Capítulo 32

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Luego de haber subido al Free Fall y poder vivir para contarlo Stiles ya no le tenía tanto pavor como antes. Los tres subieron a un par de atracciones más, teniendo Scott un cumpleaños que estaba disfrutando, aunque "nadie" lo supiera. 

—¿Por qué Stiles está tanto tiempo con su teléfono? —Preguntó Scott hacia Derek mientras observaba a Stiles a lo lejos. 

—Pues tú eres su mejor amigo, deberías conocerlo ¿No?

—Lo hago.

—¿Y no suele estar mucho en el celular? 

—No. 

—Regresé. —Dijo Stiles al acercarse a sus dos amigos. —Derek, debemos irnos... papá nos necesita.

—¿Para qué? —Preguntó el ojiverde mientras levantaba una ceja.

—No. Lo. Sé. —Respondió haciendo pausas y mirando a Derek con cara de pocos amigos. —Supongo que nos dirá cuando lleguemos. 

—¿En serio deben irse? ¿No pueden quedarse un poco más? —Preguntó Scott con tono triste, pues comenzaba a disfrutar de su cumpleaños. 

—Lo siento, Scott, Derek y yo debemos irnos. Sonaba importante. —Hizo una ligera mueca. —Vamos, te llevaré a casa. 

En cuestión de minutos los tres se encontraban en el auto. Derek y Scott tuvieron una ligera discusión sobre quien debía ir en el asiento de copiloto, pero Stiles decidió que sería Scott quien tomaría el lugar. Tras varios minutos de viaje Stiles detuvo el auto frente a la casa de Lydia, la cual estaba totalmente a oscuras. 

—¿Por qué te detienes aquí? —Preguntó Scott. 

—Lydia me dijo que podía pasar por sus apuntes. —Dijo mientras abría la puerta del Jeep y bajaba del mismo. —Vamos. 

—No quiero ver a Lydia hoy. 

—Oh ¡Vamos Scott! Sólo iremos y vendremos rápidamente, igual mi papá está esperándome. —Y giró a ver a Derek, quien veía fijamente al frente con el ceño fruncido. —¿Derek en serio estás enojado porque te tocó ir atrás?

—No estoy enojado.

Stiles podía quedarse observando esa carita de lobo enojado toda la noche, pero tenía una fiesta a la cual asistir. —Ya baja, Derek. —Abrió la puerta y el pelinegro bajó.—Ya vamos, Scott. Sólo será un segundo.

—Está bien. —Scott bajó del Jeep y los tres caminaron hasta la puerta. Stiles tocó el timbre y un par de segundos después lo volvió a tocar. Como respondía Stiles abrió la puerta. —¿Seguro que está en casa? 

—Me dijo que si nadie abría que entrara. —Sin más se adentró, con Scott y Derek tras él. 

—¿Por qué está tan oscuro? —Preguntó Scott y dos segundos después todas las luces se encendieron, mientras se escuchaba al unísono "¡SORPRESA!"

La cara de sorpresa de Scott fue imposible de ocultar y luego una gran sonrisa apareció en su rostro. Allison fue la primera en abrazar a Scott y darle un beso, seguido de ella Lydia y luego Stiles. Estos tres le explicaron que no felicitarlo era parte del plan y luego Scott comenzó a saludar y recibir las felicitaciones de los demás invitados. 

Natalie Martin bajó la escaleras y caminó hasta donde estaba su hija, Lydia, quien estaba junto a la fuente de bebidas. 

—Recuerda mantener todo en orden. 

—No te preocupes, mamá. Puedes salir sin preocupación. —Respondió la pelirroja con una sonrisa la cual luego desapareció al notar como un pelinegro se acercaba hasta ella, no lo reconoció, pero luego recordó que había venido con Stiles. 

—¿Esto tiene alcohol? 

Lydia abrió sus ojos ampliamente  y giró a ver a su madre. —Claro que no. —Luego de su respuesta Natalie tomó uno de los vasos y llenó un poco el mismo para luego tomarlo. Lo saboreó muy bien con los ojos entrecerrados y luego continuó su camino hasta la salida.

—¿Cómo es que haces una fiesta sin alcohol? 

—¿Cómo eres tan idiota de preguntar eso frente a mi madre? —Habiéndole respondido con aquella pregunta sacó de debajo de la mesa una botella con un líquido, transparente como el agua, y lo vertió en la fuente por completo. —Ahora sí, bebe. 

Derek tomó uno de los vasos y llenó el vaso para luego darle un trago. —Ahora esto sí parece una gran fiesta. 

*** 

Stiles no tenía idea de cuanto tiempo había transcurrido desde que llegaron ahí, tal vez un par de horas o casi tres, pero se encontraba viendo a todos lados de una forma un tanto impaciente. 

—¡Ten otro, Stiles! —Exclamó Scott mientras le ofrecía otro vaso totalmente lleno. 

—No, no. ¿Has visto a Derek? No lo veo desde hace rato. 

—Creo que lo vi subir. 

Stiles asintió con la cabeza y con un poco de dificultad subió las escaleras, ya que las mismas no dejaban de moverse. Al llegar al piso de arriba comenzó a buscar en las habitaciones, pero todas se encontraban cerradas, excepto una. Abrió la puerta y entró de lleno, encontrándose a Derek con una chica frente a él, a punto de besarla.
Se quedó estático, no sabía que hacer y su labio inferior vibró varias veces y sin poder evitarlo sus ojos se cristalizaron. Aquella imagen le había producido un dolor en el pecho, como si una estaca se hubiese clavado en su corazón. 

Derek sintió una mirada sobre él, lo que lo hizo girar instintivamente antes de llegar a probar los labios de aquella chica y se encontró con Stiles. —Hey... —Antes de siquiera poder decir otra palabra vio como el castaño se iba corriendo. —Disculpa, me tengo que ir. —Sin dudarlo ni un solo segundo salió de la habitación, persiguiendo a toda velocidad al castaño quién bajaba las escaleras y por suerte, al final de estas lo pudo agarrar. —¿Stiles que sucede? 

—Nada. 

—Tu cara no dice que no pasa nada. 

—Sólo suéltame. —Y como pudo logró que el pelinegro lo soltase. 

—Espera ¿Estás bien? —Preguntó mientras lo tomaba nuevamente por la muñeca. —¿Que sucedió? ¿Alguien te hizo algo? 

—No... sólo... no sé que tengo. 

—Vamos a un lugar más calmado.

Living with a stranger || SterekМесто, где живут истории. Откройте их для себя