Living with a stranger || Sterek

Capítulo 58

Derek POV

Esto era terrible, era una pesadilla hecha realidad, la vida de la única persona que me importaba estaba en riesgo y nuevamente era mi culpa, así como había sido mi culpa el incendio, así como había sido mi culpa que mi padres y hermanas estuviesen muertos. Todo siempre era mi culpa. 

No solamente tenía que fingir que todo estaba bien mientras no sabía donde estaba Stiles, o si estaba bien, si había comido o si no estaba sufriendo, sino que también tenía que pretender frente al Sheriff que todo estaba bien, mientras él pensaba que su hijo había decidido quedarse en casa de Scott a dormir, sólo porque había recibido un mensaje de su celular. 

Casi no pude dormir en la noche, pasé todo el tiempo pensando en una manera de poder rescatar a mi novio pero ¿Cómo? No tenía ni idea de dónde podía estar, y no es como que pudiese buscarlo libremente, ya que tenía un maldito policía atrás de mi todo el día, todos los días. 

No supe en que momento la fila de personas que debía atender se había hecho tan larga, no fue hasta que Braeden llegó a ayudarme que pude retomar el ritmo, y gracias a su ayuda la fila se había reducido a cero. 

—Gracias, Braeden, no... no sé que me pasó. —Sí lo sabía, el tema de Stiles era lo único que tenía en mente estos momentos.

—No hay de que, pero dime que te pasa. Estás muy distraído hoy y... también te noto preocupado. ¿No te fue bien ayer con tu novio? —¿Cómo podía darse cuenta de todo eso? Mujer tenía que ser, tan intuitiva. 

—No, no es nada de eso, es que... no dormí bien anoche. —Y eso era verdad. 

—Sí, eso tus ojeras me lo dicen, pero debe haber algún motivo por el cual no pudiste dormir. —¿Que mal iba a hacer que le contara? Después de todo necesitaba desahogarme y tal vez me podía ayudar a pensar. 

—Está bien, te lo diré. Pero júrame que no le contarás nada a nadie ni harás nada al respecto. —No podía dejar que avisara a la policía o quién sabe que podría hacerle Jethro a Stiles. 

—Derek me estás asustando, pero está bien. Te lo juro. —Era bueno saber que siempre podía contar con ella y que la mayoría del tiempo era incondicional. 

—Pues... —Miré a ambos lados para asegurarme de que nadie nos estuviese escuchando, pero antes de poder seguir el sonido de su celular me interrumpió. 

—Dame un segundo. —Suspiré mientras la veía buscar su celular y revisar lo que seguramente era un mensaje. —"No hables con ella o de lo contrario cosas malas podrían pasar." ¿Qué? ¿Eso que significa? ¿Y quién me envío eso? —No podía ser. No era coincidencia, ese mensaje lo tuvo que haber enviado Jethro pero ¿Cómo demonios tenía el número de Braeden? —No tengo registrado el número debe ser equivocado. 

—Lo más seguro. —Respondí antes de mirar por las ventanas, él debía estar vigilandome, no había otra explicación para saber que estaba hablando con ella. 

—¿Que me ibas a decir, Derek? —Ya no podía decirle nada, de hecho, debía alejarme de ella. 

—Oh, creo que lo mejor es que no te involucre en esto. ¿Puedes cubrirme? Necesito aire fresco. —Me quité el gorro y el delantal que llevaba puesto para luego salir de la heladería. Sentía una ligera presión en el pecho que no me dejaba respirar de forma correcta ¿Cómo es que todo esto tuvo que pasar? 

—Hola, disculpa ¿Tú eres Derek? —¿Cómo una persona totalmente extraña conocía mi nombre? 

—Sí, soy yo. ¿Te conozco? —Entrecerré lo ojos, no recordaba el rostro que tenía en frente, definitivamente nunca lo había visto. 

—Esta llamada es para ti. —Tomé el teléfono que me estaba ofreciendo ¿Era en serio? ¿Extraños me pasaban llamadas? 

—¿Hola? 

—¡Derek, por favor ayúdame! —Esa voz, era Stiles, no tenía duda alguna de que se trataba de él. 

—¡¿Stiles?! ¿Estás bien? Te voy a sacar de donde sea que estés, te lo prometo. 

—No deberías hacer promesas que no puedas cumplir. —Y ahí estaba Jethro, ese maldito psicópata. Él no podría estar haciendo nada de esto si lo tuviese al frente, pero lastimosamente no sabía donde estaba. 

—Jethro, por favor, deja a Stiles en paz. Él no tiene nada que ver en esto, si quieres vengarte... entonces ven por mi. —Sabía que él no tenía el valor para hacerlo, pero de todas manera debía darle la oportunidad si eso ponía a Stiles a salvo. 

—Quién lo diría, Derek siendo pacífico. Sí que has cambiado. —Él tenía razón, había cambiado mucho desde que me juntaba con él y eso no era malo. Me agradaba saber que no era la misma persona del pasado. 

—Sabes lo que puede pasar cuando cumpla 21. Si dejas a Stiles ir... te lo recompensaré. 

—¿Que te hace pensar que te darán ese dinero? No es seguro. —Diablos ¿Por qué tuve que haberle dicho eso? Ya entendía por qué los policías decían que todo lo que digan puede ser usado en su contra. 

—Ahora sí lo es. Una vez que me dejen en libertad no habrá ningún impedimento y eso lo sabes... o al menos si eres un poco inteligente deberías saberlo. —De eso ni yo mismo estaba seguro, pero debía pretender que lo estaba, de otra manera Jethro no estaría convencido. —No te conviene tenerme de enemigo, Jethro. 

—¿Eso es una amenaza? Porque no creo que estés en posición de hacer amenazas... la situación cambió, Derek. Ya no eres tú quién lleva el control. —Impotente. Así me sentía, pero si él se atrevía a lastimar a Stiles se iba a arrepentir, no iba a poder ocultarse toda la vida y yo me iba a asegurar de eso. El sonido de teléfono junto con la vibración me hizo separarlo un poco de mi oreja hasta que cesó. —Te acabo de enviar la dirección. Ven a rescatar a tu noviecito si eres tan valiente... y ni se te ocurra traer compañía, o lo único que encontrarán será un cadáver.