ella es Alexandra, es la hija de Jonh.

-¿Es una sirena?.

-¿Acaso no la estás viendo imbécil?.

-Disculpa a estos idiotas. No me he presentado, soy Ryan - se presenta un chico rubio de ojos cafés, le sonrío-. Y estos idiotas de aquí son Norman y Nick.

-Hola, preciosa.- Me dice quien creo que es Nick. No puedo evitar soltar una pequeña risa a su intento de coqueteo.

¿En serio?, ¿no podía decir algo más original?.

-Perdona a este idiota Alexandra, no sabe lo que dice.- Dice ¿Norman?.. sí Norman, regañando a Nick con la mirada.

-Tranquilo... Norman, y prefiero que me digan Alex.

-¿Quieres nadar con nosotros?.

-Lo siento Nick, pero ya es tarde y no quiero irme de noche. Tal vez otro día.

-Dale, solo un rato y si se te hace tarde nosotros te llevamos.- Dijo Nick.

Que insistente.

Tu eres igual, así que no tienes moral.

Sí, pero yo soy adorable.

Qué ego. Igual di que sí, vinimos aquí para hacer amigos ¡Y a la primera que te ofrecen sales corriendo! ¿quién te entiende?.

Por lo visto ni yo me entiendo.

Muerdo mi labio antes de responder.

-Bueno, está bien. Nadaré con ustedes.

Los chicos se ponen sus lentes de natación y se lanzan al agua.

-¿No usan trajes de buceo?.- Pregunto a Ethan.

-No les gustan, dicen que parece una segunda piel y que es incómoda. Ven, vamos.- Dice antes de tomarme de la mano y sumergirnos.

Dejo que me sumerja.

A los chicos se les notaba que tenían experiencia en hacer snorkle o como se llame.

Ethan y jugamos con unos delfines y caballitos de mar, los chicos querían unirsenos pero los caballitos se asustaban.

Nick intentó tomarme de la mano más de una vez, pero siempre o Norman le daba un zape o Ethan me tomaba de la mano y me alejaba de Nick.

Fue una tarde muy divertida a decir verdad.

Pasa una hora y salgo a la superficie. Está anocheciendo. Me quedo mirando los coleres en el cielo.

-¡Vamos, Alex!.

Me sobresalto, me había quedado viendo al anochecer y los chicos ya estaban ayudando a Ethan a subir al yate.

-¡Voy!.- Grito de vuelta a Nick.

Nado al yate y los chicos hacen ademán de ayudarme a subir, pero niego con la cabeza.

Uso mis poderes y con ayuda del agua, subo al yate mojando un poco la cubierta en el proceso.

Me miran asombrados.

Obvio, soy fabulosa.

Empiezo a secar la cubierta, incluyéndome claro está.

Ya con piernas, me levanto y me siento

-¡Eso fue increíble!.- Gritan al unísono.

Por favor, digónme cuando termirá One Piece, o cuando el Marichat sea real, o cuando Matteo y Luna dejen de ser idiotas y se besen.

Sanando HeridasWhere stories live. Discover now