CRIMINAL

Capítulo 36

Ignoró a cualquiera o cualquier cosa a su alrededor, caminó hasta finalmente llegar a la oficina de la última planta y abrió la puerta. Richard Tomlinson estaba sentado en su silla tras el escritorio, leyendo algo en su computadora, pero cuando lo vio, la cerró y le sonrió.

—Pasa adelante, siéntate.

Zayn se sentó en la silla frente a la mesa, su rostro neutral.

—¿Cómo has estado?

—Un poco cansado, estaba en una reunión de doce horas seguidas con la embajada en Austria. Los bastardos ni siquiera se levantaban para ir al baño.

—Si estabas ocupado y cansado, ¿Por qué accediste a verme?

—Dijiste que querías hablar. —Richard le sonrió —Siempre estoy para quien me necesite.

—Realmente, solo quería verte.

—Eso es agradable —Richard lo miró directamente a los ojos por un segundo, pero apartó la mirada.

—Sí.

—¿Harry no está contigo?

Frunció su ceño —No.

—¿Hay algo que está ocurriendo entre ustedes?

—¿Por qué lo habría?

—Bueno, porque estás todo tenso. Y no lo mas mencionado en toda la semana. ¿Ocurre algo?

—Realmente, no quiero hablar de Harry. ¿Qué dices si follamos?

Richard lo miró atentamente, una suave sonrisa en su boca, pero el hombre ladeó la cabeza, negando.

—Me encantaría, pero ahora siento curiosidad.

—¿Has tenido noticias del halcón?

—No.

—Bien.

Se quedaron un rato en silencio. Zayn podía sentir la tensión en el aire que hasta le costaba respirar.

—Zayn...

—Richard, jódeme, por favor.

—Uh, si realmente está pasando algo entre ustedes dímelo, puedes confiar en mí.

—Por el amor de Dios, hombre, te estoy pidiendo desvergonzadamente que me jodas contra el escritorio de tu oficina y tú me sigues rechazando. Al menos dame un poco de alivio.

Luego de haber literalmente jodido contra el escritorio, Richard jadeó fuertemente, sentándose en su silla y viendo con cautela a Zayn, quien se vestía en silencio.

—Mierda, me estoy volviendo viejo para sexo rudo en la oficina —Tomó su camisa blanca de botones, pero no se la colocó —Muy bien, ya que tuviste tu pequeña distracción, ¿Podrías de una buena vez decirme qué jodidos te pasa?

—Vamos, Richard, ¿En serio quieres hablar de Harry luego de haber follado?

—Sí, y estaría muy decepcionado si no me obedeces. Habla.

Zayn le alzó una ceja, al parecer dispuesto a contradecir, sin embargo, terminó suspirando en resignación, rindiéndose.

—Muy bien, quieres hablar de Harry, lo tendrás. La pequeña mierda ha hecho de esta última semana una completa pesadilla, colocando toda la mierda que tiene en sus hombros. No sé qué diablos se trae y ya no quiero saberlo. Puede pudrirse él solo. No tengo por qué estarle lavando cada herida en su vida.

—¿Qué le ocurre?

—Maldición Richard, te estoy diciendo que no sé, y no quiero saberlo. Simplemente... no quiero hablar de él.