Después de que Ethan prácticamente me arrastrara a la superficie, sus amigos se acercaron intrigados por una cosa. ¿Pero qué era esa cosa?.
Ah, sí. Yo.
-Ella es Alexandra, es la hija de Jonh.
-¿Es una sirena?.
-¿Acaso no la estás viendo imbécil?.
-Disculpa a estos idiotas. No me he presentado, soy Ryan - se presenta un chico rubio de ojos cafés, le sonrío-. Y estos idiotas de aquí son Norman y Nick.
-Hola, preciosa.- Me dice quien creo que es Nick. No puedo evitar soltar una pequeña risa a su intento de coqueteo.
¿En serio?, ¿no podía decir algo más original?.
-Perdona a este idiota Alexandra, no sabe lo que dice.- Dice ¿Norman?.. sí Norman, regañando a Nick con la mirada.
-Tranquilo... Norman, y prefiero que me digan Alex.
-¿Quieres nadar con nosotros?.
-Lo siento Nick, pero ya es tarde y no quiero irme de noche. Tal vez otro día.
-Dale, solo un rato y si se te hace tarde nosotros te llevamos.- Dijo Nick.
Que insistente.
Tu eres igual, así que no tienes moral.
Sí, pero yo soy adorable.
Qué ego. Igual di que sí, vinimos aquí para hacer amigos ¡Y a la primera que te ofrecen sales corriendo! ¿quién te entiende?.
Por lo visto ni yo me entiendo.
Muerdo mi labio antes de responder.
-Bueno, está bien. Nadaré con ustedes.
Los chicos se ponen sus lentes de natación y se lanzan al agua.
-¿No usan trajes de buceo?.- Pregunto a Ethan.
-No les gustan, dicen que parece una segunda piel y que es incómoda. Ven, vamos.- Dice antes de tomarme de la mano y sumergirnos.
Dejo que me sumerja.
A los chicos se les notaba que tenían experiencia en hacer snorkle o como se llame.
Ethan y jugamos con unos delfines y caballitos de mar, los chicos querían unirsenos pero los caballitos se asustaban.
Nick intentó tomarme de la mano más de una vez, pero siempre o Norman le daba un zape o Ethan me tomaba de la mano y me alejaba de Nick.
Fue una tarde muy divertida a decir verdad.
Pasa una hora y salgo a la superficie. Está anocheciendo. Me quedo mirando los coleres en el cielo.
-¡Vamos, Alex!.
Me sobresalto, me había quedado viendo al anochecer y los chicos ya estaban ayudando a Ethan a subir al yate.
-¡Voy!.- Grito de vuelta a Nick.
Nado al yate y los chicos hacen ademán de ayudarme a subir, pero niego con la cabeza.
Uso mis poderes y con ayuda del agua, subo al yate mojando un poco la cubierta en el proceso.
Me miran asombrados.
Obvio, soy fabulosa.
Empiezo a secar la cubierta, incluyéndome claro está.
Ya con piernas, me levanto y me siento
-¡Eso fue increíble!.- Gritan al unísono.
Por favor, digónme cuando termirá One Piece, o cuando el Marichat sea real, o cuando Matteo y Luna dejen de ser idiotas y se besen.
YOU ARE READING
Sanando Heridas
General FictionHay cosas que no podemos evitar, unas son buenas y otras malas. Para mí ya terminaron las malas y ahora vienen las buenas.... O eso espero. Isabella es una chica que ha pasado la mayor parte de su vida con miedo y preocupación, pero todo cambia cuan...