Capítulo 14

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Una día más había pasado, ahora todos están más cerca de mi por si algo pasaba. Más que sentirme segura me sentía asfixiada, ni a bañarse podría ir uno.

–¿Joe? –hablé captando la atención del moreno.

–¿Qué pasa? –me sonrió, por un momento olvide lo que tenía que decirle, pues me quede perdida en su sonrisa-. Si que disimulas bien pequeña...

No entendí muy bien lo último, tan sólo regrese la vista al frente. Intentando prestar atención a las últimas clases.

–¿Me está escuchando señor? –habló el maestro elevando la voz. Mire a quien regañaba, era el chico que se había puesto en mi camino.

–No –contestó sin siquiera mirarle.

–¿Y porqué no se retira? Si tanta molestia...

–Porqué no quiero y punto. Usted prosiga con su estúpida clase, estoy seguro que no soy el único que no está haciendo nada –dijo señalándome. Miré con enojo al chico pues me había delatado frente a todo el salón.

–¿Eso es cierto? –preguntó mientras se acercaba a mi banca, comprobando que aquello era verdad-. Miren no estoy de humor para soportar a estudiantes como ustedes, vallan ahora mismo a dirección ¡YA!

Su último grito hizo que diera un pequeño salto. Joel miraba al chico con enojó y vi como cerraba sus manos en forma de puño. Sus nudillos estaban blancos por la presión que hacia.

–¡Maldición! –susurró el chico dándole un fuerte golpe a la mesa. Me quede parada en la puerta, esperando a que el profesor tenga piedad de mi. El chico llamado "Nick" pasó por mi lado empujándome con su hombro haciendo que me tambaleara un poco y me diera un pequeño golpe con la pared-. Quítate de mi camino, maldito estorbó...

Joel no presencio aquello pues tenía la vista al frente, pero al escuchar el golpee giró encontrándose conmigo. No comprendió nada, el maestro volvió a pedir que me retirará y así lo hice.

El camino hacia dirección fue cortó. Tenía los nervios a punta, no me gustaba ser castigada. Abrí la puerta con cuidado y ahí estaba el director frente a Nick. Me indicó que me sentara a su lado y obedecí.

–No me lo creía de usted señorita Vélez –bajé la cabeza sintiéndome mal por aquello.

–Lo siento...

–¿Vas a llorar? Enserio?! Ja –se burló de mi e inició a reír con fuerzas. El director se mantenía en su lugar hasta que dio un manotazo en la mesa captando la atención de Nick.

–No quiero que te burles de tu compañera como la has hecho ahora, calma tu comportamiento y tranquilízate, no me importa que tus padres nos den más dinero para las necesidades del internado, si no aprendes a controlarte me tempo que estarás expulsado –el chico se quedo con la boca abierta. No daba crédito a lo que acaba de escuchar, nunca pensó que pasaría eso.

–S...si –murmuró. Ahora era yo quien reía de el, internamente claro.

Después de una larga plática sobre lo que está bien y mal, nos dejó ir. No sin antes firmas unas carta conducta y decirnos el castigo, que para mi caso fue: "Limpiar los salones"
Claro, Nick una mitad y yo la otra, después de todo prefería esta clase de castigos.

–Inútil –volvió a chocar conmigo a propósito. Le saqué mi dedo medio sin que el se diera cuenta y comencé mi camino hacia el primer salón.

En la esquina estaba la escoba y unos cuantos trapos. ¿Con eso limpiaría el suelo? Solté un suspiro antes de acercarme a aquellos limpiadores. Un mal olor comenzó a hacerse presenté, me acerque hasta dónde provenía dándome cuenta que bajo una de las mesas había un lonche que parecía estar aquí hace más de meses ¡Qué asco!

Escuche como alguien entraba al salón, me gire encontrándome con Nick quien cerró la puerta con llave.

–¿Qué... Qué haces? –tartamudee, el sólo sonrió mientras se acercaba a pasó lento.

–Por más estúpida que seas, eso no te quita lo linda –se acercó más a mi y logre empujarlo. El muy idiota había dejado la llave colgada por lo cual se me hizo fácil salir de ahí-. ¿A dónde vas?

Dijo enojado, seguí corriendo por el pasillo cuando mi cuerpo choco con algo.

–Hasta que te encuentro –dijo tomándome de los hombros. Lo mire por un segundo antes de regresar mi vista hasta Nick quien ahora estaba detrás de mi. Me escondí detrás de Joel abrazándolo por detrás.

–¿Se te perdió algo? –preguntó.

–Si. Esa puta que tienes detrás tuyo –eso bastó para que Joel lanzará un puñetazo en dirección a Nick.

Insane |Joel PimentelWhere stories live. Discover now