A Jungkook nunca le había molestado la actitud de Taehyung, aun luego de conocer la parte oscura de su personalidad. Él lo había visto siendo egoísta, maleducado, tímido, malcriado, apático, pesimista, y simplemente malvado. Carente de cualquier hab...
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Rayos de sol iluminaban la habitación de Jungkook, mismo que se encontraba durmiendo plácidamente con Taehyung pegado a su costado.
El cuerpo del pelinegro se removió suavemente, escuchando una canción sonar a lo lejos. Intentó ignorar el sonido, pero comenzaba a escucharlo más fuerte con cada minuto que pasaba y su cuerpo comenzaba a despertar. Gruñó ante la interrupción de su sueño, girando su cuerpo para abrazar a Taehyung apretadamente, atrayéndolo hacia él.
Bufando, se resignó a abrir los ojos cuando la música no cesó. Parpadeó desorientado, antes de fijar su mirada en el celular del pelirrojo en la mesita a su lado.
Lo estaban llamando, y se veía claramente el nombre "Vernonie" en la pantalla.
Apretó la mandíbula, sintiendo la tan conocida emoción desagradable apoderándose de su cuerpo.
¿Qué hacía ese estúpido llamando a Taehyung? Ese estúpido que había besado los labios de su TaeTae.
Tuvo que reprimir el gruñido enojado que amenazó con salir de su garganta.
Sin pensarlo demasiado, tomó el teléfono y lo apagó.
Volvió a recostarse, observando la hermosa cara de un Taehyung aún dormido. Lo abrazó nuevamente, enterrando su cara en el cabello rojizo y aspirando suavemente.
Cerró los ojos con una sonrisa, sintiéndose más que complacido por el pensamiento de que el que estaba justo ahora con Taehyung era él, y no el idiota que había estado llamando al pelirrojo hace unos minutos.
Taehyung volvía a ser todo suyo, y con ese pensamiento, pudo volver a dormir.
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—¿Por qué mi celular estaba apagado? —preguntó Taehyung con el ceño fruncido, luego de salir de la ducha.
Jungkook lo observó durante un minuto, mientras el pelirrojo se quitaba la toalla y comenzaba a vestirse. Carraspeando, miró hacia otro lado —No lo sé, ¿tal vez se te acabó la batería?
—No, no es eso, tenía batería cuando lo prendí —suspirando, terminó de vestirse —, bueno, no importa.
Jungkook asintió al no saber muy bien que contestar.
