Sanando Heridas

23. Cena y trato hecho.

Josh sonríe socarronamente al ver mi cara de asombro.

-Buenas noches Sr.Crey, Sra.Crey.

-Buenas noches Josh, ya te he dicho que puedes llamarme Jonh.

-Lo siento Sr., la costumbre.

Intencarbiam palabras con tal naturalidad que da la impresión de que se conocen hace años, ¿por qué yo nunca lo conocí? Cuando el Sr. George nos visitaba no recuerdo que haya mencionado nada de su hijo. Entonces eso significa que él también es un tritón, ¿qué carajos pasa que todos los chicos que conozco son mágicos? ¿qué es esto, wattpad?.

Extraño, muy extraño.

-Déjame presentarte a mi hija mayor...

-La conozco, tenemos clases juntos; al parecer es la mejor amiga de un amigo mio.- me da la impresión de que se está jactando de algo, más no logro reconocer que.

-Ah sí, es cierto.

-Pasen.- dice y se hace a un lado, me siento nerviosa al pasar a su lado. Siempre me pasa cuando tengo que pasar por algún lugar donde haya chicos, me da penita.

Lindo apartamento, me guta.

La Sra. Adams viene hacia nosotros, viste como Andre, un blue jeen y una camisa de color pastel. Al verme su sonrisa se engancha, tengo mucho tiempo sin verla. Le sonrío de vuelta.

-Jonh, Andrea, bienvenidos. Hola niñas, ¿cómo están?.- su voz es dulce, como la de una madre amorosa.

-Bien.- respondemos, escucho pasos y volteo a las escaleras. Allí están dos niñas, creo que tienen las mismas edades que mis hermanas.

-Buenas noches.- dicen ambas, al verme se confunden.

-Me alegro, la comida estará pronto, mientras vayan a jugar- las niñas al escuchar eso, suben corriendo las escaleras.-. Isa, tu mientras puedes hacerle compañía a Josh.

Quiero negarme y decir que estoy agusto en la sala, pero no puedo. Está es una buena oportunidad para conocer a uno de los amigos de mi mejor amigo y tal vez, llevarnos un poco mejor. Josh me mira expentante, creo que quiere que diga que no...

¡Pues jódete Josh! ¡Ándate a la chingada!.

Asiento con la cabeza, él rueda los ojos y sube las escaleras, lo sigo. Entra a la última habitación del pasillo izquierdo, lo sigo y cierro la puerta. Se sienta en un puff negro y me mira.

Te analiza, más bien...

Levanto una ceja y dejo de mirarlo, paseo la mirada por su habitación; cama negra, closet negro, mesita negra, computador negro ¿todo es negro? Ah no, lo que no es negro es verde oscuro.

El dark entonces... no si...

No voy a quejarme, yo también prefiero el negro, sólo que lo combino con otros colores.

Me siento en la cama y vuelvo a mirarlo, ¿por qué sigue mirándome?.

-¿Qué tanto me miras?.

-No es tu asunto.

-Me estás mirando, así que sí, es mi asunto - respondo de igual manera que él, cruzo las piernas apoyo mi brazo en mi pierna y apoyo la cara en mi mano.- ¿Tú sabías de esto?.

-Sí.

-Y no me dijiste nada...- susurro.

-Lo supuse cuando dijiste lo de tu hermana.

-Ah.

Nos quedamos en un silencio incómodo.

-¿Desde cuándo conoces a Jason?.