Cosas De Adolescentes - Namjin

Último buen consejo

     Supuso que una buena cantidad de variados sushis serían suficientes para la noche, así que luego de ir a comprarlos, Unyong manejaba con Miri dentro de su bolso para perros en el asiento copiloto. El tatuado ya se había puesto de acuerdo con su hermano y con Jackson, así que sólo tenía que llegar para acompañarles esa noche y ayudarle a hacer el desayuno a Jackson por la mañana.

Al llegar a la calle y ver la casa con las luces encendidas, se cuestionó otra vez si estaba haciendo lo correcto, pero ya se había estacionado fuera de la casa de los Kim. Dio un pitido anunciando su llegada para que le ayudaran a bajar la caja de sushis, por lo que no tardaron en salir sus sobrinos, siendo primero Taehyung a quien no le importó en absoluto salir a la calle sin sus zapatos ensuciando los calcetines.

-¡Te puedes lastimar Taehyung! –escuchó el regaño de Yoongi, pero tanto el nombrado como Jungkook le ignoraron para ir al carro y abrir la puerta asombrándose por la caja.

-¡Debe de haber sushis infinitos ahí dentro! –exclamó Taehyung empezando a meterse al carro para salir con la caja, Jungkook tomándola por el otro lado. Apenas comenzaron a caminar y vieron a Unyong sacar a Miri, gritaron al unísono- ¡Gracias tío Unyong!

El hombre asintió cerrando el carro, encontrándose antes de entrar a la casa con Jackson saliendo en busca de ayudarle con algo -¡Oh! ¡Hola Uny! –sonó contento- Y también hola a tu perro.

-Es Miri –le recordó, dejándola en el suelo-. Y muerde.

La advertencia impidió que llevara su mano al pelaje blanco del perro para acariciarle. En vez de eso rió nervioso y espero a que entrara para cerrar la puerta con seguro, escuchando a los adolescentes saludar al recién llegado y a su mascota –Ojalá esta vez no se peleen Shooky y Miri. –rogó Hoseok esperando que la sala no se convirtiera en una escena de persecución como la de la vez pasada. Por precaución, ya habían guardado varios objetos frágiles.

-Hola tío Unyong –le saludó Jimin desde la sala con una sonrisa, la sala que ya se había convertido en un gran espacio con cobijas y almohadas por doquier, solo faltaba poner el colchón que de momento estaba recargado contra la pared, esperando a que le colocaran en el suelo. El adulto notó otro colchón, claro, no podrían caber solo en uno-, ¡Debe ponerse ya su pijama! –le animó.

-Lo haré en un momento –asintió acomodando su mochila, volteando a ver a Jackson para mirarle de arriba abajo, bufando cuando este dio una vuelta para que apreciara su pijama con estampado de Pokemón-, creo que mi pijama es bastante aburrida comparada con eso.

-¡No hay problema! –le empujó levemente el chino, guiándolo entonces al baño- ¡Vamos! Debes cambiarte ya para iniciar oficialmente la pijamada.

-¿Podemos ya empezar a comer? –preguntó Taehyung dejando a Jungkook expuesto ya que se había metido un sushi a la boca, teniendo la boca semiabierta demostrando que había comida dentro. Ambos muchachos estaban hincados frente a la mesa ratona, donde descansaba la gran caja de sushi. Yoongi, sentado en el sofá, solo estiró sus piernas para darles una patada a cada uno en la espalda- ¡HYUNG!

-¿Qué no pueden esperar? Ah –jadeó negando con su cabeza, subiendo el volumen de la televisión.

Unyong sólo volteó sobre su hombro buscando a su mascota, encontrándole oliendo el suelo mientras caminaba, dirigiéndose hacia Shooky quien estaba como congelado observándole, atento a lo que hacía. Decidió que no quería ver qué iba a pasar, así que mejor entró al baño para ponerse de una vez el pijama.

Jackson frotó sus manos contento, llamando a sus sobrinos para juntos arreglar todo para cenar ya y ver una película como habían tenido planeado, estaba ansioso por ignorar la película y verdaderamente centrarse en divertirse y jugar con sus sobrinos y Unyong, sería una gran noche. Antes de que pudiera abrir la boca, se oyó un fuerte ladrido.