Verano (AbbacchioxBruno)

Capítulo 2: Biblioteca

Fugo les condujo por varios pasillos, aparentemente temeroso por lo que hacia, sabia que no debía, ya lo habían ayudado y pedirles otro favor de nuevo, seria abuso. 

Aunque Fugo se juntaba con el chico malo y popular de la universidad, eso no lo hacia abusivo a él, no del todo. Su relación con Leone, jamás lo hacía ver mal.

-¿A dónde vamos?- pregunto Mista, tratando de romper el silencio, y Fugo se detuvo frente a la puerta de la biblioteca 

-El trabajo... yo no lo hice solo, me ayudaron- confeso Fugo, mirando a sus amigos –Se llama Giovanna, le pedí ayuda y creo que si tu se lo pides directamente... quizás él te puede ayudar- les dijo Fugo, y abrió la puerta. 

Leone trato de asimilar todo lo que Fugo le trataba de decir, y camino atrás de él todo el tiempo, llegaron a recepción y notaron a un chico de cabello rubio y piel clara. Fugo les hizo seña de que esperaran y se acercó a él. Notaron el cambio de palabras, unas sonrisas entre ellos y Fugo finalmente les señalo que se acercaran. Mista se encogió de hombros y le siguió.

-Ellos son Leone Abbacchio, y Guido Mista- los presento Fugo–Él es Giovanna- 

-Giorno - sonrió el joven recepcionista, y Leone asintió, al oír su nombre de pila –Así que ustedes son el grupo popular de todo el colegio- murmuro, y los chicos solo sonrieron, pero no dijeron nada. 

-Fugo me comento que uno de ustedes necesita ayuda con el maestro Rhodes- comento Giorno , y Mista rápidamente señalo a Leone, quien asintió de nuevo. 

–Así que tú eres el afortunado- 

-¿Puedes ayudarme?- pregunto Leone, y él negó 

-El señor Rhodes, es muy difícil de complacer, sobretodo con los futuros graduados... ¿Qué te pidió?- le contesto Giorno , y Leone suspiro 

-Trabajo a mano, tema libre y en dos semanas- le contesto y Giorno  se quedo pensando, a la vez que sonrió. 

-Me temo que son las consecuencias a pagar, por no poner atención en clases, lo siento- le contesto en tono de burla, y Leone no pudo reclamarle,  no podía decir que no tenia la razón, todo era cierto. 

-No quiero que me hagan el trabajo, solo quiero alguien que me guié- se atrevió a decir Leone, y Mista solo lo miraba. ¿Acaso el recepcionista se maquillaba?

-¿Eres gay?- pregunto Mista de la nada, y Giorno  junto con Fugo reaccionó, mirando al chico de pelo rubio –Tienes maquillaje... y ese peinado...- señaló su trenzado. 

-El que use maquillaje, no significa que sea gay- 

-¡Mista!- reclamo Leone, llamándole la atención a su amigo, quien solo pudo encogerse de hombros –Tu sabes que con ellos no nos metemos- le dijo, y él solo bajo la mirada y asintió. 

-Lo lamento Abbacchio- murmuro, y si antes se había sonrojado Giorno  por el comentario sorpresa, ahora era Mista  por la vergüenza que sufría ante el chico. Por ese instante había olvidado lo que Leone con ellos había acordado, había chicos 'diferentes' en el colegio y sí, Leone podría burlarse de cualquier cosa del mundo, pero con ellos –gracias a su madre- tenían su respeto. Por eso nunca se metían con ellos, los dejaban fuera de las bromas pesadas de la universidad. 

-Giorno ... ¿Enserio no puedes ayudarnos?- reacciono Fugo, mirando a su amigo tras el escritorio. Giorno  torció la boca, miro un par de hojas en el escritorio, y luego volvió la vista a los pasillos. ¿Podría o no podría? 

-¿Si les ayudamos que ofrecen?- les pregunto, y ellos se quedaron perplejos al no entender lo que decía. Giorno  meneo la cabeza lentamente, y les dijo que le siguieran, no sin antes dejar las mochilas que llevaban bajo el escritorio. 

Leone solo miro a Fugo, quien camino junto a Giorno  mientras Mista iba del lado suyo. Todo a su alrededor era simples pasillos, no había gente, no había ruido, solo silencio y libros, con mas libros. Pero al menos Mista, no podía negar que le gustaba la vista de enfrente, hasta que Leone le golpeo en el hombro para que dejara de mirar al rubio. 

-Esperen un momento- les dijo Giorno , mirando a Fugo y Leone, mientras evitaba contacto con Mista. No evito sentir que le miraba de una manera diferente a la que estaba acostumbrado, y eso no le estaba gustando. 

Leone asintió y lo miraron alejarse hacia un pasillo vacío, o eso pensaron hasta oír una risa y aparecer un chico acomodando libros. Ellos no dijeron nada, y Leone solo pudo suponer que tal vez ese chico iba a ayudarle en su trabajo. 

-Tenemos visitas- murmuro Giorno , llamando la atención del joven, quien volteo a verlo y se acomodó los lentes.

-¿Quiénes son?- pregunto él, mirando a los jóvenes que estaban detrás de él, y así como les miro, aparto la vista de ellos. Giorno  solo sonrió. 

-Tranquilo, no van a hacernos nada- le respondió, y los miro –Vienen a pedirte ayuda- le dijo Giorno , y señalo al trió para llamar su atención, a la vez que hizo con señas de que solo se acercara Leone, dejando a Fugo y Mista esperando del otro lado del pasillo. 

-No Giorno , no- susurro el joven de lentes, y quiso huir pero algo le impidió hacerlo y solo miro que el joven al mirarlo le sonrió. 

-Leone... Él es Bruno, mi mejor amigo y... tu pase de salvación contra Rhodes- murmuro Giorno  sonriendo, y él joven albino solo saludo. Bruno no pudo decir una sola palabra, y solo bajo la mirada.

-Eh... Giorno  me dijo, que podrías ayudarme con un trabajo. No quiero que lo hagan, solo quiero alguien que me guie para saber que lo estoy haciendo bien- dijo Leone, al notar que el chico no decía nada. Una ventaja de ser el chico popular es que muchos le conocían pero al ser de los rudos, también tenía su desventaja en ciertos casos. 

-Pero dinos... ¿Qué nos ofreces a cambio de nuestra ayuda?- insistió Giorno , y Leone no respondió. No podía negar, después de todo que ellos podrían pedirle algo a cambio de la ayuda de ellos dos. 

-Él esta hablando con la rata de biblioteca no contigo- interrumpió Mista, ofendiendo a Bruno rápidamente quien reacciono. 

-¿A quien llamaste rata?- le respondió Bruno, llamando la atención de Giorno . No quería que se armara un problema. 

-¡Te dije que te quedaras atrás!- respondió Giorno , defendiendo a su amigo, al notar que Mista no obedeció y estaba parado justo detrás de Leone. 

-Tú no me des órdenes- 

-¡Guido Basta!- reacciono Leone, interrumpió poniéndose entre los tres. Bruno clavo su mirada en el joven de pelo castaño, mientras Giorno  le amenazó con la mirada y Leone rogaba porque la boca floja de Mista no le hiciera perder su oportunidad. 

-Ahora discúlpate- le ordeno, al notar que nadie dijo nada y  todos lo miraron a él. 

-¡¿Qué?!- 

-No debiste decir eso, y no voy a repetirlo otra vez, discúlpate- le dijo Leone, viendo a su compañero de grupo y lo miro. Mista se tuvo que morder la lengua, pero no se atrevió a alzar la vista ni mucho menos llevarle la contraria. 

-Lo lamento- murmuro, y ellos no dijeron nada 

-No te oí Mista- dijo Leone, mientras Bruno solo pudo mirar y Giorno  sonrió. Leone tenía total control sobre su amigo. 

-Lo lamento, no quise decir eso- repitió Mista, y tanto Giorno  como Leone de nuevo sonrieron. Leone pagaría mas tarde por esa vergüenza, pensó Mista. 

-No, no voy a aceptar la disculpa, y menos ayudarte- murmuro Bruno sin mirarlos, y se marcho. Trato de no correr lejos, ni de tampoco mirar atrás, solo se fue sin decir adiós. Giorno  no espero esa reacción de su amigo y dejo al resto de los chicos sin habla.

-Lo lamento- dijo Giorno , encogiéndose de hombros y Leone respiro profundo mientras asimilaba que él joven se había ofendido, por eso lo había rechazado. No debía de enojarse, solo se había arruinado todo 

-Esta bien- respondió Leone, y Fugo rápidamente entendió que no debía de decir nada, solo jalar a Mista del brazo, antes de que dijera alguna otra palabra, y se marcharon. 

-Gracias-  contesto Leone, y se fueron a casa.

☆.☆.☆.☆
Yup. En éste fic, Bruno Bucciarati usa lentes.
Pd. Vamos a dejar opiniones personales al final de cada episodio.  Creo(?)