Capítulo XXIV

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**CANCIÓN SUGERIDA: "Last Kiss- Taylor Swift"

LONDRES, INGLATERRA

PRINCIPIOS DE JULIO DE 1714

La vegetación rodeaba la pequeña cabaña construida de madera dándole un tono de perfecta privacidad

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La vegetación rodeaba la pequeña cabaña construida de madera dándole un tono de perfecta privacidad. No había nada a su alrededor más que enormes plantaciones de algodón.

Michelle empezó a caminar lentamente mientras jadeaba un poco por el esfuerzo de correr aun en su forma de loba mientras sentía a Camila a su espalda abrazarla fuertemente.

<<¿Es este el lugar, mi querido amor?>> preguntó Michelle y Camila sonrió mientras pasaba su rostro por el pelaje blanco de la hermosa loba que era suave como el propio algodón que se cultivaba en esas tierras que ahora invadían y serían testigo de su más grande amor.

—Sí, mi amor—respondió Camila besándole la cabeza y se intentó bajar pero la loba blanca negó.

<<Por favor permíteme ayudarte, mi hermosa rosa>>fueron las palabras de Michelle que con sumo cuidado fue bajando su cuerpo recostándose en la grama para que Camila bajara de su espalda sin dificultad.

—¿Es de tu agrado, mi amor? —preguntó Camila mientras se ponía frente a Michelle que se incorporaba un poco observando esos ojos tan diferentes pero al mismo tiempo tan hermosos—. Sé que el lugar carece de la belleza y refinamiento de otras casas de campo porque es simplemente para guardar material para el cuido de las tierras—la loba pasó la lengua por la mejilla de Camila haciéndola sonreír un poco—. Sin duda hubiera anhelado un lugar más hermoso para nuestro primer encuentro. Pero tenemos toda la privacidad que necesitamos dadas las circunstancias. Te hago la promesa que voy hacer lo que sea necesario para que este lugar sea digno de ti para cuando desees verme de nuevo—Camila bajó la mirada cuando de pronto sintió una mano acariciar su mejilla.

Sus ojos se alzaron encontrándose con la mirada dorada de Michelle sobre ella. Pero ahora era una Michelle humana que estaba de rodillas frente a ella totalmente desnuda. Los ojos marrones de Camila bajaron lentamente observando el cuerpo femenino frente a ella y sus manos ansiaron tocar cada parte expuesta como aquel sediento que se le ha negado el agua por mucho tiempo.

Los libros que alguna vez leyó con Michelle en lo privado de su lugar favorito en el Hyde Park volvieron a su mente, aunque esos libros expresaban el acto carnal entre un hombre y una mujer. Camila estaba segura que ningún hombre podría igualar la belleza delicada y puramente fascinante frente a ella en ese momento.

—Querré verte cada noche—los ojos de Camila brillaron y Michelle sintió su corazón acelerarse ante la mirada de amor incondicional que veía en los ojos marrones de quién sin duda alguna era el amor de su vida—. Te prometo venir a ti todas las noches, Camila. Sin importar lo que cueste yo estaré aquí. Es mi promesa de amor para ti.

The Midnight Chronicles TrilogyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora