A Jungkook nunca le había molestado la actitud de Taehyung, aun luego de conocer la parte oscura de su personalidad. Él lo había visto siendo egoísta, maleducado, tímido, malcriado, apático, pesimista, y simplemente malvado. Carente de cualquier hab...
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Vernon se removió en su asiento con incomodidad. La confusión que sentía desde que Mingyu les había pedido que se vayan de su apartamento, con la excusa de que tenía planes, rápidamente se mezcló con una pizca de molestia cuando se escuchó el sonido del timbre, y de la puerta apareció Jungkook, quien no dudo en saludar a Mingyu abrazándolo calurosamente.
Su mente, hecha un desastre, se preguntó qué carajos hacia Jungkook ahí. Se suponía que era una reunión de amigos, y el pelinegro no pertenecía allí.
Jungkook por su parte, se sintió igual de confundido cuando Mingyu, sonriendo avergonzado, le explicó rápidamente en la puerta que no podrían salir como habían planeado, ya que sus amigos se negaron a irse del apartamento al estar pasando un buen rato.
—No te preocupes, si quieres puedo irme y nos vemos otro día —ofreció al castaño, pero Mingyu negó rápidamente.
—Nada de eso, si no es problema para ti, puedes quedarte y conocer a los demás, estoy seguro de que no les molestará que te nos unas.
A pesar de las palabras de Mingyu y su tranquilizadora sonrisa, Jungkook no estaba seguro de que el castaño estuviese en lo correcto, pues, aun si los chicos que estaban sentados en la sala le sonrieron y lo hicieron sentir cómodo, no podía decir lo mismo de Vernon, quien se encontraba sentado con el ceño fruncido, mirándolo como si estuviese invadiendo su territorio. Qué irónico, pensó el pelinegro, sonriendo por dentro.
Sentándose junto a Mingyu, fue presentado ante los que, si bien recordaba, eran Jihoon –bajito y con cabello rosa pastel–, Seungkwan –bonito y de cabello castaño rojizo– y Wonwoo –de aura reservada y cabello negro un tono más oscuro que el suyo–.
—¿O sea que tú eres el famoso Jungkook? —preguntó Seungkwan, lanzándole una mirada divertida a Vernon antes de volver a fijar sus ojos en el pelinegro, recorriéndolo con la mirada — pero qué encantador.
Vernon bufó, rodando los ojos, y Jungkook sonrió con algo de incomodidad al chico que seguía mirándolo fijamente.
—Uh, gracias —murmuró, cohibido.
Seungkwan rio —Aw, eres tan lindo~
—Por Dios, cállate —siseo el rubio, lanzándole una mala mirada a su jefe/folla-amigo. El chico soltó una risa, observando como los ojos fríos de Vernon miraban a Jungkook con desagrado.
—Sí, bueno, ¿quieres algo para tomar, Jungkookie? —preguntó Mingyu, intentando deshacer la tensión entre su amigo rubio y Jungkook.
El pelinegro se relamió los labios, ignorando a Vernon y sonriéndole levemente al castaño —Mhm, claro.
—Está bien —Mingyu sonrió, antes de dirigir su mirada al chico sentado en el sofá frente a él —, ¿me acompañas, cariño?
Wonwoo levantó sus ojos de su celular, para sonreírle cálidamente al castaño —Por supuesto.
