Aliados por el Destino

Capítulo 37

Anne:

Dos días después me encuentro alistándome en el hotel donde me hospedo junto a los demás para salir a despedir a mis amigos que han venido a acompañarme en estos días tan difíciles. Unos toques en la puerta me sacan de mi ensoñación.

-Adelante...

Harold pasa a mi habitación y se lanza en la cama como un niño mientras me observa a través del espejo en los que estoy colocando mis aretes y terminando de arreglarme. Sonrío al verle así tan relajado y se que eso se debe a que estamos solos.

-Pareces muy cómodo...

Sonríe divertido mientras acomoda unas almohadas detrás de su cabeza.

-La verdad es que si, me siento más tranquilo por cómo ha salido todo lo del juicio y ese asunto de nuestra seguridad, ahora me preocupa lo otro... ¿Estas segura de lo que piensas hacer? ya te lo he dicho, puedo posponer unos días más mi regreso.

-Necesito hacerlo... ademas debo ponerme al día con los asunto de la empresa. Y tú... debes volver a tus funciones, ya te he quitado mucho tiempo y hay una nación completa que requiere de tu presencia.

Chasquea la lengua cansado.

-Para eso tengo delegados... además la familia es lo primero, ¿como puedo atender a otros mientras descuido y abandono al único ser sangre de mi sangre?. Ya lo hice por un tiempo en contra de mi voluntad y aun me pesa...

Cambia su semblante bajando la mirada, se nota un poco afligido lo que me causa cierto pesar... me acerco hasta él colocando mi mano sobre la suya que juega con el cordón de uno de los cojines y sostengo su quijada llamando su atención.

-Eso que has dicho no es cierto... ademas te escudas detrás de tanto trabajo para redimir de alguna forma algo de lo cual no eres responsable. Lo que paso fue terrible si... pero no puedes culparte por ello, son cosas del destino, sucedió así por circunstancias de la vida. Tu eres un ser admirable Harold... ¡fíjate! no podria estar más orgullosa de ti, has logrado tanto en lo personal como en tu vida laboral... tienes un corazón noble y una mente brillante que a veces hasta envidio. Creo que es evidente porque nuestra reina te ha elegido y porque te adoran...

Le brindo mi mejor sonrisa para animarlo.

-Olvida todo aquello y trata de ser feliz, te lo pido de corazón... es lo que nuestros padres siempre estén donde estén nos enseñaron ¿lo recuerdas?, que debemos aprovechar cada momento en esta vida y no dejarla pasar en vano.

-Lo se princesa, es por esa razón que he estado pensando en retirarme de la política, la verdad es que me siento un poco exhausto...

Me sorprendo enseguida ante su confesión, si hay alguien que ha hecho un trabajo estupendo y con la mayor dedicación durante su mandato en nuestro país ha sido Harold.

-¿Piensas dejar todo aquello que tanto te ilusiono en nuestra niñez?

-Bueno fue una meta que me propuse de niño, nunca imagine llegar a ocupar este cargo en realidad. Cuando fui asignado me lleve una gran sorpresa, acepte y cumplí lo mejor que pude... pero pienso que ya es hora de retirarme, como tu lo has dicho... he dado lo mejor de mi, y a un costo muy alto la verdad. Seguiré apoyando a nuestro pueblo, sabes que es algo que hemos hecho siempre en nuestra familia, pero no bajo ese cargo Anne...

-Entiendo y respeto tu decisión, sabes que siempre estaré aquí para apoyarte. Debo confesarte que me siento sorprendida y en parte conforme con este paso que vas a dar. Aun eres muy joven Harold... en especial para llevar esa carga y responsabilidad tan pesada sobre tus hombros.