Living with a stranger || Sterek

Capítulo 37

Una nueva semana había comenzado y Stiles se encontraba entrando a BHHS al lado de Scott, quién estaba acompañado de su novia Allison. También estaban Lydia y su reciente novio Jackson.
Minutos antes de que las clases iniciaran los tres se detuvieron frente a sus respectivos casilleros y continuaron la planificación que habían iniciado unos días antes.

—Yo ya tengo mi disfraz listo, Lydia.

—Muy bien, Allison. Tú disfraz debe hacer juego con el de tu novia, Scott.

—Anotado.

—¿Entonces tienes ya todo listo? —Preguntó Stiles.

—Ya tengo la decoración, las bebidas, los carteles, obviamente mi atuendo y la música. Este fin de semana deberían ayudarme a colocar parte de la decoración en mi casa.

—Yo iré. —Respondió Jackson.

—Yo igual. —Continuó Scott.

—Que sean tres. —Continuó Allison y luego todos llevaron la mirada hacia Stiles.

El castaño quedó pensativo, pues lo más seguro es que el fin de semana fuese a salir nuevamente con Derek, aunque por los momentos no tenían todavía ningún plan. —No creo que Danny acepte.

—¿No me dijiste que te daba los fines de semana libres? —Preguntó Scott con confusión a lo que Stiles lo miró con cara de pocos amigos, si las miradas mataran tendrían que planear el funeral de Scott.

—Cierto... lo olvidé. —Rió levemente de manera nerviosa. —Está bien, iré.

—Perfecto. Tendremos una de las mejores fiestas de Halloween. —Al finalizar aquella frase Lydia cerró su casillero y todos escucharon el timbre que daba inicio a las clases.

***

Un par de días habían pasado y aquella tarde Derek estaba llegando desde su trabajo, abandonando el vehículo del oficial que estaba encargado de custodiarlo ese día y luego entrando a la casa Stilinski.

Luego de caminar hasta las escaleras se detuvo en las mismas al notar algo un poco inusual para el día, Stiles estaba solo haciendo tarea. Por lo mismo se devolvió hacia donde estaba el castaño y se sentó en el sillón individual frente a él.

—¿Stiles?

—¿Qué? —Preguntó mientras levantaba la mirada y parpadeaba varias veces. —Derek ¿Cuándo llegaste?

—Lo acabo de hacer ¿No... no escuchaste la puerta?

—No, lo siento estoy... tengo mi cabeza en otro lado en este momento.

Derek entrecerró un poco los ojos al sentir que aquella actitud era un poco extraña. —¿Estás bien?

—Sí, sí. Estoy bien ¿Por qué lo preguntas?

—No lo sé. ¿Danny no debería estar aquí ayudándote?

—No, el... ahmm... está enfermo.

—Espero se mejore pronto.

—Gracias, yo... se lo diré, supongo. ¿Tú estás bien?

—¿Yo? Claro que sí, por supuesto... ¿Sabes? Hay... está esta chica que trabaja conmigo.

Stiles tragó saliva al escuchar aquello e intentó sonreír. —Y... ¿Qué hay con ella?

—No lo sé, creo que... somos algo. No es nada serio, aún, pero... creo que estamos en ese punto donde aún no somos nada, pero estamos en eso ¿Sabes de lo que te hablo?

—Sí, sí... —Respondió comenzando a rascar su nuca de manera incómoda. —Por eso has estado estos días muy contento ¿No?

—¿Qué? —Derek soltó una ligera carcajada que pareció un poco fingida. —Sí, creo que... creo que me atrapaste.

—Me... alegro... por ti. Creo que terminaré esto en mi habitación, si no te molesta... nos vemos luego.

***

Más tarde, en la noche de aquel mismo día Derek se encontraba caminando hacia su habitación con un vaso de agua que había buscado recientemente de la cocina, pero al pasar por la puerta de la habitación de Stiles escuchó un sonido muy extraño. Se acercó a la misma y juntó su oreja a la madera para escuchar mejor y se alarmó.

—¿Stiles? ¿Estás bien?

—¿Derek? Sí, sí, no sabía que estabas despierto.

—¿Puedo pasar?

—No.

Tras aquella respuesta Derek abrió la puerta de la habitación de Stiles y entró en la misma. —¿Por qué no?

Stiles pasó rápidamente las manos por su rostro repetidas veces. —Porque no querías que entraras.

—¿Estabas llorando? —Se acercó hasta la cama y dejó el vaso en la mesa de noche de Stiles.

—No, Derek, no estaba llorando.

—¿Por qué tus ojos están rojos? Incluso tu voz se escucha diferente... ¿En serio estás bien?

—¡Estoy bien!

—Sabes que puedes hablarme de lo que sea ¿No?

—Derek... en serio, no hay nada de que hablar. Estoy bien.

Derek soltó un pesado suspiro y colocó una expresión sería que hace mucho no usaba con Stiles. —Como digas. —Comenzó a caminar fuera de la habitación, cerrando la puerta al salir.