Roto

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     Los miró a alejarse, preocupada por ellos y deseándoles lo mejor. La mujer suspiró observando a Jungkook tirar de Yoongi, casi corriendo y haciéndole ir a su velocidad, había que apurarse, que huir. Ahora fue su turno de guiar y tirar, rogando que no tardaran demasiado porque ya iban tarde, sus padres les iban a regañar.

Ambos estaban en trance, aturdidos. Yoongi no dejaba de repetir las palabras de la mujer como si de esa manera pudiera comprender mejor, entender el por qué se sentía así, mientras que Jungkook empujaba esa información y solo se centraba en pensar en sus padres, en lo preocupados que estarían y en cómo los regañarían por llegar tarde. Se preguntó qué castigo les pondrían, dándose cuenta de que no era momento de pensar en eso cuando un perro les ladró asustándoles.

Al seguir al hombre alcoholizado, Jungkook estuvo al pendiente fijándose en detalles que pudieran servirle para guiarse, así que no le costó demasiado trabajo ubicarse. No sería un problema el perderse, lo que si angustiaba al menor de los hermanos era la poca cooperación de su hermano, lo lento que se movía y lo pesado que se ponía al avanzar.

Qué mala idea había sido, pensó Jungkook, maldiciendo a sus hermanos por tener las peores ideas del mundo, estaba seguro de que se arrepentirían toda la vida de haber ido. Gruñó a su hermano, jalando del brazo pasando por las viviendas bajo la mirada de varias personas.

Llegó a sentir que el lugar no tenía fin, Jungkook temió por un momento que fuera tan grande la zona que tardarán horas para llegar al final. Para cuando lo lograron, encontrándose frente al descampado, el menor de los hermanos se vio tentado a buscar su teléfono para ver cuánto tiempo les había tomado, pero la inseguridad le impidió revisar.

En vez de eso se aferró a su hermano, recorriendo el camino que les guío hacia la comunidad, el mismo en el que se toparon con los muchachos. Kook rogó porque ya no estuviese ahí, cada vez había menos luz de día había un gran tramo que caminar para llegar a la parada del bus.

El miedo comenzó a alterar a Jungkook, el temor y la desesperación por salir de ahí, las ganas de irse corriendo tomado de la mano de Yoongi, pero su hermano seguía sin cooperar.

Su voz se quedó atorada en la garganta cuando vio un movimiento a su izquierda, una luz que llamaba mucho la atención. Seguían ahí, conversando mientras el bote al que arrojaban cosas estaba prendido en fuego, alumbrando los rostros jóvenes. Parecían divertirse, conversando entre risas y bromas. Jungkook dejó de verlos para avanzar más rápido, esperando siguieran tan concentrados en lo suyo como para no verlos, o simplemente ignorarlos.

Sin embargo, un gritó a lo lejos les llamó -¡Eh, los niños ricos ya se van!

-¡Volvieron!

-¿¡Ya se divirtieron?!

Jungkook tiró de Yoongi con fuerza, volteando atrás para arrepentirse al ver que dejaban sus cosas y se ponían a seguirlos. Eran unos seis muchachos, todos emocionados al parecer con la idea de perseguirles.

-¡Hyung! –Jungkook llamó asustado.

Yoongi volteó sobre su hombro a la vez que sentía el jalón en su brazo, se pidió mente fría, que reaccionará y actuara para proteger a su hermano. Viendo el peligro tan cerca, aceleraron el paso, pero en cuanto escucharon que detrás suyo se acercaban corriendo, ellos hicieron lo mismo. Los hermanos Kim corrieron, escuchando las burlas y carcajadas -¿¡Ya se van?!

-¡Déjenos algo de recuerdo niños ricos! –se escuchaban verdaderamente divertidos, como si al ver la reacción a sus gritos fuera divertido.

Por correr, Jungkook terminó tropezándose dolorosamente, cayendo con fuerza y quejándose. Las risas y burlas aumentaron mientras Yoongi regresaba en sus pasos para ayudar a ponerse de pie a su pequeño hermano, ambos volviendo a correr, sin siquiera voltear atrás para confirmar que les seguían. Satisfechos con el susto, los muchachos reían mirando a los hermanos alejarse, gritándoles más cosas que ni uno de los dos quiso entender.

Cosas De Adolescentes - NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora