Amor de psicópatas

Capítulo 27

-Por fin solos- suspiro Ethan cuando escuchó la puerta cerrarse.
-No por mucho tiempo- Abby se cruzó de brazos -tú enseguida te march...
Él le dio un beso en los labios, interrumpiendo la frase de ella, la cual tardó en corresponderle al beso. Después de aquel beso, vinieron muchos más, al principio lentos pero cada vez iban siendo más apasionales.
-Ethan estate quieto- suplico ella debilmente ante los besos que el chico estaba repartiendo por todo su cuerpo. Sin embargo, él no le hizo caso y continuo haciendolo, solo que ahora los besos se iban acercando a los pechos de Abby. -Ethan para- lo intentó apartar pero el era mucho más fuerte así que sus intentos eran en vano.
-Ethan, por favor- rogo cuando sintió como las manos del chico se adentraban debajo de su camisa y así desabrochar su sujetador/brasier para segundos más tarde sacarlas y comenzar a desabrochar está vez los botones de la camisa.
-E-Ethan.
Él se quito la sudadera para dejar a la vista su tonificado abdomen. En la habitación solo se podía oir la respiración entre cortada de los jóvenes. Él se acercó más a ella.
-Ethan- el chico intentó quitarle la blusa, pero Abby no le dejaba -¡¡Ethan para ya!!- gritó cansada.
-¿Que pasa?¿Acaso no es esto lo que querías?- preguntó él un tanto confundido mientras intentaba que su respiración volviese a la normalidad.
-Ese es el problema Ethan- se apartó un poco del chico -Esto es lo que quiero yo, no tu.
-Pero, ¿Qué hay de malo? Solo disfrutemoslo.
-Entonces, ¿qué diferencia habría entre hacerlo conmigo y hacerlo con cualquier otra chica?
El chico sabía a que se refería, pero no quería que Abby pensase que era otra más, otra chica como las que se acostaban con él.
-Ethan, me han pasado muy pocas cosas buenas en la vida, y creo que haberte conocido ha sido una de ellas. Gracias a ti ya no tengo que vivir bajo el techo de mis padres, me has dado un hogar, y me has hecho sentir cosas que nunca nadie antes me había hecho sentir. Seguramente sí no te hubiese conocido ahora mismo no estaría aquí, no estaría viva- se limpio las lágrimas con las manos, y después dirigió su mirada hacia la del chico. - Pero no puedo pretender que mi primera vez sea con una persona que no me quiere. ¿Sabes?, hacer el amor con alguien es una de las pocas ilusiones que me quedan, porque significaría que esa persona me quiere, que soy importante para ella. ¿Lo entiendes? Me gustaría recordar mi primera vez como el día más importante de mi vida, el dia en el que yo le ofrecí mi amor a alguien y a cambio yo obtuve el amor de esa persona. Quiero recordarlo como algo especial.
-Yo...-cogió su sudadera- lo siento -se la puso y salió de la cabaña.
Cuando Abby escuchó el portazo, se puso el abrigo y también salió en busca del chico. Dio un simple vistazo por los árboles que rodeaban la cabaña, pero no lo vio, por lo que decidió seguir el camino que conducía al pueblo.
Llevaba ya bastante tiempo andando cuando vio como una silueta se movia por entre los árboles. No había duda, ese era Ethan. Asi que decidió perseguir a la silueta. Se movia rápidamente y con agilidad, por lo que a Abby se le hacía realmente difícil mantener la velocidad, y por eso en varias ocasiones la perdió de vista. Llegaron al pueblo. Abby se sintió aliviada porque ya no tendria que esforzarse tanto por perseguir a aquella silueta, debido a que ya no molestaban los árboles y había iluminación procedente de las farolas, las cuales alumbraban todas las calles. Pero pronto surgió un problema mayor. El hombre de la cual procedía la silueta se montó en una moto. Para Abby por suerte pasaba un taxi por ahi, así que la castaña se montó en él.
-Buenas noches señ...
-Deprisa, persiga a esa moto- interrumpió la chica
-Pero señorita no pued...
-Por favor, es importante.
-Está bien- accedió el hombre.
Después de varios minutos persiguiendo la moto, el hombre se detuvo para posteriormente bajar de ella.
-Pare aquí, por favor.
-Señorita, ¿seguro que quiere bajarse aquí?- preguntó el taxista -Si quiere puedo llevarla de vuelta, no me importaría, no le cobraría.
-Muy amable, se lo agradezco, pero me voy a bajar aquí.
-No, no es un lugar seguro para una joven como tu, y mucho menos a estas altas horas de la noche.
Pero ella no le hizo caso. Le dio el dinero correspondiente más unas propinas.
-Muchas gracias por el viaje señor- dijo ella bajandose del taxi -Puede irse tranquilo, ya he estado en este lugar antes, no se preocupe.
-De acuerdo señorita, pero le advierto que no pasan taxis por aquí a esta hora.
-Gracias por traerme, buenas noches.
El taxi arrancó dejandole completamente sola. Abby observó la entrada del lugar un poco confusa.
¿Que hacía Ethan a altas horas de la noche en el cementerio?