CRIMINAL

Capítulo 28

Cuando Harry abrió los ojos lo primero que hizo fue gemir suavemente por el buen dolor en sus huesos del cuerpo, y segundo, preguntarse por qué no estaba en su habitación. Estaba desnudo completamente en una cama que no era la suya, y de pronto se dio cuenta del caliente cuerpo a su lado. Louis estaba a su lado, desnudo, durmiendo tan pacíficamente que no parecía él. Los recuerdos de la noche le llegaron tan rápidos como un rayo, y el delicioso recuerdo estremeció su cuerpo.

—No puedo creer que diga esto, pero eres más adorable de lo que nunca creerías ser. —Harry susurró suavemente viéndolo detenidamente, los rasgos físicos de su rostro eran simplemente perfectos —Maldito hijo de puta, no quiero enamorarte de ti —Confesó finalmente, temeroso a que sus miedos se cumplieran.

Lo observó por unos segundos más antes de alejarse, sin embargo, la mano de Louis lo obligó a tirarse sobre la cama mientras el cuerpo entero de Louis se colocaba a ahorcadas de sus caderas. —Yo te aconsejo que no confundas sexo con amor, chiquillo insolente —La voz de Louis no era realmente enojada como esperó escuchar, de hecho, él parecía divertido, pero definitivamente no había nada de divertido cuando Louis empujó una almohada a su rostro y apretó, quitándole el oxígeno. —Ciertamente, de algún modo, me parece adorable que pienses que me amas, pero fastidias mucho cuando actúas como si lo estuvieras. ¿Amor? No conozco de amor, pero sí de sexo, y Harry, quiero mucho de eso contigo, por favor, no lo arruines...—Louis siguió hablando, pero Harry ya no lo podía escuchar. ¿Cómo lo haría sintiendo su vida desplomarse por la ventana? ¡Se estaba ahogando y Louis parecía bien cómodo allí pretendiendo que solo estaba jugando!

Miedo y cólera hervían en su interior, y no supo de donde o cómo, pero se encontró a sí mismo gruñendo y lanzando uno de sus puños al rostro de Louis. El peso en su cuerpo se esfumó y entonces se levantó; su mano dolía y cuando vio a su costado encontró a Louis en el suelo riendo.

—¿Qué diablos, Styles? ¡Quién lo diría!

—¿Estás bien? —Le preguntó, su ceño fruncido ante el extraño temperamento del hombre. Ciertamente, pensó que luego de ese golpe, Louis se lo devolvería.

—Bueno, no sé, ¡Pregúntenselo a mi mejilla! —Sí, definitivamente había un golpe en la mejilla derecha de Louis y su labio estaba roto. Sangre se deslizaba de su boca, pero la mirada de Louis brillaba con orgullo. Bueno, ésta era una mañana extraña.

Una vez en la cocina, gimió ante el delicioso aroma.

—Me levantaré tarde muy seguido, es hermoso saber que la comida ya está servida.

Zayn sonrió cuando lo vio —Buenos días. ¿Qué tal dormiste?

—Como un bebé, ¿Y tú?

—Si dormir bien es escuchar gemidos toda la noche entonces supongamos que dormí bien.

Harry sintió su cuerpo caliente de pies a cabeza —¡No lo hiciste!

—Oh, no quería, pero el material de las paredes no es lo suficientemente grueso como para amortiguar los sonidos. Aunque supongo que Louis lo era, porque con lo mucho que gritaste...—

—¡Cállate! —Lo cortó, rojo y avergonzado —Mejor sirve la comida. Me voy, no hablaremos más de esto.

No estaba asustado, no, tampoco es que Louis fuera siempre un hombre grotescamente brutal y ruidoso, pero sí fue extraño encontrarlo silencioso todo el día. Zayn lo notó, pero no comentó nada, y por su parte, no preguntó. No estaba seguro de cuánto tiempo ha conocido a Louis, o cuantas veces lo ha dicho, pero definitivamente ese hombre era extraño y nunca lo terminaría de entender con totalidad. Solo le gustaría saber qué pasaba por ese cerebro, si es que había uno.