#62: Lujuria Pasiva

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Enero...

Harry Styles

Nos sentamos en una de las mesas que están al lado del ventanal del local. Dejo la bandeja en la superficie, con nuestro café y panque en ella:- ¿Me dirás quien hizo el diseño?- le pregunto a la chica, una vez que deja su celular en la mesa.

-¿Sobre qué?- pregunta de vuelta, tomando su vaso con su café y un panque del plato.

La miro mal:- No te hagas la que no sabes, Cassie.- le reprimo indignado, cogiendo mi vaso para llevarlo a mis labios y beber con cuidado la sustancia. Regreso el vaso a su lugar y vuelvo a mirar a la chica:- ¿Me dirás quien lo hizo, Cassie Walker?- cruzo mis brazos por encima de la mesa, dando un aspecto demandante.

-Oh, vamos.- suspira resignada:- ¿Realmente quieres saberlo?- me pregunta con media sonrisa sarcástica en sus labios.

-Claro.- asiento, cortando un pequeño pedazo del panque y llevarlo a mi boca para comerlo.

Suspira la chica, bebiendo un poco de su vaso y lamer sus labios mojados por el café:- ¿Te acuerdas el día que fui a buscarte dentro de la tienda?- pregunta, recordando lo que sucedió hace semanas atrás, asiento sin dejar de mirarla:- Pues Ed fue quien dedujo que te gustaría tener algún instrumento y él me dijo que podía darte eso...- baja su mirada al panque que hay en su plato:- También quería darte regalo una guitarra y no sabía cómo.

-Así que Edward fue quien te ayudo a comprarlo.- determino para confirmar su explicación.

-De hecho... yo le dije que quería regalarte una y él fue quien hizo todo lo demás.- se encoje de hombros:- La plumilla fue él quien la diseño. La guitarra la diseño él junto con sus amigos o primos, no me acuerdo bien y el estuche lo hizo Clark.

-¿Quién es él?- pregunto con recelo al escuchar el nombre de un chico.

-Deja de ser tan maldito, Harry, que no te conviene ponerte así ahora.- dice ella, se cruza de brazos molesta.

-Solo estoy preguntando quien es él. No es para tanto.- defiendo mi punto de vista.

Niega para ella misma:- Clark es el primo de Edward. Entre ellos hicieron el diseño de la guitarra, personalizándola de manera tan cultural.- muerde su panque y lo regresa al plato:- Así que.... Gracias a ellos tienes una guitarra tan como tú.- ríe por un momento, pero no se puede aguantar hasta soltar la risa.

-¿Cómo eso de tan como tú?- le pregunto confundido, frunzo los labios.

-Si.- asiente la chica:- Tan especial y único como tu persona.- dice como si nada, tomando su vaso para beber de su café. Terminando de dar su explicación acerca del regalo que me dio en navidad, horas después de haber tenido sexo en la sala.

El silencio se interpone ahora entre nosotros y nos quedamos observando hacia la calle, que está llena de personas caminando por la banqueta y los autos conduciendo en las calles de Holmes Chapel. Me apresuro en terminarme el panque, no es mucho lo que me queda de él y paso a beberme el café que ya está tibio, terminando su contenido regreso el vaso a la bandeja. La chica comienza a decirme ciertas que quiere hacer aquí en el centro. No quiero alegarle mucho, así que solo le digo que sí. Aunque no sé si lo hare o no. Espero a que Cassie termine de su café, después de unos minutos más, por fin lo hace. Nos ponemos de pie y llevo la bandeja al cesto de basura, tirando los vasos desechables juntos con los platos a la bolsa de basura, dejando la bandeja junto con las demás que están acomodadas. Ajusto la chaqueta a mi cuerpo, porque está haciendo mucho frio ahora. Por suerte no queda nada de la lluvia que paso hace 10 días atrás, los charcos han desaparecido casi por completo.

Casada por su obsesión || Libro #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora