AMiAmo (COMPLETA)

Capitulo 16: La primera oportunidad

Un día.

-¿A dónde va Amo? – pregunta Ace al verlo arreglarse

-Eh... saldré a verme con el abogado – responde un poco nervioso

-Oh, bueno ¿Llegarás tarde?

-No lo sé, espérame en mi alcoba – le acaricia el rostro y Ace se ruboriza por el toque suave de sus dedos.

-Está bien

Shun sale, se sentía nervioso y un poco mal por mentirle a Ace, le dice al chófer la dirección donde debía dejarlo para encontrarse con su instructor y le pide que no le diga a Ace nada por si llegara a preguntar por él.

Shun esperó hasta que Keith llegó a recogerlo, caminaron hasta su casa. Eran las cinco de la tarde así que no podía tardar demasiado, a Nana le dijo que estaría con su instructor del campamento para un proyecto, también le pidió que no le dijera a Ace. Se sentía tan mal pero debía hacerlo.

-Bueno Shun, ya estás aquí y ya sabes que va a pasar – menciona Keith, le había estado llenando la cabeza a Shun de muchos motivos para hacer esto, diciéndole que era por el bien de su relación y que en el futuro se lo agradecería.

-Me siento nervioso, no vamos a tardar ¿Cierto? – pregunta Shun, las cinco de la tarde era una hora muy cercana a la noche y luego Nana se preocuparía, pero Keith salía de sus clases justo a esa hora.

-No te preocupes, ven, vamos a mi alcoba y así no perdemos tiempo – Keith lo agarra de la mano y lo invita a subir al segundo piso. Llegan a su alcoba y el rubio no espera para besarlo, lo abraza y comienza a darle besos en el cuello, había deseado tanto hacer aquello sin la restricción del campamento.

-Keith... espera... Shun le aparta un poco mirándolo a la cara, no se sentía bien – yo... esto... debo hacerlo con él.

-Sí, tienes que actuar como yo, si quieres tomar el dominio de la situación solo debes tomar el control – responde Keith intentando ser paciente cuando en realidad su cuerpo ardía en deseos por este chico. Sonríe amablemente y le agarra de la mano, le besa los dedos lentamente y luego los labios.

-Hm... bi...en – Shun le deja hacer lo que quiera, tomando notas mentales en su cerebro pero la sensación de los besos cada vez se sentía mejor aunque no tanto como cuando lo hacía con Ace.

Keith tomó el control muy pronto, le quitó su ropa despacio y lo acarició, besó su cuerpo y le enseñó a masturbar al otro, tomando su mano para que frotara entre su entrepierna y así despertarlo. Shun se dejó llevar por las caricias, cuando Keith comenzó a tocarle su trasero se sintió muy asustado, pero el rubio rápidamente le trató muy bien, le hizo cosas que solo veía en videos pornográficos.

Shun gimió todo el tiempo, era su primera vez y le gustaba la sensación de sentirse deseado, Keith sabía cómo tratarlo y hacer que se relajara. Después de quitar todas sus ropas, el chico levantó sus piernas y empapó sus dedos con el líquido para lubricarle bien en su parte privada.

-¡Aah! – Shun gimió por el dolor, lentamente fue acostumbrarse a los dedos ajenos y pronto comenzó a sentirse bien, dejando salir suaves sonidos placenteros.

Keith solo lo miraba bastante complacido, había logrado lo único que quería con este chico. Remplazó los dedos por su propio miembro y entró en él lentamente disfrutando del hecho de que al fin lo logró, tenerlo, hacerlo suyo, tener sexo con el chico que le gustaba desde el primer día que lo vio, tener en sus brazos a ese deseoso cuerpo puro y que tanto había deseado.

Hace unos días.

-¡Oye Keith! – Un amigo le llama mientras estaba en un bar

-¡Ah, amigo mío! – Keith dice un poco ebrio – ven aquí, ven aquí... - lo abraza

-¿Cómo vas con tu pupilo?

-¿Qué, te lo vas a coger?

Keith asiente - No le permitiré cambiar de opinión, me gusta ese chico, es precioso y tan ingenuo, le dije que le enseñaría el sexo para que lo hiciera con su Ace – dice el nombre de este en un tono cursi.

-Jeje, si es lindo, recuerdo que me mostraste una foto ¿No es solo capricho tuyo? Haz tenido a varios chicos lindos, a algunos les rompiste el corazón y allí abajo – se burla el otro chico

-Hm me gusta, de verdad, es diferente. Estoy enamorado de él, no es un chico berrinchudo como los otros y además es muy inteligente pero no tiene malicia por eso me gusta. Pero... siempre está pensando en su amiguito, me causa celos. Tengo celos de ese dichoso Ace.

-Me imagino, pero dime cuando te acueste con él ¿Luego que harás? Ahora será lo contrario, será a ti quien te rompa el corazón cuando él se entregue a ese otro chico.

-Hm... me di cuenta de que él es más dominante con ese chico, por eso le voy a enseñar para que aprenda a coger – se ríe a carcajadas, a la vista de otros esto no sería para nada divertido.

-Ah... pero igual lo va a preferir y se quedará con él ¿Estás ayudando a tu rival?

-¡Ja! Ya verás, los adolescentes son estúpidos y luego de tirármelo voy a hacer lo que sea para quedarme con Shun

Su amigo se ríe – eso es tan tú, ya me preguntaba si habías perdido tu estilo, bastardo.

-Ja, jamás lo perdería

**

Ese día, Shun llegó alrededor de las nueve de la noche. Después de haber tenido sexo anal por primera vez se sentía muy cansado y sin darse cuenta se había quedado dormido en casa de Keith, despertó solamente porque escuchó la alarma de su celular y llamó al chófer de inmediato mientras se colocaba su ropa.

Nana estaba muy preocupada pero al menos llegó a casa. Shun subió a su alcoba, se sentía extraño y un poco dolorido, al llegar vio que Ace le estaba esperando y lucía un poco enojado.

-¡Dijiste que no ibas a tardar!

-Ah... lo siento, fue una larga reunión y necesito darme un baño – responde Shun ocultado su rostro, ahora sentía la vergüenza.

-Bien, pero debes recompensarme – responde Ace

-Sí – Shun entra al baño, se sentía sudoroso y sucio, no le gustaba esa sensación para nada, rápidamente se metió a la ducha enjabonando todo su cuerpo, le dolía un poco su trasero pero Keith le dijo que no dudaría, le entregó una crema para que la usara después de limpiarse. Su cuerpo se sentía diferente, más ligero y un poco erotizado.

Shun salió del baño con su pijama ya puesta, tardó un poco más porque aplicó aquella crema y pronto se sintió menos dolorido. Ace estaba acostado en su cama sosteniendo el libro que leerían, pero Shun no se sentía con ganas de leer, solo quería dormir.

-Hoy no tengo ganas, estoy cansado ¿Vamos a dormir, si?

-Hm... ¿De verdad? –

-Sí – Shun se acuesta a su lado y lo abraza ocultando su rostro en su pecho – Ace, te quiero.

-Hm... yo también

-Te prometo que cuando estemos listos para hacerlo, no te va a doler

-¿Eh? ¿Doler? – Ace se ruboriza, no esperaba que dijera algo así de repente. Sabía a qué se refería pero que lo dijera justo ahora era muy extraño.

-Sí, te lo prometo Ace, te quiero – Shun siguió abrazándolo, su corazón latía demasiado rápido, no sabía qué era lo que estaba sintiendo, tenía miedo y también se sentía culpable.

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