Bajo tu cuidado [LevixReader]

24

~Levi~

Eran las cinco de la madrugada cuando al fin llegamos al cuartel. Dejé al caballo en las cuadras y con (T/N) en brazos, fui a ver a Hanji.

-¡Levi! La has encontrado -cuando llegué a su laboratorio prácticamente se tiró encima de mí.

-Hanji no es momento para tonterías, tenemos que curarla -le dije serio y la dejé sobre una camilla que tenía.

-¿Tenemos? Dirás tengo... -la interrumpí.

-Sí, sí, lo que tu digas, ahora cúrala -abandoné su laboratorio y suspiré con pesadez.

Me dirigí a mi oficina para recapacitar sobre lo que había pasado.

-¿Dónde estará Petra...? -pregunté en un susurro.

De repente la puerta se abrió. Me encontré a Erwin mirándome con seriedad.

-Rivaille, ha desaparecido un cadete de nuevos reclutas -fui a interrumpirle, pero siguió hablando- el instructor Shadis nos dijo que este chico se llevaba muy mal con ella; así que creemos que ha colaborado con Petra para hacerle esto.

Me quedé unos segundos pensando.

No habíamos encontrado a Petra, menos el 3DMT que llevo puesto, que es suyo. Pero del otro chico no se sabe nada.

-¿Quién es?

-Jack Singh. Rubio, ojos castaños, alto... -encajaba a la perfección con el chico que la insultaba por ser bajita en su primer día... Fruncí el ceño- ¿le conoces?

-Sí. Pídele a Shadis que te entregue sus documentos cuanto antes, tenemos que encontrarlos -Erwin asintió.

-Trata de no ponerte nervioso, los encontraremos... Todavía tienes que centrarte en la expedición fuera de las murallas que tendremos el mes que viene.

Lo había olvidado por completo...

-De acuerdo, comandante -me levanté de la silla y se retiró.

Justo cuando él salió, la castaña de gafas entró por la puerta estrepitosamente.

-Ha perdido mucha sangre, necesitamos que alguien le dé de la suya... -lo dejó en el aire.

-¿Y quieres que yo de de la mía? -asintió- está bien.

Ambos salimos de mi oficina y nos dirigimos al laboratorio una vez más.

Hanji le había quitado la ropa menos la interior. Estaba llena de golpes y cortes. También tenía una herida mal cosida en el estómago. Se estaba infectando.

Me acerqué a ella y la miré preocupado, pero con una expresión neutra.

«Te pondrás bien...»

Llevé la mano derecha a su mejilla, donde había un corte.

Hanji me miró y con una aguja en la mano me dijo que me quitara la chaqueta y me arremangara la camisa hasta el hombro. Eso hice.

Una vez así, colocó una especie de suero, para que no se infectara la posible herida que me hiciera con la aguja. Puso dos soportes entre los dos lados de mi codo e introdujo la fina punta de metal en mi piel.

No mostré ninguna especie de mueca de dolor o algo similar. Sólo la podía mirar a ella, esa zorra y ese cabrón pagarían por lo que han hecho.

-Levi, rélajate. Sino, no sale la sangre -me regañó y me relajé.

Cerré los ojos esperando a que quitara esa espantosa aguja de mi brazo.

-¡Listo! -abrí los ojos y la miré, había sacado bastante sangre...- ahora ves a comer algo, que estás en ayunas.

-Pero... -me interrumpió.

-Nada de peros, llevas sin comer dos días, tomando solo té negro, así que ves a comer, yo me encargo de ella -me levanté de la silla.

Extendí la camisa que me había arremangado y me puse la chaqueta.

Me dirigí hacia la puerta mirando una última vez al cuerpo de mi castaña. Después salí y me dirigí al comedor.

Fue ver la comida y el hambre se apoderó de mi cuerpo.

Me senté junto a mi equipo. Todos se sorprendieron. Pocas veces venía a comer y menos con ellos.

-Capitán... -Erd empezó a hablar, pero yo puse una mano delante de su cara para que no digera nada.

Empecé a comer sin hacer caso a los que me rodeaban.

Todos agacharon la cabeza y se miraron entre ellos. Después, su mirada se dirigió al sitio de Petra que estaba ocupado por un vacío silencio.

Fue recordar lo que le hizo a (T/N) y me tensé. Dejé caer el tenedor al plato y me retiré hacia el laboratorio de Hanji una vez más.

-¿Ya comiste? -la ignoré completamente y me acerqué a ella que tenía un tubo conectado al interior del brazo y una mascarilla de oxígeno.

La castaña todavía no despertaba y cada vez estaba más preocupado. Vi que Hanji le había puesto puntos nuevos en la herida del estómago.

-¿Cuándo despertará? -la cogí de la mano, pero no hizo ningún movimiento. Como esperaba.

-No lo sé... -puso una mano sobre mi hombro. La echaba mucho de menos.

Me quedé toda la tarde junto a mi pequeña de ojos verdes. La castaña, sin embargo me decía que me fuera, tenía que hacerle pruebas, pero yo no quería dejarla.

-Levi, por favor, necesito ver cómo está... -me suplicó y yo suspiré.

Molesto, me levanté de donde estaba y me fui de allí. Me coloqué contra la puerta, esperando a que abriera y me dejara estar con (T/N) de nuevo.

~Petra~

-¡Jack, joder si lo hicieras ayudarías bastante! -me quejé mientras le agarraba de la cintura.

-¡Es muy arriesgado, además no podremos quedarnos mucho por aquí! -me respondió algo angustiado.

Estábamos yendo a caballo, pero íbamos muy despacio. Le ofrecí una solución que nos podría ayudar pero se negó en rotundo.

-No sabes lo que conlleva hacerlo, tú no vives de ello -quizás tenía razón, pero no puede decir que mi idea es mucho mejor que ir a caballo.

-¡Titán! -al dejarme el equipo tridimensional, no podía matar a los titanes que teníamos delante de nosotros.

-¡Con tal de que lo haga! -se puso encima del lomo del caballo y con una daga se cortó la palma de la mano derecha, haciendo que una luz entre dorada y amarilla me cegara.

Sonreí con malicia. Con mi arma secreta nada ni nadie nos podría detener.

-Por una gran venganza... -me puse sobre su hombro y empezó a correr lo más lejos posible de la muralla Maria.