Casada por su obsesión || Libro #1

#17: Miedos

Cassie Walker

Suspiro una y otra vez, perdiendo la cuenta de las veces que el aire es expulsado de mis labios, pero no puedo evitarlo desde que llegue a la casa de mi amiga. Jess por su parte se apresura en dejar la taza con chocolate caliente frente a nosotras, justo en la mesita de centro. Vuelve a mirarme, pero no dice nada de lo que quiero escuchar, solo se acomoda en su lugar y se cruza de brazos para mirarme fijamente. Una sonrisa burlona sale de sus labios, dándome a entender que la situación que le conté hace unos instantes, le resulta algo divertida.

-No puedo creer que ese chico este loco por ti.- suelta de una vez, se lo ha estado guardando desde hace mucho.

-No está loco por mí, Jess.- le demando seria, pero no puedo evitar que mi mente vuele hasta donde está el chico de ojos verdes:- Solo que.... Esta loco el chico.

-Sea como sea. El chico está harto de que hables de tu novio cada vez que se encuentra, te lo dijo. Y también le agradezco ese gesto.

La miro algo confundida:- ¿A qué te refieres?

-Que él se atreviera en decirte que no le agrada para nada a Austin.- dice como si nada, la miro bastante mal y ella se incorpora para apresurarse en decir:- Lo lamento, amiga, pero Austin no me agrada en absoluto y lo sabes.- me señala con su dedo índice.

-Austin es bueno...

-Para hacerse el idiota. Si, de eso ya me di cuenta.- habla interrumpiéndome:- Y no quiero que intentes de que nos llevemos bien. Porque te conozco, Cassie Walker, que harás lo que sea para juntarnos y convivir.- hace una mueca.

Cojo un cojín del sillón y se lo lanzo a su cara:- No es gracioso, Jessica McCore.- le digo molesta:- Sabes perfectamente que amo a Austin y lo quiero con todo mi corazón. Eres mi amiga desde la infancia, se supone que debes ayudarme.

-Y lo hago.- suelta:- Pero con respecto a tu novio, es algo...- se queda pensativa unos instantes:- No sé qué decirte sobre tu novio.

Casi grito de la molestia cuando me levanto del sofá y camino sin rumbo fijo, solo estoy dando vueltas a la misma estancia:- Solo quiero que me ayudes sobre lo que paso esta mañana. Quiero saber quién fue el idiota quien me hablo para decirme aquella estupidez y hacerme sentir mal.- suspiro al sentir lágrimas en mis ojos:- No quiero pelearme con mis padres.- antes de que Jessica diga algo la interrumpo sin darle tiempo:- Quiero que este día termine como siempre.

Mi amiga se levanta de donde estaba sentada y se acerca a mí, sus brazos rodean mi cuerpo y dice:- Tranquila, amiga, esto va a pasar. Lo único que te puedo decir, es que no puedes estar lejos de tus padres y ocultarte para no querer saber lo que está pasando en realidad. Aun que digas que no, pero ese tipo hizo que una duda entrara en tu cabeza.

-Tienes razón, amiga.

-Anda. Vamos a que vayas por tus padres, para que...- el tono del timbre interrumpe a mi amiga, ella me mira unos segundos y se separa de mi para salir de la sala de estar, la sigo también para saber quién ha tocado el timbre:- Debe ser mi madre. A lo mejor olvido algo.

-Puede ser.- me encojo de hombros.

Jess abre la puerta y noto como se tensa ante una persona que se encuentra frente a ella. No escucho bien lo que le dice y ella asiente sin hablar nada. De pronto, mi ritmo cardiaco aumenta y comienzo a sentirme muy mal al mirar a mi madre entrar por la puerta principal. Hay dos cosas que se han cruzado por mi mente:

#1; Correr a sus brazos y llorar.

#2; Portarme indiferente con ella.

Por más que quiera ser rebelde, no puedo hacerlo. Los quiero mucho como para hacerles esa malicia de mi parte. Alessa se acerca a mí, sin ninguna expresión de molestia o de tristeza:- Cassie.- me llama, pero no espera respuesta de mi parte:- Pensé que ya la habían robado o hecho algo malo.- se dirige a mi amiga, quien está de pie sin omitir alguna palabra:- Siempre estás ahí para cuidar, Jessica, gracias por ello.