19- Enamorados

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~Danny~

Después de que (T/N) saliera corriendo, adelanté un paso para después salir disparado en su busca, pero una mano cogió mi brazo y me detuvo.
Axel.

-No vale la pena, volverá -aflojó el agarre y rozó todo mi brazo haciendo que me sonrojara notablemente y me diera un escalofrío en la columna.

-Tengo que decirte algo... -suspiré y le mire a los ojos. Asintió y me soltó.

Ambos nos dirigimos al exterior. Estoy muy nervioso, ¿y si no me corresponde?, ¿o si le doy asco?, ¿y si...? Me interrumpió los pensamientos.

-¿Qué querías decirme? -me miró curioso con esos ojos en los que si los miraba demasiado, me quedaba embobado.

-Yo...eh... -me puse rojo como la sangre y aparté la mirada. Puso una mano en mi hombro y me sonrió ampliamente.

-No te pongas nervioso, soy sólo yo, ¿recuerdas? -ese es el problema, que eres tú. Me gustaría decirle, pero sólo suspiré y lo miré directamente a los ojos.

-Desde el día que te conocí... -cerré los ojos con fuerza.

Me gustas

-¿Qué?

-Me gustas, en serio.

Me quedé perplejo. ¿Estoy soñando?

-¿Te...gusto? -le miré a los ojos buscando algo con lo que guiar mis pensamientos.

-Sí, me gustas, desde el día que que te vi, como has dicho antes -sonrió con algo avergonzado y me brillaron los ojos- entenderé si no me corre... -lo interrumpí abalanzándome sobre él, dándole un beso apasionado.

Me cogió del cuello, intensificando el beso. Él era un poco más bajito que yo, por lo que lo rodeé por la cintura y continué con el beso.

Poco a poco la intensidad fue aumentando. Solté un pequeño gemido, ahogado por sus labios.

-No ahogues los gemidos, son música para mis oídos -sonrió enseñando sus dientes.

Bajo sus manos por mi cuerpo hasta el dobladillo de mi camiseta. Lo miré y sonrió con picardía.

Miré al cielo y vi que ya estaba anocheciendo.

-¿Crees que todos se habrán ido a dormir? -preguntó mirándome, revisando mi rostro de arriba a abajo.

–N-no lo sé... –tartamudeé– seguramente...

Se quedó pensando unos segundos y me miró de nuevo con una hermosa sonrisa.

–Acabaremos esto en otro momento, guapo –se separó de mí guiñándome un ojo y entró dentro. Me quedé quieto, mirando como la puerta se cerraba.

La brisa azotó mi cara, agitando mi largo pelo.
Sonreí poniendo dos dedos sobre mis labios.

–¿A qué se refiere con "acabaremos esto"? –lo pensé fríamente hasta que di con una respuesta– oh... –me sonrojé notablemente.

A lo lejos divisé a (T/N) caminando hacia aquí. ¿De dónde viene?

–¿Dónde has estado? Me has tenido muy preocupado –la regañé poniendo las manos en sus hombros y me miró fijamente.

–Estaba en el cuartel de la Legión –respondió a mi pregunta.

Las luces de dento me hacían contraluz, pero a ella se la veía perfectamente: estaba sonrojada. Sonreí con picardía.

–¿Qué ha pasado? Estás colorada –abrió los ojos como platos y miró al suelo.

–Yo..., eh... –se puso nerviosa al instante y después me miró– ¿y tú? Tienes los labios hinchados... –sonrió como yo antes. Nos hemos cambiado los papeles.

–N-no me cambies de tema –me defendí cruzándome de brazos.

–Vale, te lo digo si me lo dices después –asentí– Levi casi me besa.

Abrí los ojos de par en par y ella se sonrojó mucho más. Me señaló con su dedo índice.

–Y-yo... me besé con Axel... –dije en un susurro, pero ella lo oyó.

Abrió la boca para ponerse a chillar, pero le tapé la boca antes de que la oyeran.

–¡Pero cállate! –le regañé y la solté.

–Perdona, perdona, ¡es que es genial! ¿Quién se declaró, él o tú? –estaba mas histérica que yo. Vaya por dios.

–Empecé a decirlo yo, pero después lo dijo él –le brillaron un poco los ojos.

–Parece una novela cutre –soltó y estallamos a carcajadas.

–Fue muy bonito e impactante, pero sí –admití y sonreí.

–Bueno, al menos tu primer beso no ha sido interrumpido por Hanji –resopló frustrada – es como mi madre –explicó y puse una mano en su cabeza, revolviendo su pelo.

–Ya llegará el día, enana –me propinó un codazo suave en el brazo y me reí.

–Llegará pronto... –repitió y sonrió levemente.

Ambos nos apoyamos en la barandilla de madera que teníamos delante y miramos el cielo estrellado hablando de cualquier cosa.

~Narradora~

Mientras que ellos dos miraban el cielo, había alguien escondido que escuchó toda la conversación.

–Un gay y (T/N) con Levi... Interesante.

En ese momento, se vio como Daniel rodeó la cintura de la ojiverde y ésta apoyó la cabeza en su hombro.

El sujeto sacó una cámara de fotos en papel y los fotografió en esa postura.

–Perfecto.

Se retiró de su escondite y volvió de donde venía sin ser visto por nadie.

•La mañana siguiente•

Con el Capitán Rivaille se encontraba un cadete de las Tropas de Reclutas con la capa y la capucha puesta para no dejarse ver.

–¿Quién eres? –preguntó el azabache con expresión neutra y se acercó al sujeto.

El cual puso su mano frente a él para que no lo tocara. Con su otra mano, sacó las fotos de su bolsillo y se las entregó.

Rivaille cogió las fotos y las miró una por una. Con mucha rabia las apretó con su mano y alzó la mirada para ver que ya no había nadie.

~Levi~

Se va a cagar, ha tocado a mi mocosa.

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¡¡Holiiiis!!

Aquí os traigo el capítulo fe hoy, espero que os guste mucho :3

Se que soy mala por dejaros con la intriga del Yaoi 7u7 pero habrá un poco más adelante.

AHORA TOCA SALSEO DEL BUENO >:D

XD bueno me despido.

Byeeeeees~

Bajo tu cuidado [LevixReader]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora